Al hilo de la liturgia diaria 2021-22 (2)

SÁBADO 26.11.2022
Sábado de la 33a semana del TO, par
Muchas veces a lo largo de la vida experimentamos la pobreza y finitud de nuestra propia persona y de nuestros propios proyectos: la finitud del mundo presente nos golpea con crudeza. Y esto que debería ser ocasión de «despertarnos y de mantenernos en pie ante el Hijo del hombre», o, con otras palabras, de ponernos a la búsqueda del «río de agua de la vida», con frecuencia, y más en el mundo actual, nos lleva a la huida, a dejar «embotar nuestros corazones y nuestra mente con juergas, borracheras y las inquietudes de la vida». Oportunidad perdida. Hacemos muchas cosas y celebramos muchas fiestas, pero lo esencial lo dejamos escapar. A las puertas del Adviento y como conclusión del año litúrgico que hoy termina, con toda la Iglesia, gritamos: Maranatá.

VIERNES 25.11.2022
Viernes de la 34a semana del TO, par

Si por un momento hubiéramos podido existir antes de la existencia del Universo, ¿podríamos haber concebido nosotros la existencia del mismo? Seguro que no: los científicos van descubriendo cada vez nuevas maravillas que nos maravillan y desbordan: ¡Quién podría haberlo imaginado! De la misma manera, no podemos concebir cómo será la vida más allá del mundo presente, pero, al mismo tiempo, tenemos indicios (como los «brotes de la higuera y de todos los demás árboles») que nos hablan del «cielo nuevo y de la tierra nueva» cuando pase esta «primera tierra»: las mismas maravillas del Universo, pero, sobre todo, el testimonio de fidelidad de los santos. Fidelidad en el amor, fidelidad en la entrega, fidelidad en la esperanza… cuando todo parecía “decir” lo contrario.

JUEVES 24.11.2022
Jueves de la 34a semana del TO, par
Todo lo humano tiene fecha de caducidad, simplemente porque es humano. Si fuese divino sería eterno, pero es humano. Por ello, hasta los grandes imperios de la tierra pasarán. Caducidad de todo lo humano que el pecado, sobre todo el pecado de soberbia (el creernos dioses), agrava y precipita a su ruina, porque se apoya sobre una mentira. Ruina que lleva aparejada consigo violencia, angustia, dolor, sufrimiento… Pero, al mismo tiempo, una semilla de esperanza: «Cuando empiece a suceder esto, levantaos, alzad la cabeza; se acerca vuestra liberación». Como la Cruz del Viernes Santo es la puerta de la Pascua, la ruina de todos los imperios del mundo es la puerta a la Vida «por los siglos de los siglos», la puerta al «banquete de bodas del Cordero».

MIÉRCOLES 23.11.2022
Miércoles de la 34a semana del TO, par
El autor del libro del Apocalipsis evoca la salida de Egipto y hace un paralelismo con aquel momento histórico: como los israelitas entonaron un cántico tras el paso del mar, así los salvados entonarán también su canto tras la salvación: «el cántico de Moisés, y el cántico del Cordero». Es sólo una imagen que nos quiere transmitir la victoria final de Dios sobre el mal de este mundo: «vendrán todas las naciones y se postrarán ante ti». Imagen necesaria para fortalecer la fe y la perseverancia de los perseguidos, ya sea con violencia explícita o ya sea con el continuo machaqueo de las ideologías ateas y sus propagandas. Que el Señor grabe como un sello en nuestro corazón sus palabras: «Pero ni un cabello de vuestra cabeza perecerá; con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas».

MARTES 22.11.2022
Martes de la 34a semana del TO, par
La hora de « la hoz y de la siega» llega para todo y para todos. No importa lo grande que llegue a ser un imperio (de cualquier tipo) o lo magnífico que reluzca un templo (u otra obra del hombre), todo tiene su «tiempo para morir». Son momentos duros para las personas y los pueblos, momento que hay que estar alerta para no dejarse engañar por embaucadores («Yo soy»), pero, al mismo tiempo, oportunidad para buscar lo inmortal que se oculta debajo de lo mortal… Como lo buscaron y encontraron los santos, especialmente los mártires, de todos los tiempos. Hoy celebramos a santa Cecilia, patrona de los músicos, que ella, de la mano de la Fe, de la Esperanza y de la Caridad, nos ayude a entonar con nuestra vida un canto de alabanza al Dios que «es rey».

LUNES 21.11.2022
Lunes de la 34a semana del TO, par
La hora de la verdad, la hora del triunfo, no de quienes se plegaron al mundo, sino de quienes, en medio de las persecuciones y dificultades de la vida, «siguieron al Cordero». El Apocalipsis se escribió para transmitir ánimo y fortaleza a una comunidad perseguida. Pero la hora de la verdad no es sólo un final, es también un “hoy, aquí, ahora”: la generosidad de la «viuda pobre que echó dos monedillas en el tesoro del templo» nos señala el camino. Todo lo que con generosidad se entrega, sea tiempo, dinero o bienes materiales, es semilla de vida eterna. Por el contrario, lo que sólo se hace “mirándose el ombligo” lleva, tarde o temprano, al vacío y sinsentido… «Busquemos siempre el rostro de Dios».

DOMINGO 20.11.2022
Domingo XXXIV del TO, Jesucristo, Rey del Universo, ciclo C
Dios instituye en el Antiguo Testamento la realeza: «Tú pastorearás a mi pueblo Israel», pero pocos fueron los reyes de Israel y Judá que fueron reyes-pastores según el corazón de Dios, fueron más bien reyes según el corazón del mundo, quizá por ello la realeza se acabó perdiendo. Por el contrario, hoy celebramos a Jesucristo como rey porque, antes que nada, fue pastor… pastor cercano y amante de cada “oveja”, de cada uno: por él fuimos creado, por él somos sostenidos, por él estamos destinados a la Vida… La Cruz del Viernes Santo, entre dos ladrones, sella el Amor que todo lo sostiene, aunque no todos sean capaces de reconocerlo. Dos ladrones, dos vidas erradas, llenas de crímenes… Dos formas de dejarse mirar por Jesús. Uno se deja envolver, empapar, transformar por esa mirada y entra con Él en su Reino. El otro se repliega detrás de su resentimiento o soberbia, se cierra a la presencia del Reino. Y yo, ¿cómo me dejo yo mirar por Jesús? ¿Cómo acojo su mirada en mi corazón y en mi vida? ¿Le dejo que reine en mí?

SÁBADO 19.11.2022
Sábado de la 33a semana del TO, par
Dios «no es Dios de muertos, sino de vivos; porque para él todos están vivos». No se “ven” igual las cosas mirándolas desde nuestros ojos que mirándolas desde los ojos de Dios. Dios es Dios, nosotros pobres creaturas (aunque a veces “juguemos” a ser dioses). Por eso pretender, –como los saduceos–, encerrar a Dios en nuestras pobres inteligencias o teologías es necedad y nos engañamos… y nos empobrecemos. Pero también es necedad pretender matar a Dios matando a sus testigos y mensajeros. Quizá, en algún momento parecerán haber ganado los enemigos de la fe, pero es sólo espejismo: «después de tres días y medio, un espíritu de vida procedente de Dios entró en ellos, y se pusieron en pie». Danos Señor la gracia de mirar la vida con tus ojos, ojos de amor y de misericordia, ojos llenos de vida y esperanza, para que no nos endiosemos, o para que, en el otro extremo, no nos desanimemos cuando el mal parece triunfar.

VIERNES 18.11.2022
Viernes de la 33a semana del TO, par
Como Jesús o como el profeta del Apocalipsis, si te tomas la vida en serio, si intentas ser coherente, si, en definitiva, buscas a Dios… la vida te mostrará al mismo tiempo su lado más amargo («mi vientre se llenó de amargor») pero también el más dulce («en mi boca sabía dulce como la miel»). La amargura de sentirte un poco solo y a contracorriente de los demás y de lo políticamente correcto, incluso experimentarás las incomprensiones, críticas y el vacío de quienes creías tus amigos… («Buscaban cómo acabar con Él»). Pero, al mismo tiempo, sentirás la satisfacción de saberte en conexión con el río de la vida y de la gracia, sentirás la fuerza de una presencia… la presencia de Aquél que cuenta contigo y te envía: «Es preciso que profetices de nuevo…».

JUEVES 17.11.2022
Jueves de la 33a semana del TO, par
¿Qué hubiera pasado si los judíos en su conjunto hubieran reconocido a Jesús como el Mesías esperado? No podemos hacer historia-ficción, pero seguro que muchas cosas hubieran cambiado en la historia. Lo que sí conocemos son las lágrimas de Jesús «llorando sobre Jerusalén porque no reconoció lo que conduce a la paz». Imagen emotiva que nos habla de la kénosis del Señor y de su amor por nosotros. Y hoy, como entonces, cuántas veces buscamos o esperamos mesías salvadores y le volvemos la espalda al único que «es capaz de abrir el libro (de la historia) y sus siete sellos», mientras él sigue llorando por nosotros…

MIÉRCOLES 16.11.2022
Miércoles de la 33a semana del TO, par
El miedo, qué mal compañero es. Nos atenaza, bloquea, y nos incapacita para dar lo mejor de nosotros mismos: el alumno que se le borra su saber en un examen, el enamorado que transpira y no le salen las palabras bonitas que había preparado, etc. etc. O, por el contrario, el miedo nos vuelve violentos, agresivos, nos impulsa a hacer lo que nunca hubiéramos querido hacer, etc. Y sin embargo, a nivel religioso, cuántas veces se sigue (mal)educando en el miedo a Dios. Si el Dios que nos vino a revelar Jesucristo fuese el Dios del miedo, ¿dónde situar entonces la imagen de este Jesús que «caminando delante de nosotros, sube hacia Jerusalén»… por nosotros? No, el Dios de Jesucristo es el Dios que por amor «creó el universo, creó lo que no existía», y te creó a ti. Y a ti, con infinita paciencia y misericordia te sigue esperando siempre.

MARTES 15.11.2022
Martes de la 33a semana del TO, par
A la Iglesia de Éfeso el Señor le decía en la primera lectura de ayer: «Tengo contra ti que has abandonado tu amor primero». Y hoy son las Iglesias de Sardes y Laodicea a las que habla el Señor: «Tienes nombre como de quien vive, pero estás muerto», y «porque eres tibio, ni frío ni caliente, estoy a punto de vomitarte de mi boca», respectivamente. A Zaqueo, la gente que rodeaba a Jesús, le impedía ver al Señor. Muchas veces a las comunidades cristianas, la rutina, ¡la fría rutina, sin alma, sin espíritu!, que se ha apoderado de sus vidas, y la autosuficiencia («Yo soy rico y no tengo necesidad de nada») nos ocultan también al Señor. Zaqueo se subió a un sicómoro, y este gesto atrevido y fuera de lo normal le permitió encontrarse con el Señor. Saliendo de los caminos rutinarios y trillados de todos los días ¿a qué “sicómoro” nos tendríamos que subir nosotros para recuperar una fe viva y un amor ardiente al Señor?

LUNES 14.11.2022
Lunes de la 33a semana del TO, par
A veces también nosotros, con el paso de los años, nos estancamos en hábitos y costumbres que nos vuelven “ciegos” a la Luz de la Vida. Y también nosotros, como el ciego que pedía limosna a la orilla del camino, necesitamos a alguien que nos diga: «Pasa Jesús el Nazareno», que nos hemos “atascado” en la vida espiritual y que necesitamos también nosotros gritarle al Señor: «¡Hijo de David ten compasión de mí»… «Señor, que recobre la vista»… Señor, que recobre «el amor primero». Una revisión que no sólo es personal, es también comunitaria. Nuestras comunidades parroquiales (y otras), hacen muchas cosas, intentan servir lo mejor posible, pero ¿no «habremos abandonado nuestro amor primero»?

DOMINGO 13.11.2022
Domingo XXXIII del TO, ciclo C
Edificios, instituciones, personas, etc. que parecía que iban a estar siempre ahí y ya no están… (Cf. Evangelio). “Vivos” que quieren vivir sin trabajar a consta de los demás, una picaresca muy extendida… (Cf. 2ª lectura). Cansancio de la vida, cansancio de ser “bueno” mientras que otros alrededor… (Cf. 1ª lectura). Ocurrió y sigue ocurriendo, sólo Dios permanece. El Dios en el que nos apoyamos cuando todo se tambalea: «Ni un cabello de vuestra cabeza perecerá». El Dios en el que confiamos cuando todo parece fracasar: «Os iluminará un sol de justicia y hallareis salud a su sombra». El Dios que pone serenidad y equilibrio en nuestra vida: «Trabajen con sosiego para comer su propio pan». «Aclamemos, pues, al Rey y Señor», y dejémonos guiar por Él en esta hora presente (y difícil).

SÁBADO 12.11.2022
Sábado de la 32a semana del TO, par
Vivimos en estos momentos tres amenazas que nos encogen el corazón: la amenaza de una destructiva guerra nuclear, la amenaza del calentamiento global cuyas consecuencias son imprevisibles, y la amenaza de una gran crisis económica y la consecuente pobreza. Pensábamos que el hombre iba a instaurar el paraíso en la tierra, dejamos de “descansar” nuestra vida y nuestros proyectos en Dios, y… Es la hora de ponerse de rodillas y «clamar a Dios día y noche», sin cansarnos, al tiempo que «con plena lealtad» vivimos y practicamos la caridad con el prójimo.

VIERNES 11.11.2022
Viernes de la 32a semana del TO, par
Me impresiona en nuestros días, y me llena de dolor, esa huida hacia adelante que es el consumismo y el activismo frenético que se ha implantado en nuestras sociedades: comprar, ir de un lado para otro, viajar, etc. sin tiempo para detenerse, para mirar las estrellas, sentir el infinito que anida tanto fuera como en “mi propio corazón”… y no preguntarme por el sentido de “mi propia existencia” y de todo lo que hago. Y, luego, la muerte que, por más que no queramos mirarla cara a cara, nos amenaza a todos, no importa la edad, y más en estos momentos de violencias de todo tipo y de crisis nuclear.
Así que en este día, por nosotros y por todos: «Ábreme los ojos, Señor, para que pueda contemplar las maravillas» de tu misericordia… y «caminar en la verdad».

JUEVES 10.11.2022
Jueves de la 32a semana del TO, par
Los fariseos esperaban un reino de Dios exterior: quizá la expulsión de los romanos, la libertad de los judíos, un culto en Jerusalén perfecto, etc. Pero el reino de Dios no es algo, sino Alguien. El reino de Dios se ha manifestado en Jesús pero ellos no fueron capaces de reconocerlo. También nosotros ponemos muchas veces el peso del reino de Dios, de nuestra felicidad, en cosas exteriores (sólo hay que ver la cantidad de negocios en torno a la belleza y la salud que pululan en nuestras urbes), pero no reconocemos al que vive y sigue presente entre nosotros, y que nos invita a entrar en comunión con Él por el Espíritu. Pablo entendió bien esto y por eso apela a esa profundidad del corazón para que Filemón vuelva a recibir a Onésimo «ya no como esclavo… sino como hermano querido… en el Señor». El reino de Dios se abrió paso así, un poco más, en aquella comunidad cristiana que se reunía en casa de Filemón para celebrar su fe.

MIÉRCOLES 9.11.2022
Dedicación de la Basílica de Letrán
1Cor 3, 9c-11. 16-17; Sal 46(45), 2-3. 5-6. 8-9; Jn 2, 3-22
La Catedral del Papa, signo e invitación a la unidad de la Iglesia en torno al obispo de Roma. Con ser importantes, los templos pasarán, quizá sean destruidos por la violencia y los impíos, pero Dios seguirá habitando en medio de su pueblo: «¿No sabéis que sois templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en vosotros?». Es más, hasta los que se revuelven contra ello, no podrán dejar de ser nunca ese templo en el que Dios habita. Será un templo maltrecho, será horrible a los ojos de los hombres, parecerá estar podrido… pero ahí, como un rescoldo inextinguible sigue Dios presente. ¡Cuánto tiene que cambiar nuestra mirada sobre los demás, especialmente sobre nuestros enemigos!: «No convirtáis en un mercado la casa de mi Padre». Tal vez la conversión del mundo pasa por ese cambio de la forma de mirar, de nosotros los creyentes, a los demás.

MIÉRCOLES 9.11.2022
Miércoles de la 32a semana del TO, par
«No por las obras de la justicia, sino por su misericordia» se ha manifestado la salvación: «justificados por su gracia». Y la gracia “pide” en nosotros la gratitud para que su “eficacia” llegue a plenitud. ¡Ay si la fe no lleva al agradecimiento cada día! Pero qué difícil es ser agradecido, con qué rapidez nos instalamos en el “me debes” o “me merezco” o “yo lo he ganado”… también ante Dios. De los diez leprosos sólo uno se vuelve a dar gracias a Jesús: diez son curados, pero sólo uno es salvado. Y yo, ¿cuántas veces al día me vuelvo agradecido hacia Dios o aquellos con los que convivo para decirles “gracias”?

MARTES 8.11.2022
Martes de la 32a semana del TO, par
Siervos inútiles somos, sí, pero no aplastados por el peso de la opresión o de nuestra inutilidad, sino “elevados” por la fuerza de un Amor que sobrepasa toda previsión humana: «Pues se ha manifestado la gracia de Dios, que trae la salvación para todos los hombres (…) el cual se entregó por nosotros para rescatarnos de toda iniquidad». Lo demás se nos da por añadidura: «enseñándonos a que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, (…) y así llevemos ya desde ahora una vida sobria, justa y piadosa (…) dedicado enteramente a las buenas obras». Pero cuando en el centro de nuestra vida hemos quitado el Amor y hemos puesto (y, tristemente, seguimos poniendo) el miedo o el puro egoísmo, la vida se vacía y nos llenamos de violencia. Contemplemos en este día, una vez más, el misterio del Amor que brota, como una fuente, del árbol de la Cruz y sea el Señor crucificado «nuestra delicia», nuestra fuerza, nuestro amor agradecido…

LUNES 7.11.2022
Lunes de la 32a semana del TO, par
Es “fácil” el heroísmo de un momento, pero mantenerse fiel a lo largo de la vida a los compromisos adquiridos, es decir, el heroísmo callado, sin aplausos, de todos los días ya no es tan fácil, y nos asalta la duda, la tentación, la debilidad… y surge el escándalo, y la dificultad para perdonar (aún en las pequeñas cosas), y el cansancio de la vida, etc. etc. San Pablo, en la primera lectura, da algunos consejos para los presbíteros y obispos. Algunos nos van bien a todos. Y en todo caso, cada día, al comenzar nuestra jornada haríamos bien en pedirle al Señor, como los apóstoles: «Auméntanos la fe», que el fuego de tu Espíritu no se apague en nuestros corazones.

DOMINGO 6.11.2022
Domingo XXXII del TO, ciclo C
La “Realidad” es, no la fabricamos los seres humanos a golpe de leyes, votos, ideologías, etc. La Vida Eterna forma parte de esa Verdad que hoy es políticamente incorrecta, incluso en quienes se dicen creyentes. (Incluso los hay que la han sustituido por la fe en la reencarnación). Como escribe san Pablo a los cristianos de Corinto: «Si hemos puesto nuestra esperanza en Cristo solo en esta vida, somos los más desgraciados de toda la humanidad» (1Co 15,19). Y también san Pablo constata que «la fe no es para todos», o como decimos en castellano: Para el que no quiere creer, todo sobra. Y es que la fe no viene como conquista intelectual o por imposición ideológica o por mayorías opinantes, sino como don de Dios a un corazón humilde. ¡Y la fe transforma la “mirada” del creyente con una luz y una perspectiva completamente nuevas, hasta poder dar la vida por ella como los mártires de todos los tiempos! Oremos para que la Palabra «siga avanzando y sea glorificada», y para que la verdad de la Vida Eterna como presencia vivificadora y como horizonte de plenitud «dirija nuestros corazones hacia el amor de Dios y la paciencia de Cristo».

SÁBADO 5.11.2022
Sábado de la 31a semana del TO, par
Pablo es un hombre de Dios y, por ello, no busca recompensas humanas, le basta el consuelo y la fuerza de la fe: «Todo lo puedo en aquel que me conforta». Pero Pablo es también humano y, aunque no lo busca, no es insensible a un gesto de cariño y cercanía, y lo agradece: «Me alegré muchísimo en el Señor de que ahora haya vuelto a florecer vuestro interés por mí». Y como no somos ángeles, sino ciudadanos de este mundo, no basta con que digamos: “Si él/ella ya sabe que lo/la quiero…”, todos necesitamos, al menos de vez en cuando, un gesto o una palabra que expliciten ese cariño, y más si estamos en dificultad.
Pablo recibe una ayuda económica de los Filipenses. Se ve que, en la cárcel donde está, pasa estrecheces. Y Jesús en el evangelio nos invita a reflexiona sobre el uso del dinero. La generosidad con el propio dinero siempre tiene recompensa: por un lado, porque al dar gratuitamente nos desapegamos de él (que es mal amo: más tienes, más quieres); y por otro porque Dios no se dejará ganar en generosidad.

VIERNES 4.11.2022
Viernes de la 31a semana del TO, par
En la sociedad, que al menos hasta hace unos meses, fue de la abundancia, qué pronto olvidamos que «somos ciudadanos del cielo» y qué fácilmente «sólo aspiramos a cosas terrenas». Como el administrador de la parábola hemos «derrochado los bienes» que Dios puso en nuestras manos. La crisis actual ¿no será precisamente una manifestación de esta mala –egoísta e insolidaria– gestión? ¿No será la propia Historia la que, como al mismo administrador de la parábola, nos está pidiendo «cuentas de la administración»… Las metas humanas no tienen largo recorrido, a veces porque no se cumplen, otras, porque, aunque se cumplan, no dan lo que prometen… Aunque no sea políticamente correcto, si no recuperamos la dimensión trascendente de la vida, con lo que esto implica también de inmanente, ¿qué nos queda?

JUEVES 3.11.2022
Jueves de la 31a semana del TO, par
Como a nosotros nos cuesta perdonar, pensamos que Dios tiene que ser un juez duro, casi vengativo. Y, sin embargo «habrá más alegría en el cielo por un solo pecador que se convierta…». Dios está deseando que nos acojamos a su misericordia, lo que pasa es que muchas veces somos demasiado orgullosos para hacerlo.
Como a nosotros nos gusta hacernos pagar los favores, pensamos que eso de la gratuidad no existe ni para Dios. Pero nosotros, ¿qué podríamos ofrecerle al Señor si él no nos lo hubiese dado primero? «Por pura gracia estáis salvados», dirá san Pablo (Ef 2, 8). Dios nos creó por puro amor suyo, y por puro amor suyo nos redimió… por pura gracia.
Pidamos que también nosotros podamos decir agradecidos: «Todo eso que para mí era ganancia, lo consideré pérdida a causa de Cristo. Mas aún: todo lo considero pérdida comparado con la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor».

MIÉRCOLES 2.11.2022
Miércoles de la 31a semana del TO, par
A veces, tal vez muchas veces, nos agarramos a cosas y a personas porque “creemos” que en ellas nos jugamos la felicidad. En esos periodos de la vida solemos olvidarnos un poco de Dios, y de que es Él «quien activa en nosotros el querer y el obrar para realizar su designio de amor». Luego, el paso del tiempo nos va mostrando cuán equivocados estábamos, si somos lo suficientemente humildes para reconocerlo. Y es que, si no dejamos que el Señor construya la «torre» de nuestra vida y gane la «batalla» de nuestros amores, si no le anteponemos a Él en todo y a Él todo le confiamos, si no dejamos que de verdad sea Él «mi luz y mi salvación»… «nuestros trabajos y fatigas serán inútiles»… Oremos en este día por los vivos y por los difuntos para que «gocemos de la dicha del Señor en el país de la vida».

MARTES 1.11.2022
Solemnidad de Todos los Santos
La Solemnidad de Todos los Santos es una llamada a la alegría, a sentirnos interpelados por tantos hermanos que nos precedieron y que disfrutan de la presencia amorosa de Dios. Ahora es nuestro turno para recorrer el itinerario que nos conduzca a la santidad… por el camino de Jesús, por el camino de las Bienaventuranzas… con su Gracia. En esta ruta los santos, fascinados por el infinito Amor de Dios, nos preceden, inspiran, acompañan y auxilian… para que también nosotros entremos en «el recinto sacro».

LUNES 31.10.2022
Lunes de la 31a semana del TO, par
Sirven las palabras de Pablo en la primera lectura de este día como introducción al himno de esta carta (Ef 2, 6-11) pero que no leeremos en la Misa de mañana por coincidir con la solemnidad. Las palabras que hacen de “puente” entre ambos textos son las siguientes: «Tened entre vosotros los sentimientos propios de Cristo Jesús», (Flp 2, 5). Pablo no pretende que los filipenses sean superhombres, sino humildes y fieles seguidores e imitadores del Señor «el cual, siendo de condición divina, no retuvo ávidamente el ser igual a Dios; al contrario, se despojó de sí mismo tomando la condición de esclavo (…) hecho obediente hasta la muerte y una muerte de cruz». La petición de Jesús en el evangelio va en la misma dirección: amar y servir con humildad y generosidad sin pedir nada a cambio, que Dios no se dejará ganar en generosa respuesta. Es una gracia a pedir. Las palabras del salmo ponen un hermoso remate a los otros dos textos de este día: «Señor, mi corazón no es ambicioso, ni mis ojos altaneros; no pretendo grandezas que superan mi capacidad. Sino que acallo y modero mis deseos, como un niño en brazos de su madre; como un niño saciado así está mi alma dentro de mí».

DOMINGO 30.10.2022
Domingo XXXI del TO, ciclo C
Hay miradas que humillan, que destruyen vidas e incluso que matan: ¡Cuantas personas buscando una mirada de ternura y amor, por su forma de vestir y comportarse, no atraen sino una mirada que les convierte en objetos! Pero también hay miradas que dan vida, esperanza, que son una invitación a vivir… Miradas que vienen más allá de los ojos de quien mira, que vienen, –lo sepa quien mira o no–, del mismo corazón de Dios: «Amas a todos los seres y no aborreces nada de lo que hiciste». Así, por supuesto, fue la mirada de Jesús, esa mirada que algunos tuvieron la gracia de acoger en sus vidas y dejarse transformar por ella. Hoy el evangelio nos habla de Zaqueo. Pero también, el mismo evangelio nos habla de aquellos que levantan murallas que impiden la entrada de la mirada de Dios en sus vidas. Y estos, podemos ser nosotros. Así que también para nosotros las palabras de Pablo a los Tesalonicenses en la 2ª lectura: «No perdáis fácilmente la cabeza ni os alarméis por alguna revelación, rumor» o extraña doctrina o seducción del mundo. «Oremos –pues– continuamente los unos por los otros… para que el poder de Dios lleve a término todo propósito de hacer el bien y la tarea de la fe».

SÁBADO 29.10.2022
Sábado de la 30a semana del TO, par
Otra vez la humildad protagonista: una virtud siempre necesaria, pero más hoy cuando cualquiera, en las redes sociales, muchas veces escondiéndose tras un nombre falso, pontifica sobre lo humano y lo divino. ¡Lo peor es que hay quienes les hacen caso! Pobres criaturas que pretenden esconder su fracaso existencial con esa máscara de sabiduría (¡?)… de falta de humildad. El humilde contempla, admira y agradece la sabiduría del creador, el humilde ve sus propias limitaciones y por ello no se convierte en juez de nadie, el humilde desborda del gozo de saberse amado y “misericordiado” por Dios en Jesucristo y ya no necesita más: ni títulos humanos, ni «primeros puestos», ni aplausos del mundo… y puede decir, como san Pablo: «Para mi la vida es Cristo y morir una ganancia. Pero, si el vivir esta vida mortal me supone un trabajo fructífero…»

VIERNES 28.10.2022
San Simón y san Judas, apóstoles
Ef 2, 19-22; Sal 19(18), 2-3. 4-5b; Lc 6, 12-19
Detrás de cada persona hay una familia, una educación, una historia que le hacen diferente a los demás. Jesús sube al monte a orar y, con la mirada de Dios, elige a 12 apóstoles, doce hombres con su familia, su educación, su historia: las columnas de la Iglesia no son uniformes, cada una es diferente, anuncio (y riqueza) de esa Iglesia que sobre ellos se construirá… ¡por el Espíritu! No sabemos mucho de los apóstoles que hoy celebramos. De Simón su apodo: el Celote o el Cananeo. Y de Judas, conocemos aquella pregunta admirada a Jesús en la Última Cena: «Señor, ¿qué ha sucedido para que te reveles a nosotros y no al mundo?». Y tal vez hoy, cada uno de nosotros, si de verdad valoramos nuestra fe, podemos preguntarnos y agradecer el don de esa fe que hemos recibido, el don de «ser conciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios» y que otros, quizá no muy lejos de nosotros, no tienen o han rechazado.

JUEVES 27.10.2022
Jueves de la 30a semana del TO, par
Corazón desgarrado de Jesús, él ha «ha querido reunir a sus hijos» pero sus hijos no «han querido», y así, en muchos casos, seguimos. El «dragón rojo» (cf. Ap 12, 3ss) sigue su lucha (cf. Ap 12, 17), y se reviste de poder político («Herodes quiere matarte»), pero también de soberbia religiosa («se acercaron unos fariseos…»)… Pero la última palabra no será la suya, sino la de Jesucristo: «al tercer día mi obra quedará consumada». San Pablo conoce bien, desde dentro, esta lucha, por ello nos deja en el final de la carta a los Efesios esta imagen del creyente como un guerrero revestido de sus armas… ¡las armas de Dios, no las de los hombres!: la verdad, la justicia, el evangelio, la fe, la palabra de Dios… y «siempre en oración y súplica, orando en toda ocasión en el Espíritu, velando juntos con constancia, y suplicando por todos…».

MIÉRCOLES 26.10.2022
Miércoles de la 30a semana del TO, par
Hay una autoridad que se impone por la fuerza del poder… es la dictadura que crea esclavos. Pero hay una autoridad que brota de la sabiduría y de la experiencia de años de vida… acogerla es una riqueza. Hoy, en muchos casos, a fuerza de no distinguir la una de la otra, muchos crecen como plantas sin raíces que lleva el viento de las ideologías y de los poderes de turno (por más que se nos diga que somos libres). También a nivel religioso puede ocurrir que la “autoridad” de la fe se viva como esclavitud o como mérito: «Señor, ¿serán pocos los que se salven?». Esta no es la puerta estrecha de la que nos habla el Señor en el evangelio: «No sé quiénes sois». La fe verdadera “impone” su autoridad no por la fuerza, sino por la gracia y el amor que la hacen posible… y que “exige” en el creyente una “puerta estrecha” que está construida sobre la confianza, la humildad, la gratitud… la verdadera libertad.

MARTES 25.10.2022
Martes de la 30a semana del TO, par
Cuando una pareja se casa, en general, ambos creen hacerlo por amor… Sin embargo, a veces, cuando escarbas un poco, cada uno de ellos cree saber lo que ese amor le exige al otro, con respecto a uno mismo; pero pocos toman conciencia de lo contrario: ¿Qué soy y qué debo ser yo para ti? Luego, cuando el otro no cumple mis expectativas empiezan las crisis y los desengaños que no todo el mundo puede (o quiere) afrontar como oportunidad para crecer en el amor. Para una pareja creyente la referencia (y la fuerza) para vivir su amor la tienen en el amor que nos mostró Jesús con su vida y con su entrega hasta la muerte… Es una gracia que hay que pedir juntos desde el día que nos enamoramos para que la semilla del amor vaya desarrollándose, vaya «creciendo» y vaya dando frutos y «fermentando» la sociedad… «Es este un gran (y hermoso) misterio» con el que el Señor quiere bendecir a los enamorados, pero que no todos ponen disposición de entender…

LUNES 24.10.2022
Lunes de la 30a semana del TO, par
En castellano solemos decir que “los extremos se tocan”. Y así nos encontramos en las lecturas de este día que Pablo llama la atención sobre las conductas o actitudes inmorales que no son compatibles con la fe cristiana («ahora sois luz por el Señor»). Nos quedamos con lo positivo: «Sed buenos, comprensivos, perdonándoos unos a otros como Dios os perdonó en Cristo. (…) como Cristo os amó y se entregó por nosotros…»: aunque no estaría mal que nos revisáramos en lo negativo, por ejemplo: «Tampoco vulgaridades, estupideces o frases de doble sentido». En el otro extremo está, en el evangelio, la actitud del jefe de la sinagoga que encarna esa religiosidad prisionera de normas y ritos que ha acabado por ahogar el corazón, por matar la ternura y la misericordia. En su carta a los Gálatas (5, 1) escribirá san Pablo: «Para la libertad nos ha liberado Cristo». Danos, Señor, la gracia de no caer esclavos de las miserias de nuestra carne ni del mundo, pero tampoco de un legalismo moral y religioso asfixiante. Señor, danos un corazón de carne.

DOMINGO 23.10.2022
Domingo XXX del TO, ciclo C
Pablo escribe desde la cárcel consciente de que su vida llega a su final. Es la hora de la verdad: «He combatido el noble combate, he acabado la carrera, he conservado la fe»; y de la esperanza: «Me está reservada la corona de la justicia, que el Señor, me dará en aquel día»; pero también de la humildad: «El Señor estuvo a mi lado y me dio fuerzas… me librará de toda obra mala y me salvará…». El tema de la humildad queda hoy también subrayado por las otras lecturas de este domingo: «La oración del humilde atraviesa las nubes…», «mi alma se gloría en el Señor: que los humildes lo escuchen y se alegren», «¡Oh Dios!, ten compasión de este pecador» … El contraste lo pone la figura del fariseo de la parábola quien esgrime sus méritos ante Dios y mira con desprecio a los demás (incluido el publicano), cerrándose así él mismo a la gracia salvadora de Dios. Reflexionemos: ¿Qué tenemos o qué hemos logrado que Dios no nos haya dado? Al final, el verdadero gran tesoro que todos llevamos con nosotros (si nuestro orgullo no lo impide) es el de la cercanía misericordiosa de Dios, compañero de camino… «Bendigo al Señor en todo momento, su alabanza está siempre en mi boca» …

SÁBADO 22.10.2022
Sábado de la 29a semana del TO, par
El individualismo moderno nos ha roto en pedazos y ha desmembrado la sociedad («¡sálvese el que pueda!»). Lo queremos experimentar todo, lo queremos abarcar todo, lo queremos saber todo… y, así, nuestra finitud y mortalidad se nos impone una y otra vez, y esto nos genera frustración, amargura, vacío, violencia… Pero el verdadero creyente, al levantar su mirada hacia Dios descubre que éste no concibió el mundo ni la vida ni la Iglesia así, al contrario, en su infinita y paciente misericordia (cf. evangelio) las concibió como una gran sinfonía animada por el Espíritu en la que cada uno toca su propio instrumento o instrumentos, «procurando el crecimiento del cuerpo, para construcción de sí mismo en el amor». Señor, ten paciencia con nosotros y ayúdanos a dejar de «ser niños sacudidos por las olas y llevados a la deriva por todo viento de doctrina (¡ideologías!), en la falacia de los hombres, que con astucia conduce al error».

VIERNES 21.10.2022
Viernes de la 29a semana del TO, par
Muchos son los signos que hoy nos hablan, –algunos terriblemente amenazantes, como el desastre ecológico o la guerra atómica–… nos hablan de que el ser humano por sí solo, aún con la mejor intención, no puede construir el paraíso en la tierra, y menos, más allá de la tierra, es decir, tras la muerte. Detrás de estos signos hay egoísmo, insolidaridad, afán de poder y dominio, codicia, etc. etc. San Pablo nos propone hoy un camino diferente: «Sed siempre humildes y amables, sed comprensivos, sobrellevaos mutuamente con amor, esforzándoos en mantener la unidad del Espíritu con el vínculo de la paz». A veces ni siquiera dentro de la propia Iglesia lo vivimos. Señor, danos luz para conocer en qué tenemos que mejorar, generosidad para afrontarlo y fuerza para llevarlo a cabo. Amén.

JUEVES 20.10.2022
Jueves de la 29a semana del TO, par
«Estad preparados», nos invitaba la liturgia de ayer. Y hoy la invitación continúa con el testimonio de san Pablo: «Doblo las rodillas ante el Padre… que puede hacer mucho más sin comparación de lo que pedimos o concebimos». Doblar la rodilla, postrarse ante Dios, con humildad, con admiración, con gratitud, con amor… y pedir que el fuego de su Amor manifestado en Cristo-Jesús arda en nuestros corazones y en nuestra vida: «ser robustecidos por el Espíritu». Que nos saque de nuestra comodidad y blandura, que «el amor sea nuestra raíz y nuestro cimiento»… para «llegar a la plenitud, según la plenitud total de Dios». Lo demás sobra todo.

MIÉRCOLES 19.10.2022
Miércoles de la 29a semana del TO, par
«Estad preparados», porque, quizás, ese proyecto que con tanta dedicación preparasteis no salió adelante, o porque ese amor que creísteis encontrar no fue tan maravilloso como lo soñasteis, o porque desde hace tiempo sentís que algo falta en vuestro interior, etc. O, por el contrario, porque todo funcionó a las mil maravillas y hoy os sentís pletóricos y realizados. «Estad preparados», sí, para que los fracasos y frustraciones no os aplasten como si ahí se acabase la vida, o para que los éxitos no os engrían y penséis que habéis ya alcanzado el paraíso. «Estad preparados» con la mirada y el corazón conectados a, apoyados en, enamorados de… «la riqueza insondable de Cristo». Él es el único que hará de vuestros fracasos, un camino luminoso y fuerte; y de vuestros éxitos, un sendero humilde y agradecido. Él es «la fuente de la salvación».

MARTES 18.10.2022
San Lucas, evangelista
2Tim 4, 10-17b; Sal 145(144), 10-11. 12-13ab. 17-18; Lc 10, 1-9
Lucas, compañero de Pablo, ¿su médico particular? –tal vez–. «Lucas es el único que está conmigo», escribe Pablo desde la cárcel de Roma. Podíamos decir: Lucas ponía en práctica con Pablo el mensaje central del evangelio que lleva su nombre: El Evangelio de Lucas es el evangelio de la Misericordia. Y en el comienzo de este evangelio María canta la misericordia de Dios, y además se nos narran relatos o parábolas que acentúan este rasgo de la misericordia divina: la resurrección del hijo de la viuda de Naín… la pecadora perdonada en casa de Simón el fariseo… el buen samaritano… la oveja perdida, la moneda perdida, el hijo pródigo… el rico y el pobre Lázaro… el fariseo y el publicano… el diálogo con el buen ladrón… Busquemos algún tiempo en este día para leer este evangelio, o al menos, alguno de los textos señalados, y que podamos decir, con el evangelio de hoy, para cada uno: «Paz a esta casa», o, también: «El reino de Dios ha llegado a vosotros».

LUNES 17.10.2022
Lunes de la 29a semana del TO, par
Las riquezas y el bienestar se le fue pegando al corazón como una costra, y el corazón se le endureció, y no se sentía a gusto en su vida. “Jesús no quiere el sufrimiento”, se decía, pero nadie le contestó, o él no quiso escuchar, que Dios tampoco quiere personas replegadas sobre sí mismas… egoístas. Al pasar un día delante de una iglesia, siguiendo no sé qué impulso, entró. Estaban en Misa. Una lectora proclamaba: «Dios rico en misericordia, por el gran amor con que nos amó… estáis salvados por pura gracia… es don de Dios… Somos obra suya… para que nos dediquemos a las buenas obras…». Y, luego, en el evangelio, el sacerdote: «Necio… Así es el que atesora para sí y no es rico ante Dios». se dio cuenta que él había sido muchos años ese necio que había ignorado el tesoro que él era, y estaba llamado a ser… por pura gracia. Ese tesoro que aparecía ahora en toda su luminosidad. «El Señor nos hizo y somos suyos».

DOMINGO 16.10.2022
Domingo XXIX del TO, ciclo C
Asombrado por la grandeza e inefabilidad del misterio del universo y de mi propia persona, y aún mucho más por quien es su artífice, brotó de mi corazón un canto de alabanza. Agradecido por tantos pequeños (o grandes) “detalles” y personas que la vida ha ido cruzando en mi camino, irrumpí en un canto de acción de gracias. Y cuando la vida me golpeó o golpeó a los que yo amaba, me lancé a los brazos de Dios para llorar, para recuperar fuerzas, para rogar y pedir. Pedir … tantas situaciones, tantas personas, tanto desnortamiento, tanto dolor… pedir, siempre pedir, sin desfallecer y, por supuesto, pedir el Espíritu Santo para que no pasemos por el mundo indiferentes y egoístas, desagradecidos y soberbios, anestesiados y sin capacidad de asombro… «Levanto mis ojos a los montes…».

SÁBADO 15.10.2022
Sábado de la 28a semana del TO, par, y fiesta/memoria de Santa Teresa de Jesús
«Que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de la gloria, os dé espíritu de sabiduría y revelación para conocerlo, e ilumine los ojos de vuestro corazón para…». Y hoy podíamos decir que, este deseo de Pablo, se cumple con creces en santa Teresa: Teresa de Jesús es sensible a la acción del Espíritu y subraya en sus escritos la función que tiene en la vida cristiana, (cf. https://delaruecaalapluma.wordpress.com/2014/02/07/el-espiritu-santo-en-teresa-de-jesus/). En el Libro de la Vida (24, 5) podemos leer como en unos momentos en que ella luchaba por afianzarse en su conversión, su director espiritual le recomienda que «se encomiende a Dios unos días y rece el himno de “Veni Creator” porque le diese luz de cuál era lo mejor». Y mientras Teresa recitaba el himno litúrgico recibe una de las primeras gracias místicas. En un rapto oye la palabra del Señor que hace en ella una operación singular: la sana definitivamente en lo que para ella había sido durante muchos años su debilidad: su afectividad, (cf. id). Encomendémonos cada día al Espíritu Santo, que él nos haga confesar a Jesucristo con nuestra vida y nuestra palabra, y que llevados por su aliento, enfrentemos las dificultades y contrariedades de la vida…

VIERNES 14.10.2022
Viernes de la 28a semana del TO, par
Si todo acaba con la muerte, todo da igual, y vanas son las palabras de alabanza que en el cementerio se hacen por un difunto. Al final, la “apisonadora” de la muerte nos atrapará a todos y un silencio eterno todo lo envolverá. Y si así fuese, este mundo sería sólo un “sálvese quien pueda”… Pero entonces, ¿por qué no nos es indiferente la injusticia o el dolor de los inocentes? y, ¿por qué nuestro corazón busca ansioso una felicidad y un amor que parece nunca alcanzamos?, etc. etc. ¿No será que lo que vivimos (y amamos) no es sino un reflejo, más o menos intenso, de una Vida (y un Amor) que nos sobrepasa y que está en el origen y en la meta de todo lo que existe? Pablo habla a los efesios de “herencia”, y Jesús nos advierte contra la hipocresía, porque si todo está llamado a su plenitud, no es indiferente nuestra forma de vivir ni las actitudes de nuestra vida. Pidamos la gracia de vivir de tal modo que nuestra vida sea anuncio y presencia de la Vida Futura.

JUEVES 13.10.2022
Jueves de la 28a semana del TO, par
Hermoso pórtico de la carta a los Efesios este himno cristológico que recitamos en las vísperas de los lunes y de la mayoría de las fiestas de los santos. Un himno que es una invitación a sumergirse en la grandeza del misterio que se “esconde” en cada ser humano y, por tanto, una invitación a cambiar nuestra mirada sobre los demás y sobre uno mismo. Aunque lo que a primera vista se me presente –de mí o de los demás– no sea amable, sino más bien lo contrario, no sea hermoso, sino feo, etc., ese ser humano al que miras –y puedes ser tú mismo–, ha sido, –es– bendecido, elegido, destinado, redimido, perdonado… y, en definitiva, amado por Dios, en Cristo, y destinado a la plenitud de la vida y del amor, por Cristo. El salmo responsorial nos invita a alabar al Señor por este don, pero el evangelio no advierte también sobre las “tonterías” que tantas veces hacemos los seres humanos (fariseos y escribas incluidos), que nos alejan del gozo de nuestra verdad más profunda.

MIÉRCOLES 12.10.2022
Miércoles de la 28a semana del TO, par
No son tiempos fáciles para la fe. En algunos lugares del mundo hay violencia física contra los mismos creyentes o contra sus templos, incluso en lugares donde no hace tantos años era impensable esa violencia. En otros se intenta imponer por las leyes visiones del ser humano que deconstruyen su humanidad. Que no nos dejemos engañar. San Pablo lo deja bien claro en la primera lectura de hoy, y nosotros podíamos resumirlo con aquellas palabras de Jesús: «Por sus frutos los conoceréis». Y que tampoco nos desanimemos. Hoy la celebración de Ntra. Sra. del Pilar nos remite a aquellos primeros y difíciles tiempos de la evangelización de la Península Ibérica, con el desánimo de Santiago y la milagrosa aparición de Santa María. Que no nos desanimemos y que cuidemos nuestro corazón de creyentes: «… el derecho y el amor de Dios», la humildad, –no «los asientos de honor»–, la compasión… Santa María del Pilar, ruega por nosotros.

MARTES 11.10.2022
Martes de la 28a semana del TO, par
Mi antiguo compañero de escuela de alemán, Jon, es amante del parapente y, disfruta los fines de semana yéndose a Engelberg y tirándose al vacío con sus aparejos, y repitiendo una y otra vez ese acto de fe que es pensar que esa frágil tela y esas frágiles cuerdas que lo sostienen en el aire no van a fallar. Acto de fe humano que es hoy para nosotros, como creyentes, toda una invitación que no siempre acogemos. Los cristianos de la Galacia, “retroceden”, y por influencia de ciertos predicadores, quieren volver a la circuncisión, (como querer tirarse en parapente sin dejar de pisar tierra). Y los fariseos siguen aferrados a exterioridad de los ritos sin cuidar las actitudes del corazón, (como comprarse un parapente por sus colores y dibujos y no por la calidad técnica del mismo). Cuando, como creyentes, cada mañana somos invitados a tirarnos a la vida con en el parapente de la fe, sabemos que contamos con el mejor “aparejo”, Jesucristo nuestro Señor, ¿pero, de verdad, lo vivimos así?

LUNES 10.10.2022
Lunes de la 28a semana del TO, par
Es más cómodo pensar (y satisface más nuestro ego) que tenemos a Dios “agarrado” con nuestras normas y cumplimientos, con nuestras imágenes y teorías, que caminar en la confianza de que es Él quien nos sostiene y salva continuamente. Más cómodo, pero más falso… Pablo se tuvo que pelear, en este tema, con los gálatas: «Para la libertad nos ha liberado Cristo. (…) no dejéis que vuelvan a someteros a yugos de esclavitud». Y Jesús, con sus contemporáneos: «… aquí hay uno que es más que Salomón. … aquí hay uno que es más que Jonás», pero vosotros no queréis aceptarlo. A final, la única “seguridad” que todos debiéramos tener es la del Amor de Dios manifestado en Cristo Jesús, en cuya presencia nos postramos, en cuyos brazos nos abandonamos y con cuya fuerza vivimos el amor y el compromiso por los demás… por un mundo mejor.

DOMINGO 09.10.2022
Domingo XXVIII del TO, ciclo C
Hay creyentes (y páginas web) crispados por las amenazas del mundo… Hay creyentes amedrentados ante la magnitud (real o imaginada) de sus pecados… Hay creyentes soberbios por lo que ellos creen sus méritos y conquistas… Hay creyentes convertidos en jueces de los demás… Etc. etc. Hoy Jesús nos invita a superar la crispación, el miedo, la soberbia, el enjuiciamiento, etc. con la gratitud. Atrévete en este domingo a dar gracias a Dios, aunque te cueste, por el don de la fe, por el don de la vida, por el don de los hermanos (también los molestos), por el don del mundo y de este momento histórico (aunque difícil y amenazante que vivimos)… Y, sobre todo, hagamos memoria agradecida de «de Jesucristo, resucitado de entre los muertos, nacido del linaje de David»: Él es más fuerte que la amenazas del mundo, Él ha clavado en la cruz tus pecados, Él te ha regalado todo lo que tienes y eres, Él es compasivo y misericordioso… ¡Gracias! ¡Eucaristía!

SÁBADO 08.10.2022
Sábado de la 27a semana del TO, par
Ayer, Nuestra Señora del Rosario. La figura de María una vez más se “cruzaba” en nuestro camino del año litúrgico. Ella, la Madre de Dios (¡inabarcable misterio!) y madre nuestra (¡inmerecido regalo!). «Escuchar… acoger… poner en práctica… la Palabra», por la fe, –María nos muestra el camino–, nos abre a un horizonte de plenitud que no podemos imaginar, ni de lejos, con las solas fuerzas humanas: hijos de Abraham, hijos de Dios, hermanos de todos los hombres… hasta de nuestros enemigos. Al margen de la Palabra, ya experimentamos lo que el mundo da: violencia interna del sinsentido, violencia en las familias, violencia en la sociedad, violencia entre los pueblos… «Recurramos al Señor y a su poder, busquemos continuamente su rostro».

VIERNES 07.10.2022
Viernes de la 27a semana del TO, par

Quien se ata, en su vida de fe, a los preceptos y leyes, (cf. los gálatas) –y no es que no haya que tenerlos–, siempre caminará en la angustia de no llegar a cumplirlos todos, o/y en la angustia de no cumplirlos perfectamente. O, todavía peor, caminará en la soberbia (cf. evangelio) de querer demostrar que lo cumple todo y que todo lo hace todo bien, mientras que los “otros” son los equivocados, los pecadores. Por el contrario, quien se “ata” al amor que Dios le tiene, aún en el “no llegar”, caminará humilde, agradecido y alegre. Pero, de verdad, ¿nos acabamos de creer que Cristo ha entregado su vida por nosotros para librarnos de nuestros pecados, de nuestras culpas? ¿Dejamos que esta Buena Noticia sea fuego que arde en nuestro corazón y cambie nuestra vida? ¿O seguimos recortando el Amor incondicional de Dios… por mí, por ti, por todos?

JUEVES 06.10.2022
Jueves de la 27a semana del TO, par
Los gálatas habían sido seducidos por los predicadores judaizantes… quizá por su oratoria, quizá por la amenaza de sus palabras, quizá porque su porte era el de “gente importante”. Seducidos por los hombres y alejados del Espíritu. No nos extrañe el enfado de Pablo. Ocurrió y sigue ocurriendo: pastores (?) que se aprovechan de la ignorancia y de la necesidad de afecto o de protagonismo de algunos para seducirlos y ocupar, ante ellos, el lugar del Señor. Pastores que se predican a sí mismos (con oratoria fácil, con amenazas, con seducción…) y no predican a Jesucristo ni llevan a Él. Los hemos encontrado a lo largo de la vida. Pero también todos podemos caer en este error. Pidamos sin desfallecer para que esto no sea así, y para que los anunciadores del Evangelio, verdaderamente, anuncien al Señor… guiados por el Espíritu Santo.

MIÉRCOLES 05.10.2022
Miércoles de la 27a semana del TO, par
Los primeros discípulos de Jesús fueron judíos, y conocían las oraciones y las formas de rezar judías. Además, algunos procedían del círculo de Juan el Bautista y, con él, habían aprendido su forma de rezar. Pero lo de Jesús, cuando rezaba, era distinto. Quizá los que le veían rezar sentían que su oración era, por un lado, como mucho más del cielo, pero, por otro, como mucho más de la tierra… Jesús se les “transfiguraba”… En su oración había Vida y Amor… Por ello, le piden que les «enseñe a orar», que les enseñe a “ponerse en oración” de la misma forma que Él lo hacía. Pero, ¿quién podría rezar como Jesús, si Dios no se lo concede? ¡Hay tanta distancia entre él y ellos/nosotros! El Padrenuestro es una oración salida de los labios y del corazón del Señor, no es por tanto una fórmula vacía, sino que tiene vida propia, así que cuando lo rezamos con sinceridad y humildad, descansando nuestra fragilidad en Dios, el Señor nos toma de la mano y nos incorpora a su propia oración… los pies en la tierra, la mirada al Cielo, y los brazos abiertos a los demás.

MIÉRCOLES 05.10.2022
Témporas de Acción de Gracias, Penitencia y Petición
Dt 8, 7-18; 1 Crón 29, 10bc. 11abc. 11d-12a. 12bcd; 2 Cor 5, 17-21; Mt 7, 7-11
Ya es sabido (aunque no sé si practicado) aquello que el papa Francisco dijo en su día a las familias: «Para mí hay tres palabras que definen a las personas y constituyen un compendio de actitudes… y que son: permiso, gracias y perdón. La persona que no sabe pedir permiso atropella, va adelante con lo suyo sin importarle los demás, como si los otros no existieran. En cambio, el que pide permiso es más humilde, más sociable, más integrador. ¿Qué decir del que nunca pronuncia “gracias” o que en su corazón siente que no tiene nada que agradecer a nadie? Hay un refrán español que es bien elocuente: “el bien nacido es agradecido”. Es que la gratitud es una flor que florece en almas nobles. Y, finalmente, hay gente que considera que no tiene que pedir perdón por nada. Ellos sufren el peor de los pecados: la soberbia. E insisto, sólo aquel que tuvo la necesidad de pedir perdón y experimentó el perdón, puede perdonar. Por eso, a los que no dicen estas tres palabras les falta algo en su existencia. Fueron podados antes de tiempo o mal podados por la vida». Permiso (petición), gracias (acción de gracias) y perdón (penitencia), con el esposo o la esposa, con los familiares, con los amigos, con todos… también con Dios.

MARTES 04.10.2022
Martes de la 27a semana del TO, par
Seguro que entre las «muchas cosas» que inquietaban y preocupaban a Marta estaba esa “pelusilla” que, a veces, se nos cuela dentro a todos cuando a quien amamos y queremos nos ame pone su atención en otra persona. No sabemos si Marta, a raíz de este episodio del evangelio de hoy, comprendería lo que María sí parecía haber comprendido: que un amor verdadero –y, por tanto, el amor de Jesús… y de Dios– no se merece (y menos, se exige), sino que se acoge, se disfruta y se agradece (sobre todo, con la propia existencia). La predicación del evangelio que hace san Pablo está marcada por esta dinámica de gratuidad del Amor de Dios manifestado en Jesucristo y que él mismo experimentó en su conversión, pero los predicadores que, detrás de él, pasaron por la Galacia querían un cristianismo que volviese a los ritos judíos. No era una cuestión menor, por eso Pablo reacciona con tanta fuerza. «Señor, guíame –guíanos– por el camino eterno».

LUNES 03.10.2022
Lunes de la 27a semana del TO, par
Es difícil amar, y todavía más difícil amar bien. Nuestros prejuicios y nuestras heridas (o nuestros “deberes” religiosos, como en el caso de la parábola del evangelio de hoy) se cruzan creando un muro que nos separa de los demás y, al mismo tiempo, creemos con él justificarnos. Aprender a amar a los demás es aprender a mirarlos con misericordia, no en lo que tienen de “molestos” o “arrogantes” o desagradables”… sino en lo que tienen de “pobres” y “apaleados”. Cuántas veces actitudes agresivas y molestas no son sino el grito desesperado de quien anda mendigando amor. Y aprender a mirar con misericordia sólo podemos aprenderlo en la “escuela” del corazón de Jesús… Dios, en Jesucristo, nos miró y nos mira con misericordia, nos amó y nos ama a fondo perdido… hasta dar Su vida. Si de verdad comprendiéramos lo que esto significa, si de verdad diéramos fe a este Amor… Pero cuántas veces, como los gálatas, preferimos un evangelio adulterado o recortado……

DOMINGO 02.10.2022
Domingo XXVII del TO, ciclo C
Jesús alerta a los discípulos sobre el peligro de las riquezas, sobre los escándalos y sobre el perdón, y los apóstoles le piden: «Auméntanos la fe». Pero no sólo necesitamos una fe sólida para vivir una vida según la voluntad de Dios, también la necesitamos para afrontar las oscuridades y dificultades de la existencia, como el profeta Habacuc que le grita al Señor desde el dolor y la experiencia de la violencia que cruza la historia (y que a él le tocó vivir). Y, por supuesto, como Timoteo, la necesitan los pastores de la Iglesia, especialmente en estos momentos de la historia, para «reavivar el espíritu de fortaleza, amor y templanza», para «no avergonzarse del testimonio de nuestro Señor», para «velar por el depósito de la fe»… y para seguir trabajando en la viña del Señor con la humildad de los «siervos inútiles que hacen lo que tienen que hacer»… y, además, lo hacen con alegría.

SÁBADO 01.10.2022
Sábado de la 26a semana del TO, par
Miro hacia atrás mi vida desde la altura de los años. Algo he hecho… Pero no, yo no he hecho nada, y si he hecho algo ha sido «en Tu nombre». Qué pena de aquellos grupos eclesiales que creen que avanzan por sus propios planteamientos, objetivos y votaciones, que se creen «sabios y entendidos», que no tiene ante sus ojos la contemplación del Misterio de Cristo en la radicalidad del misterio de la Cruz (y la Resurrección): «¡Bienaventurados los ojos que ven lo que vosotros veis… y los oídos que oyeron lo que vosotros oís!». Creyentes que no son capaces de sentir y decir, con Job, «reconozco que –sólo tú– lo puedes todo… que hablé de cosas que ignoraba… que sólo te conocía de oídas». Al contrario, que dicen: “creo que eres mi posesión y que yo te abarco».

VIERNES 30.09.2022
Viernes de la 26a semana del TO, par»
Por mucho que avancen los conocimientos científicos, el mundo y la vida seguirán siendo un misterio inabarcable. Para quienes no lo quieran creer, bastan las palabras que el Señor dirige hoy, en la primera lectura, a Job y que podríamos resumir así: ¿podrás alargar tu vida eterna y felizmente? Que no se trata sólo de años, sino de “densidad” de vida. Tristemente en aquello hemos avanzado (en el número de años), pero en esto (en densidad y sentido para la vida) hemos retrocedido. Pero si el mundo y la vida son un misterio, aún lo es más el sufrimiento… por lo que “duele”, por lo que afecta al inocente, por los proyectos y esperanzas frustradas. etc. Y, cuando nos toca en nuestra propia carne, sobran teorías y palabras afectadas, y necesitamos puertas que nos abran al infinito de Dios: una mirada con lágrimas de compasión, una mano sincera que coge la nuestra, un “te quiero”… y, sobre todo, esa fe en Aquél que asumió todo nuestro dolor en su propia Cruz… Y, ante Él, un corazón humilde: ¡que no queramos «escalar el cielo
»!

JUEVES 29.09.2022
Santos arcángeles Gabriel, Miguel y Rafael
Ap 12, 7-12a; Sal 138(137), 1bcd-2a, 2bcd-3. 4-5; Jn 1, 47-51
Tratar de imaginar, y menos de comprender, cualquier cosa que atañe a la esfera de Dios, es casi un imposible. Y en esa esfera, en ese “mundo” amorosa e inmensamente poblado –porque Dios es vida fecunda–, los ángeles, seres personales y espíritus puros. Hoy celebramos a tres de ellos y recordamos la intervención de Dios a través suyo en la historia santa. Miguel, el paladín de Dios en su lucha contra el mal (cf. 1ª lectura): “¿Quién como Dios?”. Gabriel, el mensajero de Dios a Zacarías y a María: “Fortaleza de Dios”. Y Rafael, el compañero de camino de Tobías: “Sanación de Dios”. El final del evangelio de este día nos remite al sueño de Jacob en Betel cuando huye de la casa de su padre Isaac por temor a Esaú (Cf. Gn 28, 12): Jesús es la “escalera” que une el cielo y la tierra, esa escalera sobre la que suben y bajan los ángeles de Dios. Así que cuando sientas que una tentación te asalta, invoca a Miguel. Cuando necesites que la luz de la Palabra ilumine tu vida, invoca a Gabriel. Y cuando estés de viaje o lejos de casa y experimentes la duda o la soledad, invoca a Rafael. Ellos te llevarán sobre sus alas a quien es Roca, Luz y Compañero de camino.

MIÉRCOLES 28.09.2022
Miércoles de la 26a semana del TO, par
Si en el dolor y el sufrimiento hay algo peor que estos, es el consejo y las teorías de los que con supuesta compasión arman delante del sufriente teologías explicativas, –como los “amigos” de Job–. Los hemos conocido en los hospitales y en los tanatorios: visitantes de buena voluntad, pero con muy poco acierto ante el enfermo y sus familiares, o ante los que acaban de perder a un ser querido. Seguir a Jesús, nos dice hoy el evangelio, exige cierta radicalidad: desprendimiento de los bienes temporales, de los deberes de piedad, de los afectos… En definitiva, salir de uno mismo y de “su propio mundo” para meterse en la piel de Jesucristo, de su Amor universal. De la misma forma, acompañar a alguien que sufre exige una cierta forma de desprendimiento para ponerse en el lugar de aquel que sufre… con padecer… ser compasivo.

MARTES 27.09.2022
Martes de la 26a semana del TO, par
Dolor de Job… desesperación. Dios no nos hizo para el sufrimiento, sino para la Vida, y nuestro corazón lo sabe y por eso nos rebelamos ante el sufrimiento. Las palabras de Job en la primera lectura de hoy reflejan tantas palabras rebeldes pronunciadas en tantos lugares de sufrimiento en todo el mundo y en todo tiempo: ¡que no se escandalicen los oídos piadosos!, al menos, que no se escandalicen hasta que ellos mismos hayan pasado por la prueba del dolor y del sufrimiento extremo. Pero también, y feliz y esperanzadamente, las palabras de Job nos llevan hasta Getsemaní: quien hizo el mundo para la Vida y el Amor recibe sobre él, como un rayo destructor, todo el pecado y el sufrimiento del hombre. Podía haberse rebelado, podía haber “tirado la toalla”, podía haber mandado «bajar fuego del cielo», como Santiago y Juan en el evangelio de hoy, pero no, Él, por nosotros, por puro Amor suyo (así de enorme es el corazón de Dios), lo asume. Y así y por ello, en medio de la negrura de todo dolor y sufrimiento, Él nos abre una luz a la esperanza. «Señor, Dios salvador mío, … llegue hasta ti mi súplica».

LUNES 26.09.2022
Lunes de la 26a semana del TO, par
A Job todo le iba bien, hasta que dejó de irle bien. La fe de Job fue luz en la prosperidad, y lo siguió siendo en la adversidad, pero no siempre es así. He conocido en la cárcel gentes “importantes” que, en tiempos, ocuparon titulares de periódicos y noticieros, y que acabaron donde yo los encontré… en la ruina, en el fracaso, en la cárcel, olvidados de todos y de aquellos medios de comunicación que antes los habían ensalzado (¿porque subían sus ventas?). Para muchos que, antes, habían vivido en la increencia y autosuficiencia, el “fracaso” fue una oportunidad para que la fe y la humildad creciesen en sus corazones… como Job: «Desnudo salí del vientre de mi madre y desnudo volveré a él. El Señor me lo dio, el Señor me lo quitó; bendito sea el nombre del Señor». Como Jesús les muestra hoy a sus discípulos acogiendo a un niño y poniéndolo en medio, y mostrándose favorable a quien los discípulos consideraban enemigo («uno que echaba demonios en tu nombre»), los caminos de Dios no son los nuestros. Que Él nos muestre «las maravillas de su misericordia».

DOMINGO 25.09.2022
Domingo XXVI del TO, ciclo C
Replegarse sobre uno mismo es una tentación que nos acompaña a todos a lo largo de la vida. Replegarse sobre uno mismo y no ver nada más que la propia satisfacción de los caprichos o ambiciones de la vida, –como el Epulón de la parábola–, o, también, en su caso, no ver más que el propio dolor, o la propia necesidad, etc. es un agujero profundo, negro, en el que uno se puede ir sumergiendo casi sin darse cuenta… La mano tendida de Lázaro, pidiendo limosna a la puerta de su casa, era, ante todo, para el Epulón, una oportunidad que no supo o no quiso ver. Cuando alguien te tiende una mano desde su necesidad, y tú le tiendes la tuya desde tu “riqueza”, sea una limosna, una acogida, una sonrisa, un tiempo de tu vida… y, en consecuencia, sales de ti mismo, tú también recibes, recibes mucho más de lo que has dado… porque Dios anda “revoloteando” por ahí. Hoy la celebración día del Migrante y del Refugiado, con el lema «construir juntos el futuro», es también una invitación a desatrincherarse, tanto cuando nos acogen como cuando somos nosotros los que acogemos, y una invitación a dejar que el Espíritu de Dios “revolotee” entre nosotros… Él es el verdadero constructor del verdadero Futuro.

SÁBADO 24.09.2022
Sábado de la 25a semana del TO, par
Preciosa y verdadera reflexión la que nos deja hoy Qohélet, aunque con ese tono gris que le da la falta de la fe en la resurrección, ¡en la plenitud de la vida y del amor! tras la muerte, (estamos todavía en el A.T.). Pero al mismo tiempo que preciosa y verdadera, es profética por esa invitación que nos hace a disfrutar de la vida. Profética para personas de espíritu pusilánime (un poco masoquistas) que piensan que a Dios sólo le es agradable el sufrimiento: «Acuérdate de tu Creador en los años mozos, antes de que…». Y profética para personas de espíritu libertino que creen que sólo en el placer está el sentido de la vida: «sábete que Dios te llevará a juicio para dar cuenta de todo». El equilibrio entre ambos extremos nos lo traza, una vez más, Jesús. Él supo disfrutar de la vida como nadie: «comilón y borracho», le decían sus enemigos. Pero al mismo tiempo supo entregarla cuando había que entregarla: «el Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres». Señor, «ten compasión de tus siervos».

VIERNES 23.09.2022
Viernes de la 25a semana del TO, par»
Cuando la vida y sus «fatigas» “descansan” en Dios («el Señor, mi roca… mi alcázar», dice el salmo responsorial), todo «tiene su tiempo» y, así, aún en medio de las “oscuridades” de la vida, el corazón mantiene la paz y el “rumbo”. Pero si la vida sólo descansa en uno mismo y en –los que uno cree– sus saberes, entonces… Entonces pasa lo que hoy les pasa a tantos, incluso a personas que se tienen por religiosas: ir tirando, vacío, miedo… Jesús cuida su comunión con el corazón del Padre, es su oración, y así nos señala el camino de una vida “descansada” en Dios. Jesús “sale” de la oración y formula una pregunta: «¿Quién dice la gente que soy yo?». Suena como un “encargo” del Padre, y la respuesta de Pedro como un recordatorio para Jesús (y para nosotros) de que su misión y su obra “descansan” en las manos de Dios, y de ahí brota su eficacia y su fruto… «Señor, ¿qué es el hombre para que te fijes en él?»… para que le invites a “descansar” su vida en Ti.

JUEVES 22.09.2022
Jueves de la 25a semana del TO, par
Herodes parecía tenerlo todo muy claro: él era el rey y él decidía… también sobre la vida de sus súbditos. Pero de pronto se cruza en su vida algo que le desasosiega, que le remueve por dentro, que le recuerda que quizá no es tan poderoso como se cree. A Herodes llegan las noticias sobre un nuevo profeta más “poderoso” que aquél al que él había mandado decapitar… Le pasó a Herodes, le pasó a Qohélec (siglo III a. C.), y nos pasa a nosotros, que de pronto, por una palabra, una noticia, o una “tontería”, etc. se nos derrumba aquella “seguridad orgullosa” con la que caminábamos por la vida… se nos desmorona nuestra autosuficiencia, y nos deprimimos. Sentimos de pronto, como Qohélec, que todo es «vanidad de vanidades», que nada en este mundo merece la pena… Se pasa mal y, si no nos controlamos, se lo hacemos pasar mal a los que nos rodean, (a veces, hasta nos hacemos violentos). Pero esta experiencia, lejos de ser un fracaso en la vida (que es como uno se siente interiormente), es una oportunidad de crecer. De crecer EN Dios, que es quien, en última instancia se ha acercado a nosotros a través de eso”, y nos ha “deslumbrado” (roto nuestros esquemas). De crecer HACIA Dios, quien es el anhelo último de toda vida y de todo corazón. Y de crecer CON Dios, que es el único que nos puede coger de la mano para dar este salto hacia adelante, hacia una vida cada vez más purificada por el Amor. «Señor, tú has sido nuestro refugio de generación en generación», que lo seas siempre.

MIÉRCOLES 21.09.2022
San Mateo, apóstol y evangelista
Ef 4, 1-7. 11-13; Sal 19(18), 2-3. 4-5b; Mt 9, 9-13
San Mateo es la historia de una mirada, una mirada cargada del fuego del amor y de la misericordia que, desde el corazón del Dios trinitario, a través de los ojos de Jesús, encendió el corazón de un recaudador de impuestos… De una mirada y de una palabra –«Sígueme»– eco y semilla de aquella Palabra que «en el principio» creó el cielo y la tierra. Con la mirada y la palabra de Jesús, cambió la forma de mirar y de decir de Mateo. La tradición le atribuye uno de los cuatro evangelios canónicos. Mirada y palabra de Jesús, de Mateo… «Sed siempre humildes y amables, sed comprensivos, sobrellevaos mutuamente con amor, esforzándoos en mantener la unidad del Espíritu con el vínculo de la paz», nos dice hoy la primera lectura. Mirada y palabra que contrasta con la mirada y la palabra de los fariseos: «Andad, aprended lo que significa “Misericordia quiero y no sacrificio”». ¿Cómo es mi mirada y mi palabra?

MARTES 20.09.2022
Martes de la 25a semana del TO, par
Quizá todos los que rodeaban a Jesús esperaban que éste saliera corriendo a abrazar a su madre y a sus parientes. Tal vez hacía tiempo que no los veía. Pero no, Jesús no lo hace, al contrario, parece mostrar una actitud un tanto dura y distante. Seguro que a los testigos se les quedó grabado aquel gesto y aquella lección que, con él, nos transmitió el Señor: que los sentimientos y los afectos no nos hagan olvidar lo que de verdad “arma” y “sostiene” nuestra vida y, justamente, los modula, encauza y purifica, para que no se conviertan en “tiranos” que acaban por destruirnos (“amores eternos” o “vocaciones a prueba de bomba” que duran 3 meses o menos), sino, al contrario, sirvan y se integren en un proyecto de maduración personal, afectivo, vocacional… «Los que escuchan la palabra de Dios y la cumplen».

LUNES 19.09.2022
Lunes de la 25a semana del TO, par
Tres consejos para comenzar la semana: no negar un favor, no pleitear sin motivo y no envidiar al violento. Tres consejos que tienen un denominador común: la humildad. La humildad de quien sabe que, al final, la última palabra la tiene Dios y que «no hay nada oculto que no llegue a descubrirse un día». La humildad de quien piensa antes en el otro y en lo que Dios quiere, que el propio impulso o sentimiento. Es verdad que, a veces, cuesta hacer un favor, sobre todo si quien nos le pide no es de los que tenemos mucho afecto. Es verdad, también, que a veces estamos mal y todo nos molesta, y acaba pagando el pato –nos pleiteamos con– quien tenemos cerca. Y, finalmente, ¿qué nos pasa cuando vemos que en la vida de cada día parecen triunfar los “violentos” y desalmados? Por ello la Iglesia, cada noche, antes de irnos a acostar, nos invita a examinar nuestro día y a orar. «Sálvanos, Señor, despiertos, protégenos mientras dormimos, para que velemos con Cristo y descansemos en paz». Amén.

DOMINGO 18.09.2022
Domingo XXV del TO, ciclo C
Qué fácil es gritar, cuando no se tiene nada, contra los que tienen. Pero, si por un golpe de fortuna, pasamos al grupo de los agraciados, qué fácil es olvidarse de aquellos gritos primeros. Dios quiere que usemos nuestras manos y nuestra inteligencia para mejorar en la vida. Pero Dios no quiere que nuestro bienestar se construya sobre la injusticia de la explotación de los otros (ni de uno mismo: ¿es vida la vida de quienes son absorbidos por el ansia de riquezas?). Tampoco quiere que las riquezas nos atrapen el corazón y nos hagan sus esclavos, ni quiere que nos olvidemos de que sólo somos administradores de los bienes de este mundo “que aquí todos se quedarán cuando nosotros dejemos este mundo”. Siempre, pero aún más en un mundo tan económicamente complejo como el actual, nunca podemos estar seguro de la plena limpieza/justicia de nuestras riquezas. Señor, aparta de nosotros la codicia y el egoísmo. Señor, haznos agradecidos y generosos… “astutos”, como el administrador de la parábola, para que nos alabes cuando lleguemos a Ti.

SÁBADO 17.09.2022
Sábado de la 24a semana del TO, par
¡Hay tantas cosas que no entendemos! Podemos empezar por nosotros mismos, seguir por los que nos rodean, y avanzar hacia nuestras circunstancias y nuestra historia, para llegar finalmente al universo. Tantas cosas que no entendemos… ¡Infinitas! Y sin embargo nos atrevemos a pontificar sobre Dios y su Misterio… para acabar recortándolo o negándolo y, así, convertirnos en pobres náufragos que navegan a la deriva en medio del universo. Como aquellos corintios que negaban la posibilidad de la resurrección personal simplemente porque no la entendían. Pero hay otra actitud posible. Jesús nos lo recuerda con sus palabras finales del evangelio de hoy. Así, cada (verdadero) interrogante que se cruza en nuestra vida es una semilla de eternidad que, bien, podemos rechazar (y dejar sin fruto) o, bien, podemos acoger «con un corazón noble y generoso, y guardarlo» para que dé fruto. Es la actitud de quien, como nos dice hoy el salmo responsorial, «camina en la presencia de Dios a la luz de la vida».

VIERNES 16.09.2022
Viernes de la 24a semana del TO, par
Que tras aquel grupo de harapientos y de aquellas mujeres que seguían a Jesús por los caminos de Galilea se encontrase el futuro de la humanidad, que tras la putrefacción de un cadáver se “abra” una vida nueva, que la Cruz del Viernes Santo sea sólo el velo que oculta la plenitud de la Vida… son cosas que escapan a la lógica humana y, aún más, a las ideologías materialistas actuales de todo tipo. Pero éstas están dejando detrás de sí un reguero de “zombies”, mientras que la fe y el testimonio de los santos siguen llenando corazones de luz y esperanza, y el mundo de obras de caridad. «Yo te invoco, Señor, porque tú me respondes, inclina el oído y escucha mis palabras. Muestra las maravillas de tu misericordia, tú que salvas de los adversarios… Guárdame como a las niñas de tus ojos, a la sombra de tus alas escóndeme de los malvados que me asaltan, del enemigo mortal que me cerca.»

JUEVES 15.09.2022
Jueves de la 24a semana del TO, par
Era mujer y, encima, una pecadora… La (mala) vida le había despojado de toda su dignidad… No tenía ya nada que ofrecerle a Dios y, en la calle, hasta sus clientes, la trataban y miraban con desprecio. Y, sin embargo, –o quizá, por ello mismo–, ella comprendió lo que mentes más preparadas y estudiadas, y vidas (aparentemente) más ordenadas, quizá, nunca llegaron a comprender: que Jesús no era un hombre cualquiera, que él escondía un Misterio, y ese misterio era de Amor y Salvación, de “pastor que va en busca de la oveja perdida” y de “padre que espera sin desfallecer la vuelta del hijo”, de gracia desbordante y de ternura… Quizá le bastó cruzar una sola vez su mirada con la de Jesús, quizá le bastó (o se sumó) lo que la gente decía de él y de sus palabras… Y siempre, la gracia. Esa gracia que es gracia/gratis, pero que va unida misteriosa e incomprensiblemente para nosotros a la humildad/humillación… Lo demás lo cuenta el evangelio de hoy. También san Pablo en la primera lectura de esa gracia hoy nos habla.
Gracia y humildad, que hoy también recordamos en aquella que fue la “humilde esclava del Señor” “agraciada con la maternidad divina”, y a la que hoy la Iglesia invoca como Madre Dolorosa, Virgen Bien Aparecida, Ntra. Sra. del Camino… Que ella interceda por nosotros en este día y siempre.

MIÉRCOLES 14.09.2022
La Exaltación de la Cruz
Flp 2; 6-11; Sal 78(77), 1-2. 34-35.36-37. 38; Jn 3, 13-17
Una iglesia de pueblo. Un gran Cristo crucificado en tamaño real preside el presbiterio. Un hombre, traspasado por el dolor de la muerte del hijo, entra en la iglesia y le increpa en voz alta al Señor: “¿Por qué él, por qué no yo…?”. Por un momento su mirada se detiene en el Crucificado y un rayo de luz atraviesa su alma. El hombre cae de rodillas, se abre la fuente de sus lágrimas y, entre sollozo y sollozo, musita: “Perdóname, perdóname…”. Quizá no estuvo mucho tiempo allí postrado, el suelo de la iglesia era duro, –de piedra–, y sus rodillas no eran ya jóvenes, pero por su corazón pasó una Eternidad. Misterio de la Cruz, misterio de Amor, el Hijo que muere para que los “hijos” tengamos vida… Vida.

MARTES 13.09.2022
Martes de la 24a semana del TO, par
En mi ya larga vida como cura, me ha tocado ya muchas veces acompañar el dolor de madres que han dado sepultura a sus hijos/as… Un dolor tremendo del que brotó, –en la cercanía y en el cariño del acompañamiento–, una amistad, –como de familia–, que ha pervivido a lo largo de los años… Incluso, aunque yo me encuentre lejos y se pasen los años, son madres que llevo siempre en mi corazón… Algunas de ellas ya han dejado también este mundo y gozan con sus hijos/as del abrazo amoroso y perdonador de Dios… de la Vida en plenitud. Esa Vida que un día, –un trozo enorme de ella–, se les fue con el hijo/a que tuvieron que decir «hasta pronto en el cielo». Con la perspectiva de los años, hoy quiero cantar el don de la fe, que transfiguró aquellos momentos en los que parecía que el dolor tenía la última palabra… e hizo brotar “algo nuevo”. Purifica, Señor, a tu Iglesia y a tus ministros, para que en tantos escenarios de dolor de nuestra sociedad y de nuestro mundo sigan llevando un signo y la presencia de tu Vida. Amén.

LUNES 12.09.2022
Lunes de la 24a semana del TO, par
Desde que comienzo mi andar por las mañanas y siento la vida fluir por mis venas y la gracia por mi corazón… «Señor, yo no soy digno…» Cuando celebro la Eucaristía y, a pesar de los trabajos y preocupaciones, dedico tiempo a la oración… «Señor, yo no soy digno…» Cuando venzo el miedo a lo que me aguarda y soy capaz de esbozar una sonrisa ante mi “enemigo”… «Señor, yo no soy digno…». «Señor, no soy digno… pero ha bastado una palabra tuya», una palabra que eres tú mismo, los brazos y el costado abiertos –clavados– para acogerme… para acogernos… para empujarnos… En la Eucaristía acogemos y celebramos este Misterio de “pequeñez” transfigurada y “elevada”… pero si Pablo viese hoy nuestras eucaristías, ¿qué nos diría?

DOMINGO 11.09.2022
Domingo XXIV del TO, ciclo C
A lo largo de la historia de la humanidad, la revelación de Dios como «compasivo y misericordioso, lento a la cólera y rico en piedad» se ha ido abriendo paso, –especialmente en la tradición judía–, hasta llegar a Jesucristo: Él es el rostro visible, no sólo del Dios invisible, sino, y, sobre todo, del Dios que hace «fiesta en el Cielo por un solo pecador que se convierta». Paradójicamente, la imagen de un Dios castigador sigue siendo persistente en ciertos corazones y en ciertos ambientes que se dicen cristianos. Como los escribas y fariseos del evangelio de hoy, no sólo es que le ponemos límites a la Amor de Dios, –¡¿y quién soy yo para hacerlo?!–, sino que incluso, nos molesta que Dios sea así, y preferimos seguir “jugando” con Él a los “méritos” y “deméritos”, –como jugaba Saulo de Tarso antes de su conversión–, antes que dejarnos empapar y transfigurar por su Amor, –como fue empapado y transfigurado Saulo, pasando a ser Pablo… san Pablo–. Que el precioso testimonio que nos deja hoy san Pablo en la segunda lectura, nos conmueva y nos haga partícipes de la gracia (de “gratis”, sin pago, sin “méritos”…) que él recibió… y nos transforme.

SÁBADO 10.09.2022
Sábado de la 23a semana del TO, par
Lo tenían difícil los cristianos de Corinto para vivir su fe con coherencia, sin contaminarse (y engañarse) de los usos y costumbres paganos de su tiempo… Lo tenemos difícil hoy nosotros, cristianos del siglo XXI, en medio de esta sociedad que tiene largos “tentáculos” de seducción afectivo-sensuales e ideológicos… Hoy Jesús nos invita a preguntarnos cómo vivimos nuestra fe, y hacerlo, no con grandes “teorías”, sino a través de nuestros frutos en el día a día de nuestra vida. A cada uno nos toca examinarnos… «Escuchar las palabras de Jesús y ponerlas en práctica» exige hoy decisión, súplica orante, tiempo ganado a las absorbentes redes sociales y a insustanciales programas de televisión, cierta distancia y desprendimiento de los bienes de este mundo, y tiempo dedicado al Señor (en el silencio), a las personas (en la cercanía afectiva y humana) y a la creación (contemplativos y fascinados)…

VIERNES 09.09.2022
Viernes de la 23a semana del TO, par
La fe es, como el amor, una fuerza que te arrastra y que te lleva donde tú “no habías pensado ir”. Pablo, en la primera lectura que hoy hemos leído, da testimonio de esa “fuerza” que le arrastra y le lleva a predicar apasionadamente el evangelio… quizá frente a los que le acusaban de anunciar el evangelio por “intereses propios”. Esa “fuerza” no es sino manifestación del anhelo de Dios que todo ser humano lleva en su corazón y que hoy canta el salmo responsorial: «Mi alma se consume y anhela los atrios del Señor…». Pero la fe no sólo te da esa “fuerza”, también te hace humilde –que no te sientes por encima de nadie–, y te hace caminante y aprendiz con los otros creyentes, –especialmente, aprendiz del misterio de la Cruz (por amor), como el Maestro–, y, finalmente, al hilo del evangelio de hoy, te hace misericordioso y comprensivo, antes que juez y engreído.

JUEVES 08.09.2022
Natividad de la Bienaventurada Virgen María
Rom 8, 28-30; Sal 13(12), 6AB. 6C; Mt 1, 1-16. 18-23
Hay siempre un sonar constante de alegres campanillas en el cielo. Los ángeles con gozo profundo las tañen cada vez que un nuevo ser humano viene a este mundo: Abrahán, Isaac, Jacob… David, Salomón, Roboán… Jeconías, Salatiel, Zorobabel… Incluso aunque esa personita viva pocos días o pocas horas, incluso aunque nazca para la eternidad antes de nacer para la vida… –las cosas desde el cielo no se ven como desde la tierra–. Pero hubo un “día” en que aquellas campanillas sonaron con una intensidad y sonoridad muy especiales. Era el “día” en que nacía la niña en cuyo vientre -como si del mismo cielo se tratara- se engendraría al Hijo de Dios, y, por tanto, la niña en cuyo vientre y en cuyo corazón tendría cabida toda la humanidad. También yo, también tú… cada uno de nosotros. Hoy recordamos y celebramos ese día… ¡Que las campanillas del cielo resuenen en tu corazón y en tu vida!

Im Himmel läuten ständig die Glöckchen der Freude. Die Engel läuten sie mit großer Freude jedes Mal ein, wenn ein neues menschliches Wesen in diese Welt kommt: Abraham, Isaak, Jakob… David, Salomo, Rehabeam… Jeconja, Shealtiel, Zerubbabel… Selbst wenn dieses kleine Wesen nur ein paar Tage oder ein paar Stunden lebt, selbst wenn er für die Ewigkeit geboren wird, bevor er für das Leben geboren wird… -die Dinge nicht vom Himmel wie von der Erde ausgesehen werden-. Aber es gab einen «Tag», an dem diese Glöckchen mit einer ganz besonderen Intensität und Klangfülle läuteten. Es war der «Tag», an dem das Mädchen geboren wurde, in dessen Schoß -als wäre er der Himmel selbst– der Sohn Gottes gezeugt werden sollte, und damit das Mädchen, in dessen Schoß und Herz die ganze Menschheit einen Platz haben sollte. Ich auch, du auch… jeder von uns. Heute erinnern wir uns an diesen Tag und feiern ihn… Mögen die Glöckchen des Himmels in deinem Herzen und in deinem Leben läuten!

MIÉRCOLES 07.09.2022
Miércoles de la 23a semana del TO, par
Cuando la fe se “desconecta” del «amor primero» acaba por convertirse en una rutina o en un “por si acaso” (y, en el fondo, en una forma de mantener exorcizados nuestros miedos), y, entonces, ni se entiende lo que significa el celibato ni otras muchas cosas del misterio cristiano. Y no digamos nada cuando la fe se ha quedado sólo en un empleo o una ocupación… La fe, como el amor humano (el verdadero, no el de usar y tirar), tienen mucho de “locura”, de esa locura santa (porque no es de este mundo) que le hará decir a Jesús: «Bienaventurados los pobres… Bienaventurados los que ahora tenéis hambre… Bienaventurados los que ahora lloráis… Bienaventurados vosotros cuando os odien…». Y nos dice hoy el salmo responsorial: «Escucha, hija, mira: inclina el oído, olvida tu pueblo y la casa paterna; prendado está el rey de tu belleza: póstrate ante él, que él es tu señor.» Esa hija soy yo, somos cada uno… y Dios, en su “locura”, está prendado de nosotros, dejémonos contagiar un poco de ella…

MARTES 06.09.2022
Martes de la 23a semana del TO, par
Se me representa este evangelio de hoy como una serie de círculos concéntricos: en el centro, Jesús quien «pasa la noche orando a Dios» y así recibe la gracia –«una fuerza que los curaba a todos»– que, desde el corazón del Padre, pasa a los círculos que van alrededor: en primer lugar, el círculo de los apóstoles, después el del «grupo grande de discípulos», y finalmente el círculo de la «gran muchedumbre del pueblo», esos que se acercaban a Jesús para ser sanados. Y podíamos añadir un último círculo, el de aquello que no saben o no quieren saber nada de Jesús, que buscan otros “centros” para su vida. Y, quizá, entre ellos encontramos aquellos que, como nos dice hoy san Pablo, han olvidado que «fueron lavados, santificados, justificados en el nombre del Señor Jesucristo y en el Espíritu de nuestro Dios», aunque se digan cristianos. A este último círculo también llega la gracia porque «el Señor ama a su pueblo», pero en él hay tanto ruido y tantas distracciones que es difícil acoger esa gracia, que es difícil reconocer que todos, de una forma o de otra, necesitamos ser sanados/amados por el Señor.

DOMINGO 04.09.2022
Domingo XXIII del TO, ciclo C
Hay personas que, –como los niños pequeños–, “lo quieren todo”. Pero todo no se puede tener y quien vive así vive en una continua insatisfacción existencial (amargura). Hay que aprender, por tanto, a escoger, y, sobre todo, hay que saber poner en el centro de nuestra vida aquel FUNDAMENTO que es garantía de verdadero “saber vivir”, de verdadero “saber ser”… Ese FUNDAMENTO sólo puede ser Dios, el Dios de Jesucristo, principio y fin de todo lo creado. Por tanto, sólo cabe caminar en la vida con humildad y con confianza ante Él (cf. 1ª lec.). Y es aquí donde tenemos que entender la invitación de Jesús a «posponer padre, madre…» y a «llevar la cruz tras de Él». Tarea, –«torre» y «batalla», dice el evangelio– imposible para los hombres si no le ponemos a Él en el FUNDAMENTO de nuestra existencia. A Él que hace nuevas las cosas, a Él que cambia la mirada de los hombres, como cambió la mirada de Filemón sobre su esclavo huido Onésimo (cf. 2ªlectura): «Quizá se apartó de ti por breve tiempo para que lo recobres ahora para siempre; y no como esclavo, sino como algo mejor que un esclavo, como un hermano querido…». ¡¡¡Quién podrá entender los caminos de Dios!!!

SÁBADO 03.09.2022
Sábado de la 22a semana del TO, par
«Porque os quiero como a hijos», escribe Pablo a los cristianos de Corinto para amonestarles, –es hermoso, y un gran don de Dios, poder querer así a la gente–; y Jesús, en el evangelio, se comporta con sus discípulos como un “padre”, –es lógico, lo “aprendió” junto al corazón de su Padre–. Pero también, como hemos escuchado, no es fácil para algunos –«unos fariseos»– comprender la actitud de Jesús: para ellos las normas y leyes están por encima de las personas. Normalmente esta actitud va unida a la de mostrarse autosuficientes ante Dios y mirar a los demás por encima del hombro (cf. parábola del fariseo y del publicano, Lc 18, 9-14). Personas así había también en la comunidad de Corinto… y sigue habiendo en todas las comunidades; para ellas –y todos pecamos un poco de esto– son las palabras de Pablo: «A ver, ¿quién te hace tan importante? ¿Tienes algo que no hayas recibido? Y, si lo has recibido, ¿a qué tanto orgullo, como si nadie te lo hubiera dado?». Señor, que también nuestros labios –y nuestro corazón– «pronuncie la alabanza del Señor» antes que la autoalabanza. Amén.

VIERNES 02.09.2022
Viernes de la 21a semana del TO, par
Tememos los juicios humanos, y hasta cierto punto tenemos razón: a veces han destrozado vidas. Pero los juicios humanos morirán con los hombres y, entonces, quedará sólo el juicio de Dios… Y ya no valdrá el “yo ayunaba”, “yo hacía”, “yo cumplía”, “yo daba”, “yo merezco”… (mantos, odres, vino viejo/s); sino el “Tú me regalaste”, “Tú me amaste y me enseñaste a amar”, “Tú me perdonaste”, “Tú rompiste mis cadenas”, “Tú ablandaste mi corazón de piedra”…  acompañado todo de un enorme grito de gratitud en el corazón… (mantos, odres, vino nuevo/s). Así que humilde y agradecido «encomienda tu camino al Señor, confía en él, y él actuará».

JUEVES 01.09.2022
Jueves de la 21a semana del TO, par
Si tomáramos conciencia que todos nuestros saberes humanos son nada ante la Sabiduría de Dios… Si tomáramos conciencia que toda esa belleza que perseguimos será “paja que lleva el viento” cuando contemplemos la Belleza de Dios… Si tomáramos conciencia que todos nuestros esfuerzos por mejorar son como “espuma en el mar” ante la Gracia de Dios… La experiencia de nuestros límites –a todos los niveles– no debiera ser nunca un fracaso, sino una oportunidad de recentrar nuestra vida en Dios, dejando atrás nuestras autosuficiencias y orgullos. Pedro y los demás apóstoles viven una experiencia así en la pesca milagrosa; y Pablo les dice a los cristianos de Corinto que «nadie os engañe»… Hoy vivimos, muchas veces, muy “engañados”… Danos, Señor, la humildad de “caminar” sólo contigo…

MIÉRCOLES 31.08.2022
Miércoles de la 21a semana del TO, par
«Yo soy de…»… y nos hacemos la guerra, y nos enfrentamos unos a otros… como niños que se dicen: «Mi papá es más fuerte que el tuyo…» En Corinto, como ahora, como siempre… teologías, devociones, santos o advocaciones que ocupan el lugar del Señor, que se convierten en ídolos… que no nos dejan “caminar”, que no nos dejan crecer, que no nos dejan ser sanados… que en nombre de Cristo nos alejan de Cristo… que no le dejan al Señor ser señor de nuestras vidas. Señor, cógeme de tu mano y levántame… Señor, impón tus manos sobre mí y sáname… Señor, llévame contigo al desierto… Señor, que no quiera retenerte, apropiarme de Ti… “que sea sólo de Ti”.

MARTES 30.08.2022
Martes de la 22a semana del TO, par
«¿Qué tenemos que ver contigo, Jesús Nazareno?» Quizá no sólo sea algo que ocurrió en el pasado, sino algo que ha ocurrido siempre a lo largo de la historia de la Iglesia, y ocurre hoy: que desde dentro de la misma sinagoga (Iglesia), alguien le increpe a Jesús, que crea que sus teologías y sus planteamientos sociológico-pastorales están por encima de Él, en el fondo, que Jesús, aunque sigamos nombrándole, es una persona pasada de moda, y que lo importante es lo que nosotros pensamos, creamos o hacemos. Quizá en la propia comunidad de Corinto ocurría algo parecido y por ello Pablo contrapone el espíritu del mundo al Espíritu de Dios. Es una conversión que todos, constantemente, tenemos que pedir como gracia: «tener la mente de Cristo»… su Espíritu.

LUNES 29.08.2022
Lunes de la 22a semana del TO, par
El martirio de san Juan Bautista
La actitud de los nazaretanos (cf. evangelio del día) cambia radicalmente cuando Jesús les recuerda que Él mismo, y por tanto Dios, nos es ni una obligación ni un derecho adquirido, sino gracia –Dios es GRACIA– y así se ha manifestado a lo largo de su historia: «El profeta Elías fue enviado a una viuda en el territorio de Sidón… Un sirio fue curado de la lepra…». Que nos pongan delante de nuestra cara las mentiras (o las verdades a medias) en las que vivimos, a todos nos escuece y los nazaretanos, ya al comienzo de su vida pública, quieren quitarle la vida a Jesús. ¿Y qué decir de Herodes y Herodías? La verdad que Juan el Bautista les pone delante lo llevará finalmente a su decapitación (cf. evangelio de la memoria). Hace falta mucha humildad y grandeza de corazón para dejarnos purificar por la Verdad que llega a nuestras vidas por múltiples caminos. Humildad y grandeza de corazón que nos muestra hoy Pablo en 1Co 2, 1-5: ¡un texto que los ministros del evangelio debiéramos llevar siempre con nosotros, grabado en nuestro corazón!

Yo mismo, hermanos, cuando vine a vosotros a anunciaros el misterio de Dios, no lo hice con sublime elocuencia o sabiduría, pues nunca entre vosotros me precié de saber cosa alguna, sino a Jesucristo, y este crucificado. También yo me presenté a vosotros débil y temblando de miedo; mi palabra y mi predicación no fue con persuasiva sabiduría humana, sino en la manifestación y el poder del Espíritu, para que vuestra fe no se apoye en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios.

DOMINGO 28.08.2022
Domingo XXII del TO, ciclo C
La libertad de Jesús molesta a los “guardianes” de la ley: «lo estaban espiando». Jesús los desafía, –¡está en juego la verdadera imagen de Dios!–, los desafía y cura a un «enfermo de hidropesía». Y Jesús va más lejos, les pone en un aprieto con una pregunta. Y dice el evangelista: «Y no supieron replicar a esto». Esta parte del evangelio no la recoge la lectura de hoy, pero está bien recordarla para entender mejor los fragmentos que hoy leemos, porque Jesús no quiere humillarlos para salir triunfador, sino para que aprendan la lección y se conviertan: la verdadera religión no es la del rigorismo para uno mismo, ni la del juicio severo contra los demás, (que, además, suelen ir muy unidas estas actitudes), sino la de sentirse pobre y humilde ante Dios, y generoso y desprendido con los hombres. Con las palabras de la 2ª lectura podíamos decir que por el bautismo nos hemos acercado, no al monte Horeb (fuego, tormenta, trompetas…), sino al monte Sion, ciudad del Dios vivo… al Mediador de la nueva alianza, Jesús. Así que no necesitamos ir de «importantes» por la vida ni por la fe, no necesitamos sacar beneficio ni interés de todo lo que hacemos, etc. etc. porque Él es nuestra mejor “recompensa”, nuestro mejor “interés”, nuestra gloria, nuestro amor… nuestro TODO.

SÁBADO 27.08.2022
Sábado de la 21a semana del TO, par
Otra parábola. Una parábola que algunos ha interpretado como que, lo cristiano es “hacer carrera”, tener los mejores puestos… Pero no parece que se esforzaran mucho los dos primeros protagonistas de la parábola: «El que recibió cinco talentos fue enseguida a negociar con ellos y ganó otros cinco. El que recibió dos hizo lo mismo y ganó otros dos». ¿Entonces dónde está el quiz de la misma? En la confianza, “agilidad”, desenvoltura… con que proceden los dos primeros, frente a la desconfianza y al miedo atenazante del tercero. Cuando, –como nos dice la 1ª lectura de hoy–, estamos ante un Dios que «ha escogido lo necio del mundo, la gente baja del mundo, lo despreciable…», y que por nosotros se ha hecho «sabiduría, justicia, santificación y redención» ¿cómo podemos ser todavía creyentes que viven del miedo al castigo, atenazados, sin “oxígeno”, o, en el otro extremo, queriendo exhibirnos, hacer méritos, ante Él? «El que se gloríe, que se gloríe en el Señor», y en Él busque su fuerza, su humildad, su constancia, su alegría, su amor… su TODO, como lo buscó santa Mónica y así oró e intercedió por su hijo Agustín.

VIERNES 26.08.2022
Viernes de la 21a semana del TO, par
Sólo es una parábola, –no le busquemos que diga lo que no quiere decir–; una parábola que nos habla de “cosas” que no se pueden comprar o vender, que no se pueden transferir como si de un objeto se tratase; una parábola que nos habla de la fe, de la esperanza, y del amor… de todo eso que tú recibes como don y que si tú lo cuidas lo “tienes” pero si no lo cuidas lo pierdes… porque no se improvisa: «Velad», nos invita Jesús. Y nos habla también de una sabiduría que no se aprende en los libros, ni en internet, que se aprende en la vida cuando confías en Dios, cuando te apoyas en Dios, cuando te abandonas en Dios… cuando se la pides con humildad a ese Dios que «en su necedad es más sabio que los hombres, y en su debilidad más fuerte que los hombres». Sabiduría de la Cruz la llama Pablo… «escándalo para los judíos, necedad para los gentiles». Tal vez yo (y ¿la Iglesia de hoy?) hayamos olvidado un poco esta Sabiduría…

JUEVES 25.08.2022
Jueves de la 21a semana del TO, par
«Estad en vela, porque no sabéis qué día vendrá vuestro Señor». Es verdad que está advertencia del Señor tiene una dimensión moral, pero, una dimensión moral que, no se apoya en el miedo y, mucho menos, en una especie de narcisismo espiritual, sino en algo mucho más profundo. San Pablo en el saludo de su 1ª cara a los Corintios (1ª lectura de hoy) de ello nos da testimonio. Está en vela quien, como él, vive en continua acción de gracias a Dios «por vosotros»; y esto por dos motivos: el primero, porque toda gracia, todo don, viene de Él; y, el segundo, porque Dios es el único que puede garantizar nuestra fidelidad hasta el final. Además, vivir en continua acción de gracias a Dios no es sólo estar preparado para el «día que vendrá nuestro Señor», es también estar acogiéndole continuamente en el hoy de nuestra vida, en las personas y acometimientos que con ella se tejen… nos tejemos. ¡Estar preparados es vivir tejidos de eternidad!

MIÉRCOLES 24.08.2022
f. San Bartolomé, apóstol
Ap 21, 9b-14; Sal 145(144), 10-11. 12-13ab. 17-18; Jn 1, 45-51
Da gusto trabajar y convivir con personas «de verdad en quien(es) no hay engaño», personas transparentes que no tienen doblez. Lo contrario, la actitud de quienes van de “sabihondos” o “superiores” (o de “mártires”, que también los hay), suele ser bastante incómodo en la convivencia y en el trabajo con ellos. ¿Qué hacía Natanael/Bartolomé debajo de la higuera cuando lo «vio» el Señor? No lo sabemos. Quizá no hacía nada, quizá sólo se preguntase si el Mesías vendría pronto, incluso lo suplicase con una oración… Pero, en cualquier caso, ese “ver” del Señor sin que él se diese cuenta queda como testimonio de esa mirada amante del Señor que nos acompaña en el camino de la vida “hacia la Jerusalén celestial” cuyos «doce cimientos» llevan escritos «los nombres de los doce apóstoles del Cordero»… también el de este apóstol que hoy celebramos y al que pedimos nos dé un corazón como el suyo, para que así también nosotros podamos «ver –y vivir– cosas mayores» de las que este mundo, muchas veces, tan ciego, nos ofrece.

MARTES 23.08.2022
Martes de la 21a semana del TO, par
Los cristianos de Tesalónica estaban inquietos, –quizá, alarmados–, por la supuesta inmediata venida del Señor. Algunos se encargaban de azuzar esta inquietud… algún beneficio sacarían. Hoy también, constantemente, a través de los titulares de las noticias nos llegan “alarmas” catastróficas… que si hubiese una erupción masiva de volcanes, que si la tierra se aleja del sol, que si la guerra nuclear, que si virus invencibles y destructores… Por ello, las palabras de Pablo al final del texto de la primera lectura de hoy, nos valen también a nosotros: «Que el mismo Señor nuestro, Jesucristo, y Dios, nuestro Padre, que nos ha amado y nos ha regalado un consuelo eterno y una esperanza dichosa, consuele vuestros corazones y os dé fuerza para toda clase de palabras y obras buenas». Como por ejemplo, –tomando las palabras de Jesús en el evangelio–, «la justicia, la misericordia y la fidelidad». Y cuidemos lo de «dentro», el corazón. Al fin y al cabo, con catástrofe o sin ella, el río de nuestra vida está abocado a desembocar en el mar del Señor…

LUNES 22.08.2022
Lunes de la 21a semana del TO, par
La primera lectura de este lunes transmite positividad. Es verdad que en la comunidad cristiana de Tesalónica hay dificultades y sufrimientos, y también falsas concepciones sobre la, que ellos creen, inminente venida del Señor. Pero Pablo, en el comienzo de su 2ª carta, se fija en lo positivo de aquella comunidad: crece la fe, aumenta el amor mutuo, son pacientes, tienen propósito de hacer el bien… y por ellos da gracias a Dios, quien, a través de su Espíritu, es el que obra tales «maravillas». Por contra, el evangelio, en las palabras de Jesús contra escribas y fariseos, nos transmite negatividad. Estamos al final de una época del judaísmo, y sobran leyes, preceptos, legalismos, y falta espíritsu… Que Santa María, Reina, cuya memoria hoy celebramos, interceda por nosotros y nos ayude a mantener el corazón siempre abierto a la novedad y frescura del Espíritu por el que ella misma se dejó conducir…

DOMINGO 21.08.2022
Domingo XXI del TO, ciclo C
Decía mi abuela que, qué pronto nos olvidamos de dónde venimos. Se refería a los hijos del pueblo que, fuera del mismo, habían hecho fortuna y que, al cabo de los años volvían dándose importancia y mirando por encima del hombro a los demás. Pero así nos pasa, a veces, en nuestra vida religiosa, como nos alertan las lecturas de este domingo. Así que, pide la gracia de vivir tu fe en el gozo de saberte amado y salvado por el Señor, en la alegría y agradecimiento de su Amor infinito por ti (y todos), en la humildad de ser destinatario de un don que nos sobrepasa y ante el que no podemos ofrecer ningún mérito propio… Gozo, alegría, humildad… «puerta estrecha» por la que hoy nos invita a entrar el Señor, lejos de todo engreimiento, de todo “meritismo”, de todo aislamiento autosuficiente de los demás…

SÁBADO 20.08.2022
Sábado de la 20a semana del TO, par
Lo dice muy bien el refrán castellano: «Dime de qué alardeas y te diré de qué careces». Pero estos “alardes” se dan tanto en la sociedad civil como en la eclesiástica, por ello, haríamos muy bien en detenernos unos momentos y preguntarnos de vez en cuando: ¿Qué escondo detrás de mis “alardes”? Jesús denuncia algunos en el evangelio de hoy. Y san Pablo (1Co 1,31; 2Co 10,17), citando a Jeremías (9, 22-23), señaló muy bien el camino de sanación: «El que se gloríe que se gloríe en el Señor». Sólo la Gloria de Dios es digna de gloriarse, pero cuando se manifiesta lo hace en la humildad y pobreza de nuestra carne (salvo en el pecado). ¡No acabamos de aprender y así perdemos la oportunidad de dejar sanar nuestras heridas…! Señor, que tu gloria habite en la «tierra» y en el «templo» de mi corazón herido.

VIERNES 19.08.2022
Viernes de la 20a semana del TO, par
«Hueso secos», sin carne, sin vida… en medio del «valle», calcinados por el sol… Hermosa y dramática descripción del estado de ánimo de aquellos israelitas que han perdido la tierra, el templo, su forma de vivir, sus ilusiones, sus proyectos de vida… Sin embargo, no han perdido la fe. Y así la fe en Dios se convierte en su única salida, en su única esperanza: «Yo mismo abriré vuestros sepulcros, y os sacaré de ellos, pueblo mío…». Quizá esta situación que describe el profeta Ezequiel puede tener hoy también, para muchos, toda su actualidad, porque también a nosotros se nos están desmoronando nuestros proyectos de vida, nuestras ilusiones, nuestra forma de vivir… ¿Tendremos la fuerza suficiente para seguir caminando, para seguir adelante en la vida o sucumbiremos con nuestros proyectos e ilusiones? Hoy, evidentemente, a muchos le falta la fe en Dios, pero al menos siempre podremos empezar por «amar al prójimo como a uno mismo», porque en este amor (y entrega) ya hay una semilla del amor a Dios y de la fe en Él.

JUEVES 18.08.2022
Jueves de la 20a semana del TO, par
Lo raro no es que un invitado no tuviese traje de boda, sino que los otros, los de “aquí te pillo y así tienes que ir a la boda”, lo encontraran. Recordemos que el banquete ya estaba preparado antes de ser ellos invitados… Quizá, entonces, es que nos tengamos que preguntar cuál es ese vestido de bodas que se encuentra «fácilmente» para asistir a una boda a la que te invitan por sorpresa (¡ya!) a pesar de que uno de los comensales no lo llevaba puesto. Y quizá es que ese “traje” no sea un traje o vestido físico, sino una actitud del corazón. Un banquete de bodas (de los de antes, ahora quizá se ha materializado todo) nos evoca la alegría del amor compartido, la gratitud de sentirte invitado a un acontecimiento importante y, por tanto, querido, la ilusión por los hijos que vendrán y la vida que seguirá… y, sobre todo, la grandeza de participar en un Misterio que nos sobrepasa: el amor de los esposos como sacramento del Amor de Dios a la humanidad. Los primeros invitados se lo perdieron por estar atrapados por los asuntos del mundo, y el último también: el que “no abrió la boca”, quizá porque la tenía demasiado llena (la abundancia de manjares le había atrapado: codicia, glotonería…). ¿No nos pasa un poco esto a nosotros, los que vivimos en sociedades de la abundancia? Infunde, Señor, en nosotros, tu Espíritu y que renueve nuestros corazones, que llevemos siempre puesto el “traje de bodas”.

MIÉRCOLES 17.08.2022
Miércoles de la 20a semana del TO, par
¿Y qué pasa si nos endiosamos –como reflexionábamos ayer–? Las lecturas de este día nos ponen ante sus consecuencias. Pues que olvidamos nuestros deberes más inmediatos, perdemos el amor primero y sencillo por lo que nos han sido encomendados: el profeta Ezequiel arremete hoy contra los pastores (reyes y jefes) de Israel. Y pasa también que perdemos el sentido de la gratuidad y de la gratitud: los contratados de la primera hora en la parábola. La verdadera experiencia religiosa es la que va “envuelta” en humildad y agradecimiento, en entrega generosa y a fondo perdido… Los seres humanos, incluidos los creyentes, fallamos muchas veces, por ello, un día más contemplamos a Jesucristo: él es el buen pastor que no se aprovechó de sus ovejas, sino que dio la vida por ellas… generosamente, gratuitamente…

MARTES 16.08.2022
Martes de la 20a semana del TO, par
¡Genial este comienzo del capítulo 28 de Ezequiel! ¡Y si sólo hubiera sido el príncipe de Tiro…! ¡Qué difícil que una persona no se endiose cuando tiene poder y dinero! ¡Cuánta gracia de Dios nos hace falta a todos pero, especialmente, a cuantos ocupan cargos políticos y económicos en nuestras sociedades! Las palabras de Jesús en el evangelio lo corroboran: «En verdad os digo que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos. Lo repito: más fácil le es a un camello pasar por el ojo de una aguja, que a un rico entrar en el reino de los cielos». Pero Jesús no tira la toalla: «Es imposible para los hombres, pero Dios lo puede todo». Santos como san Roque, al que hoy celebra la liturgia de este día, nos recuerdan este poder de Dios. Oremos los unos por los otros, especialmente por los que tienen cargos en nuestras sociedades y, al mismo tiempo, preguntémonos cada noche como el profeta al príncipe de Tiro: «¿Podrás seguir diciendo delante de tus verdugos –o, simplemente, delante de la muerte–, ‘Soy un dios’?». Es decir, con mi forma de vivir, con mi forma de tratar a los demás, con mi forma de manejar los bienes de este mundo, etc. ¿podré mirar cara a cara a Dios?

LUNES 15.08.2022
La Asunción de Ntra. Sra. a los Cielos
María, –la pequeña María, la humilde María, la débil María…–, la contemplamos y celebramos hoy con la grandeza de la Gloria de Dios, con el poder de la gracia Divina, con la fuerza del Amor de Dios, abriendo así para todos un camino a la esperanza: María es primicia de lo que todos estamos llamados a ser. Al mismo tiempo, el misterio de su Asunción es una llamada a situarnos ante la vida y el mundo de otra manera, –con sencillez, con humildad. con gratitud…–, y a no poner nuestro corazón en las glorias efímeras de este mundo que pasa, sino en la Gloria de Dios. Que también nosotros con nuestra vida y nuestro corazón «proclamemos la grandeza del Señor»… como ella.

DOMINGO 14.08.2022
Domingo XX del TO, ciclo C
Cuando el corazón no busca la Verdad se pudre poco a poco… se ciega, y la luz de la Verdad le molesta, y le molestan los que de alguna forma son portadores de la misma: Jeremías, Jesús, los “testigos” (santos) de todos los tiempos. Y entonces surge la agresividad, la violencia… todo “me molesta y estoy reñido con el mundo”. Lo vemos hoy en nuestras sociedades, especialmente después del Covid. Hacen falta mucha humildad, mucho amor, mucha gracia… para reconocer que, del malestar, del descontento y de la agresividad que muchas veces siento, no tienen la culpa los otros, sino yo mismo, y que para cambiar el mundo tengo que empezar por cambiar, con la gracia de Dios, mi corazón… que tengo que empezar por desinstalarme y por ponerme en camino hacia la Verdad. Señor, prende en nuestros corazones el fuego de tu Amor, el fuego de tu Espíritu, el fuego (y la pasión) de buscarte a ti sobre todas las cosas. Amén.

SÁBADO 13.08.2022
Sábado de la 19a semana del TO, par
Es más fácil echar las culpas a otros que asumir las propias responsabilidades. Todos caemos alguna vez en esta tentación, y, entonces… Entonces le echamos la culpa a los padres, a los políticos, al obispo… a quien sea, con tal de no tomar la propia vida y sus circunstancias en las propias manos… y “tirar para adelante”. El profeta Ezequiel nos recuerda hoy que esta actitud –la de echarle la culpa a otro– no vale, que lo que vale –y lo que nos hace crecer como personas y como creyentes– es asumir nuestra responsabilidad personal ante la vida y ante Dios. Claro que todos hemos padecido o padecemos los errores de otros, pero ellos ¡también padecen los nuestros!, porque no somos dioses, porque somos pobres seres finitos, limitados y pecadores. Pero también nos recuerda Ezequiel que Dios es el Dios de la vida, y que, si nos apoyamos en Él, todo tiene salida: «Yo no me complazco en la muerte de nadie —oráculo del Señor Dios—. Convertíos y viviréis». Afrontemos la vida con un corazón de niño que tiene confianza y se apoya en Dios, pues «el reino de los cielos» no es de los que todo lo dan vueltas, todo lo ven negro o sólo ven culpables y amenazas por todas partes… sino «de los que son como los niños».

VIERNES 12.08.2022
Viernes de la 19a semana del TO, par
Con imágenes de un gran realismo, que quizá a algunos puedan herir, –por eso la liturgia ofrece una primera lectura alternativa–, el profeta Ezequiel pone ante nosotros la infidelidad de Israel (y, por tanto, la nuestra) y la misericordia infinita de Dios: «Con todo, yo me acordaré de mi alianza contigo en los días de tu juventud, y estableceré contigo una alianza eterna (…) cuando yo te perdone todo lo que hiciste —oráculo del Señor Dios—». Misericordia infinita de Dios que, como el criado del evangelio de ayer, no acabamos de comprender en toda su hondura e implicaciones personales. Por ejemplo, como nos recuerda hoy Jesús, en el tema de la fidelidad matrimonial o en el tema del celibato. Pero también nos recuerda Jesús que esto no es tanto cuestión de “puños” sino de gracia: «No todos entienden esto, solo los que han recibido ese don. (…) El que pueda entender, entienda». Quizá vivir en cristiano no sea otra cosa que, con la ayuda de la gracia, ir creciendo día a día, un poquito más, en acoger, vivir y practicar la misericordia… empezando por los de casa (que, muchas veces, es lo más difícil).

JUEVES 11.08.2022
Jueves de la 19a semana del TO, par
«Tienen ojos para ver, y no ven; tienen oídos para oír, y no oyen, porque son un pueblo rebelde». Seguramente que pocos eran los israelitas que imaginaban una segunda deportación, –encima, mucho más terrible que la primera–, como les anuncia Ezequiel con su gesto, y como así fue. Es más fácil vivir en la superficie de las cosas que intentar penetrar en el sentido profundo de los acontecimientos y tratar de descubrir lo que eso implica y nos exige. Así también le ocurre en el evangelio de hoy al criado del rey –el que tenía una deuda de diez mil talentos–: no se entera de la hondura ni del significado del gesto de misericordia que el rey ha tenido con él y por ello no es capaz de tener misericordia con su propio deudor, –el que le debía cien denarios–. Y este vivir en la superficialidad es uno de los graves males de nuestro tiempo. La superficialidad nos impide saborear la vida en profundidad, pone el centro de la vida en “tonterías” pasajeras y nos impide sacar las consecuencias del grave momento en que estamos viviendo (como a los israelitas de la primera lectura). Y para el creyente, la superficialidad le hace quedarse en normas, ritos y exigencias exteriores, endureciéndole el corazón, la vida y sus relaciones con los demás, y no le deja vivir de la alegría (de la paciencia, de la misericordia…) de saberse amado, perdonado, “misericordiado” hasta el infinito por Aquél que no ha dudado en entregar su vida por él, como vivió santa Clara, cuya memoria hoy celebramos, y los grandes santos de la Iglesia.

MIÉRCOLES 10.08.2022
San Lorenzo, dc. y mrt.
2 Cor 9, 6-10; Sal 112(111), 1b-2. 5-6. 7-8. 9; Jn 12, 24-26
Lorenzo, diácono, servidor de Dios y de la Iglesia… hasta dar la vida “como el grano de trigo que cae en tierra para dar fruto”. Lorenzo, servidor del papa y de los pobres… con generosidad, “sin tacañería siguiendo el impulso de su corazón”. San Lorenzo, mártir, enamorado y testigo de Jesucristo. Su testimonio nos avergüenza un poco a nosotros que vivimos un cristianismo más acomodaticio y, al mismo tiempo, nos estimula… paso a paso, “semilla a semilla” que Otro hará crecer… sin desfallecer.

MARTES 9.08.2022
Santa Teresa Benedicta de la Cruz (Edith Stein), vg. y mrt., patrona de Europa
Os 2, 16b. 17de. 21-22; Sal 45/44) 11-12. 14-15. 16-17; Mt 25, 1-13
Las palabras que Antonio Machado escribiera de sí mismo bien podemos aplicárselas a la santa patrona de Europa cuya fiesta hoy celebramos: «A distinguir me paro las voces de los ecos, / y escucho solamente, entre las voces, una». ¡Cuántas voces cruzaron su vida y cuantos ecos! ¡Cuántos caminos andados, cuántas «noches con la lámpara encendida» … esperando… buscando! ¡Ay del que no busca, hay del que no está vigilante porque cree haber llegado ya al final! ¡Ay de quien deja endurecerse y atrofiarse su alma! No fue así en la vida de Edith Stein, por eso su figura resplandece hoy con fuerza para nosotros que vivimos también tiempos de oscuridad y de ideologías de muerte. Cada uno de nosotros, cada ser humano, al final, estamos llamados, como ella, a escuchar, entre las voces y los ecos, «la voz del Esposo», Jesucristo nuestro Señor, y entonces, como en ella, ¡cuánta luz, cuanto sentido, cuanta plenitud! La luz, el sentido, la plenitud que este mundo nuestro nunca nos podrá dar. ¡Santa Teresa Benedicta de la Cruz, intercede por nosotros… intercede por Europa!

LUNES 8.08.2022
Lunes de la 19a semana del TO, par
Muchos de los israelitas desterrados en Babilonia pensaban que Dios les había abandonado: destruido el templo, –en el que habitaba la Gloria de Dios–, se había terminado su presencia. La visión de Ezequiel, desterrado con los desterrados, acaba con esta concepción: Dios no es “prisionero” de templos ni de circunstancias históricas, Dios acompaña siempre a su pueblo allí donde esté, allí donde sufre, allí donde se le necesita, allí donde alguien se postra y le adora… Presencia silenciosa, sin fuegos de artificio… Pero presencia que se “ve” con los ojos de la fe y del corazón. Los mismos ojos con los que hay que acercarse a Jesús, revelación de la Gloria de Dios, pero que, al mismo tiempo, por puro Amor suyo, se nos manifestó en la humildad de quien “se hizo uno de tantos”, sometido a los poderes de este mundo (la cruz y los impuestos del evangelio de hoy). Como Ezequiel, “caigamos rostro en tierra” y adoremos.

DOMINGO 7.08.2022
Domingo XIX del TO, ciclo C
En una tierra y en una cultura que no era la suya, vivían los israelitas en Alejandría en el s. I a.C. En aquel contexto no era fácil mantener la fe ni transmitírsela a las nuevas generaciones. El autor del libro de la Sabiduría, al recordar la situación de sus antepasados en Egipto y la obra de liberación que con ellos realizó, –de sus enemigos ya no queda nada–, les exhorta a la perseverancia. Y aquellas dificultades del pueblo judío en Alejandría son hoy también las nuestras en medio de esta cultura que nos toca vivir, por tanto, la exhortación del autor del libro de la Sabiduría vale también para nosotros. El mismo Jesús en el evangelio nos invita a esta perseverancia: «Tened ceñida vuestra cintura y encendidas las lámparas». Tampoco lo tuvieron fácil sus seguidores ni las primeras comunidades cristianas para las que se escribe el evangelio. Así que, quizá, cada uno de nosotros podemos preguntarnos en este domingo: Si Dios viene hoy a mi encuentro, ¿estoy preparado para recibirle? O con las palabras de la carta a los hebreos: ¿Qué cosas buenas hago o qué cosas malas dejo de hacer en coherencia con la fe que profeso?

SÁBADO 6.08.2022
La Transfiguración del Señor
2Pe 1, 16-19; Sal 97(96), 1-2. 5-6. 9; Lc 9, 28b-36
¿Por qué a Pedro, a Santiago y a Juan? ¿Por qué no a los demás? ¡El misterio (y la gracia) de una elección! «Habíamos sido testigos oculares de su grandeza». «Es la voz que nosotros oímos estando en la montaña sagrada». Pero la elección nunca es para sí, sino para dar y compartir… «Hacéis muy bien en prestarle atención como a una lampara que brilla en un lugar oscuro hasta que despunte el día y el lucero amanezca en vuestros corazones». Creemos por la acogida de lo que nos han transmitido los testigos, hasta que también a nosotros el Señor nos regale nuestra propia experiencia de Transfiguración…

VIERNES 5.08.2022
Viernes de la 18a semana del TO, par
Cayó el Imperio Asirio… ¿quién se lo iba a decir? Y parece, además, que toda la crueldad que sembró a lo largo de su historia se vuelve contra él. Para Judá, que había visto desaparecer al Reino del Norte, se abre un tiempo de paz: «He aquí sobre los montes los pies del mensajero que proclama la paz». Pasó Asiria, y Babilonia, y Persia, y Grecia, y Roma… y pasarán los imperios e ideologías actuales a las que estamos sometidos. Tardarán más o menos, pero caerán víctimas de la misma violencia que sembraron. El profeta Nahún nos recuerda que sólo la justicia y el poder de Dios son eternos, que Él es el único que, en última instancia, da «la muerte y la vida». ¡Ojalá tuvieran esto presente muchos de los políticos de nuestro mundo actual y fueran capaces de sentarse en una mesa, con sencillez y humildad, a dialogar! Pero no, prefieren el orgullo y la prepotencia, prefieren seguir actuando como si fueran dioses. ¡Pobres de ellos, y pobres todos! También Jesús, con sus palabras en el evangelio de hoy, nos invita a todos a vivir en esa
 sencillez y humildad: «Quien quiera salvar su vida la perderá; pero el que la pierda por mí, la encontrará». En cada uno de nosotros está el preguntarnos a qué tenemos “agarrado” el corazón y la vida, en qué o en quién tenemos depositada nuestra confianza.

JUEVES 4.08.2022
Jueves de la 18a semana del TO, par
Como la tenemos cada uno de nosotros, el pueblo hebreo tuvo experiencia y conciencia de su fragilidad e infidelidad ante Dios. En definitiva, de su inclinación al pecado. Pero, al mismo tiempo, de la fidelidad de aquel Dios “suyo” que nunca tiraba la toalla y abría nuevos caminos ante ellos: «Pondré mi ley en su interior y la escribiré en sus corazones…». Sólo en Jesús se cumple plenamente este oráculo de Jeremías y, en nosotros, en la media que, por su Espíritu, estemos unidos a Él. El Pedro del evangelio de hoy que confiesa a Jesús como «el Mesías, el Hijo de Dios vivo» es el que se deja “llevar” por ese Espíritu, mientras que el Pedro que le quiere evitar la cruz al Señor es el que guiado por sus buenas intenciones habla “desde sí mismo”. Quizá sea este nuestro gran pecado, del cual se derivan todos los demás. La figura de un santo cura de Ars, cuya memoria hoy celebramos, que supo abrirse desde su pobreza humana y teológica al Espíritu de Jesucristo, también nos ayuda a comprender esto. El autor del salmo 51(50) consciente de ello le grita al Señor, y nosotros con él: «Oh Dios, crea en mí un corazón puro, renuévame por dentro con espíritu firme…».

MIÉRCOLES 3.08.2022
Miércoles de la 18a semana del TO, par
«Con amor eterno te amé, por eso prolongué mi misericordia para contigo». Es bonito, y esponja el corazón, saber y sentir que estas palabras no sólo se las dirige Dios a su pueblo de Israel a través de Jeremías, como una promesa de reconstrucción de la Ciudad Santa y de su Templo, sino también a cada uno de nosotros que, seguramente, hemos vivido algunos sueños rotos y, quizá, también algunas infidelidades recibidas o dadas. «Con amor eterno te amé, por eso prolongué mi misericordia para contigo». ¿Intuyó este misterio de amor fiel para toda la humanidad la mujer cananea del evangelio de hoy? Tal vez sí porque Dios habita en el corazón de cada ser humano, y sintonizar con su “onda” no es cuestión de pertenencias o etiquetas, sino de humildad y de amor. Hasta el propio Jesús parece “derrotado” por la actitud de esta madre sufriente… Que imitemos su ejemplo a la hora de pedir a Dios por las necesidades del mundo y de cuantos nos rodean. También de nuestra propia familia.

MARTES 2.08.2022
Martes de la 18a semana del TO, par
No caigamos en la trampa de pensar y de “vender” que la fe lo soluciona todo. No. La vida no fácil para nadie e, incluso teniendo fe, hay momentos de 
«viento contrario, de oleaje y oscuridad…», como los apóstoles en su travesía del lago de Genesaret. Pero la fe proporciona luz (aunque a veces sea algo «fantasmal») en medio de la oscuridad, fuerza en medio de la debilidad, paz en medio de la turbulencia: «¡Ánimo, soy yo, no tengáis miedo!» Los poderosos se abandonan unos a otros cuando el poder desaparece: «Tus amantes te han olvidado, ya no preguntan por ti…»; pero Dios permanece fiel, aunque nosotros le seamos infieles: «Vosotros seréis mi pueblo y yo seré vuestro Dios». Señor, «realmente tú eres el Hijo de Dios», sana nuestros corazones enfermos. Amén.

LUNES 1.08.2022
Lunes de la 18a semana del TO, par
Y mientras los poderosos se afanan en sus «juegos» de poder (soberbia y muerte), una gran parte del pueblo humilde y pobre, abandonado a su suerte, sufre: 
«Tú has roto un yugo de madera… yo haré un yugo de hierro». Pensemos en tantos escenarios de guerra y violencia actuales… Juan el Bautista fue víctima de estos «juegos», pero también, –en el evangelio–, la multitud que sigue a Jesús y es objeto de su compasión. Y así Jesús nos señala el camino a recorrer… el camino de la compasión y de la misericordia. ¿Si por un instante los verdugos se pusieran en el lugar de las víctimas? Pidamos hoy para que, al menos nosotros, a nuestro nivel, lo vivamos así. Amén.

DOMINGO 31.07.2022
Domingo XVIII del TO, ciclo C
El texto de Qohelec en la primera lectura de hoy podría haber sido escrito por muchos de nuestros contemporáneos: una buena casa, un buen sueldo, unas vacaciones en el extranjero, etc. Pero, al final, ¿qué? Por bien que nos vaya, todo se lo llevará el tiempo con la muerte si no es que antes una grave enfermedad trunca nuestra vida: «Necio, esta noche se te va a pedir la vida. Lo que has acumulado ¿de quién será?». Pero, aunque esto tarde en ocurrir, y sólo (que no es poco) sea como una espada de Damocles sobre nuestras cabezas, lo cierto es que, la comodidad, la riqueza, los viajes pagados, etc. no llenan el corazón, al contrario, su apetito es insaciable: cuanto más tienes, más quieres tener; cuanto más haces, más quieres hacer; siempre insatisfechos, siempre desasosegados, siempre vacíos… «Así será el que amasa riquezas para sí y no es rico ante Dios». Como nos recuerda hoy san Pablo: «No sigáis engañando unos a otros… y despojémonos, –con la ayuda de la gracia de Dios–, del hombre viejo con sus obras…».

SÁBADO 30.07.2022
Sábado de la 17a semana del TO, par
Sacerdotes, magistrados… Herodes, Herodías… la tristeza (y el vacío) del poder, porque es un poder falso, porque la enfermedad y la muerte nos acechan a todos, también a los poderosos. ¿Qué queda hoy de aquellos sacerdotes y magistrados contemporáneos de Jeremías? ¿Qué queda hoy de Herodes y de Herodías? Y ellos lo sabían, aunque no quisieran reconocerlo, por eso esa tristeza y ese vacío se hacen violencia contra los “buenos”: Jeremías, Juan el Bautista… Contra cuantos nos recuerdan que debemos ser más humildes, que debemos ponernos más en los “zapatos” de los otros, que debemos mirar más a Dios… fuente de la única y verdadera Vida.

VIERNES 29.07.2022
Viernes de la 17a semana del TO, par
Muchos de los contemporáneos de Jeremías estaban tan ciegos que no eran capaces de imaginar la posibilidad que el templo de Jerusalén y su Ciudad Santa pudieran ser un día destruidos. Así que no sólo no le hacen caso, sino que se ceban contra su persona. Jeremías les recuerda que una sociedad sin Dios (por mucho que esté Dios en sus labios y en sus ritos, por muy magníficos y sagrados que sean sus templos) no puede subsistir. Pero tampoco puede subsistir una sociedad que, plegada sobre sí misma, le da positivamente la espalda a Dios convirtiendo al hombre (¿o a los poderosos o a las ideologías de turno?) en dios. Simplemente porque somos finitos y limitados, y aunque todo lo hagamos con la mejor voluntad e intención. 
«Mi oración se dirige a ti… que me escuche tu gran bondad… que tu fidelidad me ayude».

Y santa Marta (Lc 10, 38-42)
También Marta, la hermana de María y Lázaro, cuya memoria hoy celebramos, se afanaba con todo su cariño y su mejor voluntad en servir al Señor… y andaba, 
–hoy diríamos–, estresada, o quizá todavía más, algo deprimida y vacía… como muchos de nuestros contemporáneos, porque les falta lo esencial: dar el salto en la fe, transcenderse, apoyar su vida no en ellos mismos, sino en Dios. Marta, a ejemplo de su hermana María, acabó comprendiéndolo, por eso es santa Marta. Que ella interceda por nosotros todos para que lo comprendamos y vivamos. Amén.

JUEVES 28.07.2022
Jueves de la 17a semana del TO, par
Ayer, en nuestra reflexión, mencionábamos lo “políticamente incorrecto”. Y, al hilo de las lecturas de este jueves, se nos vienen a la cabeza algunos de esos temas en la actualidad. Por ejemplo, hoy el dolor y el sufrimiento solamente son contemplados como algo negativo a superar (que lo son), pero es políticamente incorrecto contemplarlos como ocasión de maduración y de crecimiento de la persona o del pueblo o la sociedad que los padecen. Jeremías, con su gesto en el taller del alfarero, nos abre a este horizonte de positividad en la negatividad que no es sino un anuncio del misterio de la Pascua del Señor. Otro tema es, -quizá más a nivel personal-, el aceptar la propia vida (también la sociedad y los otros) no como algo perfecto y acabado, sino como esa «red que se echa en el mar y que recoge toda clase de peces». Yo soy valioso y digno de ser amado por ser yo, fulano/a de tal, con mi cuerpo no-10, con mi psicología herida, con mis defectos de carácter y manías… pero también con mis dones y virtudes. Parafraseando las palabras de Jesús en el evangelio podíamos decir: “una persona que se ha hecho discípula de la verdadera felicidad es como… quien va sacando de sí (del tesoro de su vida) lo bueno y no tan bueno, incluso lo malo”. A mirar así la vida nos ayuda la fe en Jesucristo: Él ha dado su vida hasta por el último y más pequeño de los humanos (incluso la última partícula del universo), y Él ha cargado con todo lo malo (el pecado), clavándolo en la Cruz, para ser transformado y resucitado…

MIÉRCOLES 27.07.2022
Miércoles de la 17a semana del TO, par
Humanamente hablando, no fue envidiable la suerte de Jeremías. Políticamente incorrecto sufrió sobre sí el rechazo y la violencia, en primer lugar, de los poderosos de su tiempo. Aún sostenido por la gracia de Dios y por el alimento de la Palabra, 
–que el profeta lleva en su corazón como un verdadero tesoro–, el profeta vivió momentos oscuros que le pusieron al borde del desfallecimiento. La figura de Jeremías nos adelanta ya en el tiempo la “oscuridad” de Jesús en Getsemaní… y la oscuridad de toda persona que, en verdad, quiere ser fiel al Señor. Pensemos en los cristianos perseguidos en tantos rincones del mundo, y pensemos en la presión y avasallamiento de lo “políticamente correcto” de nuestras sociedades occidentales… Pensemos… y oremos por ellos y por nosotros: «Líbrame de mi enemigo, Dios mío; protégeme de mis agresores…».

MARTES 26.07.2022
Martes de la 17a semana del TO, par
Dolor de Jeremías, como reflejo del dolor del corazón de Dios, ante el desolador panorama de la Ciudad Santa destruida y el sufrimiento de sus gentes… Dolor, impotencia, reconocimiento de culpa y, desde aquí, un grito al único que de verdad puede escucharlo y acogerlo, a Dios: «¿No eres tú, Señor, Dios nuestro; tú, que eres nuestra esperanza, porque tú lo hiciste todo?» En este mundo nuestro en que la cizaña coexiste con el trigo, en aquella sociedad de Jeremías como en la nuestra, seguiremos asistiendo al doloroso espectáculo de la violencia, de la destrucción, del sufrimiento y de la impotencia. Si, al menos, todo ello nos sirviera para volver nuestro corazón a Dios, para gritarle nuestro dolor y el dolor de nuestros hermanos que sufren… «Socórrenos, Dios, Salvador nuestro… Llegue a tu presencia el gemido del cautivo…» Que no seamos indiferentes al dolor de los demás…

LUNES 25.07.2022
Santiago, apóstol
Hch 4, 33; 5, 12. 27-33; 12, 2; Sal 67(66) 2-3. 5. 7-8; 2Cor 4, 7-15; Mt 20, 20-28
El primer apóstol en dar la vida por el Señor… y eso que, como nos muestra hoy el evangelio, sus anhelos primeros junto al Señor (y los de los otros) no iban por ahí, sino todo lo contrario: sueños de glorias humanas y de poder. Pero, al final, prevaleció su amor al Señor e hizo, con la ayuda de la gracia, un camino interior que le preparó al martirio con la fe de que «quien resucitó al Señor Jesús también nos resucitará a nosotros con Jesús y nos presentará con vosotros ante él». Celebrar a Santiago es también recordar el Camino que recorren miles de peregrinos cada año. Es verdad que, a veces, lo hacen por motivos muy distantes de la fe. ¿Pero no fue así con Santiago (y los otros) –como acabamos de recordar– cuando comenzaron a “peregrinar” con Jesús por los caminos de Galilea? El Camino de Santiago es parábola del camino interior que todos estamos llamados a recorrer, desde nuestros sueños/proyectos humanos hasta la Gloria (los sueños de Dios) pasando por la cruz, para que «se vea que una fuerza tan extraordinaria no proviene de los hombres sino de Dios». Pidamos que el Señor nos haga peregrinos y nos sostenga en nuestro necesario peregrinar por los caminos de esta vida…

20060621 B XVI Santiago el Mayor

DOMINGO 24.07.2022
Domingo XVII del TO, ciclo C
«Padre, santificado sea tu nombre…» en mi vida, en mi conducta, por tu gracia. «Venga tu reino…», al menos, que nos aproximemos un poco; y no se trata sólo de las guerras, la violencia de todo tipo, o la miseria y el hambre de muchos, se trata también de mi egoísmo e insolidaridad: no todo lo que me puedo permitir, me lo debo permitir, mientras hermanos nuestros gritan su hambre y su miseria. «Danos cada día nuestro pan cotidiano…», y de vez en cuando, un poco de escasez para que valoremos lo que tenemos, para que no seamos insensibles a los que no tienen lo que nosotros tenemos, para que no se nos encallezca el alma. «Perdónanos nuestros pecados», esos que ya has «clavado en la cruz», esos que yo necesito reconocer para no vivir de mi autosuficiencia, sino de tu misericordia. «Porque también nosotros perdonamos a todo el que nos debe, y no nos dejes caer en tentación». Que, por tu gracia, así sea. El Padrenuestro no es una oración sin más, es una forma de situarse ante la vida, ante Dios y ante los demás, con fidelidad, con constancia, con humildad, con generosidad…

SÁBADO 23.07.2022
f. Santa Brígida, religiosa; Patrona de Europa
Gál 2, 19-20; Sal 34(33) 2-3. 4-5. 6-7. 8-9. 10-11; Jn 15, 1-8
Como la de tantos santos y santas, la vida de santa Brígida es una vida admirable y nada aburrida: por los diferentes estados y situaciones en que vivió, por los dones especiales de que el Señor la dotó, pero, sobre todo, porque toda esa diversidad quedó unificada y santificada por su fe viva y profunda que el Señor le regaló y que ella acogió y cultivó, estando siempre unida a Cristo «como el racimo a la vid». La contemplación de la pasión del Señor, la vida de piedad y la caridad sostuvieron su fe y la “dieron alas”. Como san Pablo, también ella pudo decir «Estoy crucificada con Cristo; vivo, pero no soy yo el que vive, es Cristo quien vive en mí». Que ella interceda por Europa en esta hora que es de «cruz» y de alejamiento de Cristo.

20101027 B XVI Santa Brígida

VIERNES 22.07.2022
f. Santa María Magdalena
2Cor 5, 14-17; Sal 63(62) 2. 3-4. 5-6. 8-9; Jn 20, 1-2. 11-18
Oír el propio nombre en labios de otra persona es música que resuena en el propio corazón, y tanto más cuanto mayor es el cariño con que la otra persona lo pronuncia. Tal vez, en el fondo de todas nuestras búsquedas no haya sino un deseo, el deseo de que alguien pronuncie nuestro nombre con un amor tan intenso que nuestra existencia quede transformada, que nuestra existencia quede elevada a esa felicidad que es nuestro anhelo profundo, que nos convirtamos, –como nos dice hoy san Pablo–, en «creaturas nuevas». Seguramente que María Magdalena había escuchado muchas veces su nombre de labios de Jesús, y aquello formaba parte de su vida como de un sueño, pero ninguna como cuando, en medio del dolor y la desolación, junto al sepulcro, lo escuchó de labios del mismo Resucitado: voló el corazón de María, voló su alma, tocó el Cielo, y corrieron sus pies y sus palabras para comunicar a los apóstoles (y a nosotros) lo que ya desbordaba y llenaba de plenitud su existencia… y la nuestra: el misterio de Jesucristo.

20170517 Fco Sta. Ma Magdalena

JUEVES 21.07.2022
Jueves de la 16a semana del TO, par
Los padres a veces, cuando los hijos no siguen el “rumbo” que ellos hubieran deseado, se culpabilizan… y sufren. ¿Pero no le ha pasado algo parecido a Dios con sus hijos, que somos nosotros? ¡Cuándo amor no correspondido y cuánto dolor rezuma el texto de Isaías en la primera lectura de hoy! ¿Y de las palabras de Jesús en el evangelio: «porque está embotado el corazón de este pueblo»? Dios es perfecto y sin embargo… Nosotros no somos perfectos, así que todavía menos podemos esperar “haber solucionado la vida a los que amamos”. Tal vez, lo que tengamos que aprender es a descubrir, en nuestro dolor por los hijos (y por los que queremos), como un “sacramento” del dolor de Dios por todos nosotros, sus hijos, al mismo tiempo que participamos también de su “mirada positiva” sobre nosotros: ¡Que el dolor no apague la luz que ya brilla ante nuestros ojos… en nuestros hijos! «Bienaventurados vuestros ojos porque ven y vuestros oídos porque oyen». Que así sea.

MIÉRCOLES 20.07.2022
Miércoles de la 16a semana del TO, par
Desde el principio de los tiempos «salió el Sembrador a sembrar». Así podemos decir que todo lo creado es semilla de una realidad que lo sobrepasa. Nada encuentra sentido involucionando sobre sí mismo, sino, al contrario, saliendo de sí mismo, dando la vida para dar vida… Esta realidad adquiere en el ser humano una dimensión nueva porque entra en juego nuestra propia libertad, nuestra propia fragilidad-debilidad humana, pero también la gracia de Dios que nos lleva de la mano, como nos recuerda la vocación de Jeremías en la primera lectura de hoy. Jesucristo es el Sembrador por excelencia porque «por medio de Él fueron hechas todas las cosas», y, al mismo tiempo la Semilla por excelencia porque se sembró en el árbol de la Cruz para que tengamos Vida Eterna. Él nos señala el camino y nos da la gracia para recorrerlo… para sembrarnos…

MARTES 19.07.2022
Martes de la 16a semana del TO, par
Miqueas ejerció su ministerio profético en Jerusalén a finales del s. VIII a.C., tras la caída de Samaría. Hombre de campo, quizá rudo, denuncia con fuerza las incoherencias e injusticias sociales y religiosas de su tiempo. En el final de su libro (el texto que hoy hemos leído), el corazón del profeta se dirige a Dios: si Él no pastorea a su pueblo, si Él no tiene misericordia del mismo… ¿qué sería de ellos? ¿qué sería de nosotros? La respuesta de Dios al clamor de Miqueas es la encarnación del Hijo de Dios, es Jesucristo. Una “respuesta” que desborda el marco de una familia de sangre y de un pueblo (el judío), para abrirse a la humanidad… Por Él todos hemos sido salvados… Gracias.

LUNES 18.07.2022
Lunes de la 16a semana del TO, par
La sed de Dios es el motor que mueve la vida del ser humano (y del mismo universo). Por eso la mayor tragedia del mismo ser humano es la “instalación”, el pensar que ya tiene a Dios “atrapado”, “sabido” y “controlado”. Y en esta trampa no sólo cae quien se abandona en los brazos de los ídolos de “el mundo, el demonio y la carne”, sino también la persona religiosa que cree servir a Dios pero, en realidad, sólo sirve a una caricatura que el mismo se ha “fabricado”. «Aquí hay uno que es más que Jonás… Aquí hay uno que es más que Salomón…», le dice Jesús a los fariseos que quieren obtener de Él un milagro… Y Dios es siempre más de cualquier imagen o idea, sobre todo cuando estas imágenes o ideas están desvinculadas de una vida moralmente coherente… con «el buen camino» que lleva a la salvación.

DOMINGO 17.07.2022
Domingo XVI del TO, ciclo C
Acoger con el corazón, salir del propio «yo» (aún del mejor intencionado) y dejar que el otro (y, a través de él, Dios mismo) tenga una palabra que siempre es de «vida», que da «fruto»… por caminos insospechados. Abrahán y Sara fueron padres a la edad que de solo pensarlo «daba risa». Marta tiene que aprender a «escuchar» antes que a «hacer». Y Pablo, al acoger a Jesús, acoge su Cruz. Cruz que es también puerta de la Gloria para él y para toda la humanidad. La verdadera acogida no es la que intenta «retener» y «agarrar», sino la que siempre está dispuesta a «despedir» (seguramente ¡con dolor!), porque entre la acogida y la despedida, Dios «obra» en el corazón, tanto del que acoge como en el del que es acogido, una «fecundidad» que está más allá de los criterios de este mundo presente. Las personas pasamos, sólo Dios y lo que en Él se sostiene permanecen, y a Él, en última instancia, es a quien se ha de dirigir nuestro corazón.

SÁBADO 16.07.2022
Sábado de la 15a semana del TO, par
En el silencio siguen maquinando maldades… ¡qué actualidad tienen las palabras de un profeta que vivió en el siglo VIII a.C.! Pero también las tienen las palabras que hoy nos recuerdan que el bien se sigue practicando en silencio, sin cámaras de televisión, ni periodistas… como el Siervo de Yahvé, como Jesús, como los santos y santas de todos los tiempos… En el corazón de estos hombres y mujeres, la fe; en su alma, el amor a Jesús; y en su mano, otra mano, la mano de quien nos dio Hombre verdadero a quien era Dios verdadero… la mano de María, a la que hoy en muchos lugares hoy se invoca como reina del monte Carmelo, nuestra señora del Carmen…

VIERNES 15.07.2022
Viernes de la 15a semana del TO, par
Dios miró a Ezequías con misericordia, Jesús miraba a sus discípulos con misericordia… por el contrario, los fariseos (¿sólo los fariseos?) no miran con misericordia. El papa Francisco ha insistido muchísimo sobre la misericordia como el gran signo distintivo de los hijos de la Iglesia. Algunos no han querido entenderlo y, como los fariseos, quieren seguir colocando el legalismo por delante. Pero si Dios no fuese misericordioso con todos, ¿qué sería de nosotros?, ¿qué sería de mí? La misericordia es la fuerza que puso en marcha el misterio de la redención, y es la fuerza que hace que cada mañana puedas empezar una nueva jornada con fuerza, con alegría… a pesar de tus errores, a pesar de tus debilidades…

JUEVES 14.07.2022
Jueves de la 15a semana del TO, par
¿Dónde se ilusionará nuestra vida cuando las ilusiones de este mundo estén agotadas? ¿Dónde encontraremos fuerzas para salirnos de los caminos trillados (y banales, muchas veces) en el que el mundo nos quiere atrapar? ¿Quién nos dará la grandeza de corazón que necesitamos para hacer de nuestra vida algo valioso y hermoso? Y, cuando llegue la pena y la dificultad, ¿dónde descansaremos y sanaremos nuestra alma herida? «Venid a mí –nos dice hoy el Señor– todos los que estáis cansados y agobiados; y yo os aliviaré». E Isaías nos recuerda e invita: «Señor te esperamos… Mi alma te ansía… Tú nos darás la paz… Todas nuestras empresas nos las realizas tú… No trajimos salvación al país… Tu rocío es rocío de luz…»

MIÉRCOLES 13.07.2022
Miércoles de la 15a semana del TO, par
Más allá de lo que ven los ojos y entiende la razón, hay una realidad –podemos decir, más real– que es la que “ve”, sostiene y dirige la “mano” de Dios. Los profetas nos hablan constantemente de esa realidad y, para hacerlo, emplean conceptos y palabras de este mundo, aunque esa realidad, que en el mundo se «refleja», está por encima de este mundo. Y a esta realidad se “accede”, no por el camino de la autosuficiencia –«con la fuerza de mi mano lo he hecho…»–, sino con «un corazón sencillo»… como el de Jesús, como el de María… ¡Danos, Señor, en este día, y siempre, un corazón así!

MARTES 12.07.2022
Martes de la 15a semana del TO, par
Sin una confianza en los otros sería imposible la vida: ¿cómo atravesar el puente que yo no he construido o habitar la casa que no he levantado con mis manos?, ¿cómo comer los alimentos que yo no he preparado o acudir a un médico cuyos conocimientos yo no abarco? Pero porque el ser humano es limitado, imperfecto y, a veces, traicionero, se necesita también una confianza teologal; una confianza, una fe, que sacándonos de nosotros mismos nos abra a la trascendencia. «Si no creéis no subsistiréis», nos dice hoy la primera lectura, y Jesús recrimina a las ciudades de la orilla del lago de Genesaret porque no han creído en él, augurándoles que «pensando escalar el cielo, bajarán al abismo». ¿No es precisamente esto lo que vivimos hoy en este, que se ha creído, autosuficiente occidente?

LUNES 11.07.2022
f. san Benito de Nursia
Pr 2, 1-9; Sal 33, 2-3. 4 y 6. 9 y 12. 14-15; Mt 19, 27-29
Continuando con la reflexión sobre las lecturas de la semana podíamos decir que san Benito es el mejor comentario y testimonio de las de este lunes. Como nos recuerda Benedicto XVI en su catequesis sobre san Benito: «entre los siglos V y VI, el mundo sufría una tremenda crisis de valores y de instituciones, provocada por el derrumbamiento del Imperio Romano, por la invasión de los nuevos pueblos y por la decadencia de las costumbres». Y más adelante: «la obra del santo, y en especial su Regla, fueron una auténtica levadura espiritual, que cambió, con el paso de los siglos, mucho más allá de los confines de su patria y de su época, el rostro de Europa, suscitando tras la caída de la unidad política creada por el Imperio Romano una nueva unidad espiritual y cultural, la de la fe cristiana compartida por los pueblos del continente. De este modo nació la realidad que llamamos “Europa”». Para dejarnos, finalmente, esta invitación: «Al buscar el verdadero progreso, escuchemos también hoy la Regla de san Benito como una luz para nuestro camino. El gran monje sigue siendo un verdadero maestro que enseña el arte de vivir el verdadero humanismo». Lo dejó todo por seguir a Cristo, y obtuvo Todo, más allá de lo humanamente imaginable.

20080409 B XVI San Benito de Nursia

LUNES 11.07.2022
Lunes de la 15a semana del TO, par
Dios, a través del profeta Isaías, se muestra exigente con su pueblo. Y lo mismo Jesús en el evangelio de hoy: «No he venido a traer paz…», «el que ama a su… más que a mí, no es digno de mí». No son exigencias de un Dios frío y lejano, con ganas de fastidiar al personal, al contrario, son las exigencias de un Dios cercano, que nos ama, y que quiere que nosotros, sus hijos, seamos verdaderamente felices. Ya experimentamos en estos momentos a qué nos están conduciendo nuestras sociedades “sin Dios”, o, dicho de otra forma, con los hombres convertidos en dioses. De la cercanía, de la ternura y del Amor de Dios nos hablan esos dos gestos sencillos (a imitar) a los que se refiere Jesús al final de sus palabras: «el que os recibe…», «el que os dé de beber…».

DOMINGO 10.07.2022
Domingo XV del TO, ciclo C
Hoy, como en tiempos de Jesús, como siempre, junto al camino de la vida hay hombres heridos, medio muertos, sin nombre ni apellidos, sin señas de identidad… Pero, hombres y mujeres, que llevan en sí la huella de Dios, que son la imagen visible del Dios invisible… y en los que el mismo Cristo nos espera. El sacerdote y el levita absortos –y seguros– en sus deberes religiosos pasan de largo, pero un odiado samaritano –el odio era mutuo–… ¿Qué pintaba un odiado samaritano en Jerusalén? Seguramente era un hombre en búsqueda, un hombre con “sed”, como aquella samaritana que un día encontraría Jesús junto al pozo de Sicar… Un hombre (o una mujer) que aún sin saberlo se encuentran con Cristo en el hermano pobre y desamparado, porque han dejado hablar a su corazón y lo han escuchado… Ese corazón en el que todos llevamos escrito el mandamiento del Amor –la compasión y la misericordia–, si no lo hemos ahogado con las preocupaciones del mundo o, incluso, con los “deberes” religiosos…

SÁBADO 09.07.2022
Sábado de la 14a semana del TO, par
El cielo se “abre” y el profeta contempla el inefable rostro de Dios. Rostro de Dios, del tres veces Santo, ante el cual se pone de manifiesto la indignidad del profeta y la de su pueblo, pero también la misericordia del mismo Dios. La misericordia de Dios actúa sobre el profeta y así está preparado para anunciarla a aquellos a los que es enviado. ¿Cómo vamos nosotros a anunciar la misericordia de Dios si antes no la hemos experimentado? ¿Qué Dios es el que anunciamos cuando nosotros no hemos pasado antes –como nos dice hoy Jesús en el evangelio–por la experiencia del rechazo y de la persecución, por el abismo de la confianza hasta el extremo y de la fidelidad inquebrantable? Y la primera “persecución” a la que todos estamos sometidos es la de vivir (y anunciar el evangelio) como si sólo fuesen los demás los necesitados de misericordia.

VIERNES 08.07.2022
Viernes de la 14a semana del TO, par
Dos horizontes contrarios dibujan las lecturas de este día. Por un lado, (cf. 1ª lectura), el horizonte señalado por el corazón de Dios, y cuya palabra será la definitiva sobre la vida y la historia: un corazón paciente y tierno, siempre a la espera y dando una nueva oportunidad, siempre invitando a la conversión, a volver a Él… Pero por otro, (cf. evangelio), el horizonte de un mundo agresivo en que la verdad, que es Jesucristo, no es amada y que, por tanto, los que optan por buscar los caminos de Dios son perseguidos… Cada día, en cada encrucijada de nuestro caminar, tendremos que elegir entre uno u otro horizonte, unas veces con más sencillez, otras con mayor dificultad… Que el Señor nos dé la gracia de «no volver a llamar ‘nuestro Dios’ a las obras de nuestras manos».

JUEVES 07.07.2022
Jueves de la 14a semana del TO, par
¡Cuánta ternura rezuma este pasaje de Oseas en la primera lectura de hoy! Y, al mismo tiempo, cuánto dolor: dolor de una “madre” cuyo hijo amado (Israel, yo…) responde con traición a tanto amor. Leamos estas palabras como dirigidas a cada uno personalmente.
Amor y dolor que reflejan cómo es el corazón de Dios, adelantando ya en el tiempo la revelación del misterio de Jesucristo, y que la Iglesia, enviada por Él, tendrá como misión, anunciar hasta el final de los tiempos… con el poder recibido de Dios, con gratitud, con humildad, con sencillez, con respeto hacia las decisiones de los otros, pero, al mismo tiempo, con la convicción de que no hay otro camino de salvación.

MIÉRCOLES 06.07.2022
Miércoles de la 14a semana del TO, par
Cuando en la prosperidad, el corazón no se vuelve agradecido hacia el Señor, y el “bolsillo” generoso hacia el necesitado, la vida se llena de ídolos y “necesidades” que acaban por destruirnos. Así ocurrió con Israel, como constata Oseas en la 1ª lectura de hoy, y como empezamos a constatar nosotros en el derrumbe económico, social y moral que padece occidente. En este contexto el salmo responsorial nos invita: «Buscad continuamente el rostro del Señor». Ese Señor que se nos ha mostrado en Jesucristo y que la Iglesia, sobre las columnas que son los Doce Apóstoles, sigue anunciando al mundo.

MARTES 05.07.2022
Martes de la 14a semana del TO, par
Oseas denuncia la incoherencia entre el culto y la vida. En los templos del Reino del Norte se seguía practicando sacrificios y ofrendas en todo su esplendor, pero esta liturgia no se correspondía con la búsqueda de la justicia en la sociedad ni en las instituciones político-religiosas, empezando por la propia realeza. La perspectiva de esta situación no puede ser más oscura: 
«Terminará hecho pedazos el becerro de Samaría», «Deberán retornar a Egipto»… Mirando hoy nuestro mundo con sus guerras, con el flujo incesante de inmigrantes, con millones de refugiados, con la triste realidad del comercio de “carne” humana, etc. etc. sentimos la realidad dolorosa de «la mies abundante y de los pocos obreros» y la necesidad de «pedirle obreros al Señor para su mies». Señor, todos somos un poco ese enfermo que necesita ser curado por Ti…

LUNES 04.07.2022
Lunes de la 14a semana del TO, par
Como la esposa de Oseas traicionó al profeta, así Israel traicionó a su Dios. Oseas recibe de Dios la misión de perdonar a su infiel esposa y de lograr que vuelva al hogar, y esta misión del profeta es también una invitación a Israel para que, abandonando los ídolos, vuelva a Dios, el «esposo» traicionado, en «matrimonio perpetuo». Israel, la humanidad en general, yo en particular seguiremos traicionando, una y otra vez, ese «matrimonio» que sólo Jesucristo sellará definitivamente por su Sí hasta la muerte en la Cruz. En la eucaristía celebramos y renovamos este Sí, y por eso en ella presentamos al Señor y oramos con fe por aquellos que están enfermos (o muertos –cf. evangelio de hoy–), no sólo biológicamente hablando, sino también en su alma.

DOMINGO 03.07.2022
Domingo XIV del TO, ciclo C
El envío de los 72 discípulos, en el evangelio de hoy, no sólo es un paradigma misionero y eclesial, sino también un paradigma profundamente humano. En un mundo que se muestra con frecuencia agresivo, y tanto más cuanto más auténtico eres, las indicaciones de Jesús nos invitan a la sencillez y a la trasparencia, a mostrarnos en lo que somos, sin “disfraces” ni “máscaras”; a ser constructores de paz, no sembradores de discordias y resentimientos; a ser agradecidos y, al mismo tiempo, respetuosos con lo que no compartimos… porque una vida valiosa no es la que se repliega sobre sí misma, sino la que, saliendo de sí misma, se entrega. Además, para el creyente cristiano, esto es más verdad porque nuestros “propios nombres están escritos en el cielo” … y clavados en él con los clavos de la Cruz del Señor, para siempre. Por ello, también nosotros como Pablo, en esa Cruz nos gloriamos y a ella nos unimos, y en ella nos ofrecemos, a través de nuestras propias cruces de cada día.

SÁBADO 02.07.2022
Sábado de la 13a semana del TO, par
Hemos metido y seguimos metiendo el evangelio en esquemas de la religiones paganas: premio-castigo, ayuno-no ayuno, méritos-deméritos, etc. Pero Jesús hoy, en el evangelio, nos recuerda que la fe en él va más allá, que se inserta en el ámbito de la gracia y, por tanto, de la gratitud y de la alegría… del amor recibido, acogido, encarnado y disfrutado. Hasta el profeta Amós, en la primera lectura, todavía en el A.T., nos recuerda que la última palabra sobre Israel no la tienen los desgraciados y dolorosos –y, seguramente, merecidos– acontecimientos históricos, sino el Señor. Y esta es una palabra de salvación: «Aquel día levantaré… repararé… restauraré… la reconstruiré…», y podíamos añadir, sin mérito alguno por su parte, por pura gracia y por puro amor. ¿Vivo yo mi fe en Jesucristo con esa conciencia, con esa fuerza, con esa alegría y gratitud, etc.?

VIERNES 01.07.2022
Viernes de la 13a semana del TO, par
Amós denuncia la injusticia social de su tiempo. Una injusticia que se ceba sobre los pobres, pero que acabará devorando a todos. No se puede sostener lo que no se construye sobre el Bien. Y, atrapado en la injusticia social de su tiempo estaba Mateo. ¿Qué vio Jesús en él para rescatarlo de su puesto de recaudador de impuestos? No lo sabemos, sólo sabemos de su pronta respuesta y seguimiento del Señor. Y seguramente que también, a muchos del entorno de Mateo, su cambio de vida les tocó el corazón… y el bolsillo. Se hicieron más generosos, menos egoístas. Hoy la mirada y la llamada de Jesús se dirige a cada uno de nosotros que vivimos (y participamos) de la injusticia de un determinado sistema político y económico. Los datos de la actualidad son escalofriantes. ¿Qué me pide hoy a mí esa mirada de amor del Señor?

JUEVES 30.06.2022
Jueves de la 13a semana del TO, par
El poder de Dios, –su palabra profética–, desborda al profetismo oficial (Amasías) y desborda el pensamiento de los letrados (cf. evangelio)… Un dios que no nos cuestione nada, un dios sometido a nuestras formas de pensar (a nuestras teologías, ¿ideologías?), un dios que no nos ponga en crisis ni nos desinstale, etc. etc. No es Dios, es una caricatura de Dios… También nosotros como creyentes y las instituciones eclesiales, como el paralítico del evangelio, necesitamos ser constantemente presentados al Señor para que nos perdone, para que nos sane… para que nos envíe, como a Amós.

MIÉRCOLES 29.06.2022
San Pedro y san Pablo, apóstoles
Jesús se cruzó en su camino y el horizonte de sus vidas se transformó. Y si hoy los recordamos y celebramos, no es, respectivamente, por sus hazañas de pescador en los mares de Galilea o de celoso defensor de la ley judía, más bien por lo contrario, pues como bien dice uno de los himnos de la liturgia de las horas de este día: «Cristo tras los dos andaba: a uno tumbó en Damasco, y al otro hirió con lágrimas». Y así, a los dos, los hizo sus testigos ante el mundo… testigos del Señor resucitado, hasta dar su vida por Él. Su fe y su vida entregada por ella, “tejen” y sostiene nuestra fe y abren nuestro corazón a una Esperanza que este mundo, con todo su saber y autosuficiencia, no podrá darnos nunca. Agradecidos y gozosos los celebramos.

MARTES 28.06.2022
Martes de la 13a semana del TO, par
Ser desagradecido… No tomar conciencia de todo lo que le debemos a los demás… No pronunciar nunca un “gracias”… Caminar por la vida con orgullo y autosuficiencia… Es el principio de la propia destrucción. Pero en nuestro mundo occidental muchos caminan así, y muchos legisladores legislan así… Es el ocaso de occidente como, en su día, fue el ocaso (y desaparición) de Israel (cf. 1ª lectura). Para el creyente humilde y sincero toda esta situación es como una gran tormenta que se cierne sobre la barca de la Iglesia, y, como los discípulos, sentimos la necesidad de gritarle al Señor: «¡Señor, sálvanos, que perecemos!». Y él, en este día, nos responde también como a ellos: «¿Por qué tenéis miedo, hombres de poca fe?»… «Señor, guíame/nos con tu justicia».

LUNES 27.06.2022
Lunes de la 13a semana del TO, par
Amós vive una época que es de prosperidad social (para algunos), pero al mismo tiempo de injusticia social y de degradación moral y religiosa, como denuncia hoy la 1ª lectura. Y junto a su denuncia, Amós hace una advertencia: esta injusticia y esta degradación acabarán por volverse contra los que “viven bien”. La destrucción de Israel por parte de los Asirios será el triste cumplimiento de esta profecía. Y es que no se puede sostener lo que no viene de Dios, ni nadie puede dar lo que no tiene. Los reinos de este mundo (y la felicidad que prometen) es siempre efímera, si es que no acaba convirtiéndose en un gran vacío que nos engulle. En este contexto adquieren toda su fuerza las llamadas de Jesús en el evangelio de hoy (y de ayer) a hacer una apuesta radical por él: «Tú, sígueme».

DOMINGO 26.06.2022
Domingo XIII del TO, ciclo C
¡Ay, Señor!, con que facilidad nos dejamos engañar y manipular por sentimientos e ideas, por promesas y “paraísos” de este mundo, por demagogos y manipuladores que nos exprimen y explotan en su beneficio… Cuando, en realidad, lo único que, de verdad, anhela nuestro corazón es a Ti y lo que en Ti se sostiene y fundamenta; cuando no hay otra libertad que la que de Ti brota; cuando no hay otro Amor que el que Tú nos regalas en tu misericordia… Enséñanos, Señor, el camino de la verdadera vida; que nuestra existencia descanse en Ti; que nuestra alegría la reconozcamos en Ti; que te tengamos siempre presente; que seas nuestro horizonte y nuestra esperanza; no nos abandones en las manos de lo que sólo es corrupción… «Tú eres mi Dios».

SÁBADO 25.06.2022
Sábado de la 12a semana del TO, par
Jerusalén acabó siendo destruida por los babilonios: dolor, sufrimiento, reconocimiento de la propia culpa… de los que se hace eco el libro de las Lamentaciones. La desgracia se repetirá siglos más tarde con los romanos… y se sigue repitiendo hoy en otros lugares de nuestro mundo. La condición pecadora del ser humano provoca esta violencia y esta destrucción, de las que, en última instancia, sólo nos podrá salvar aquél que «tomó nuestras dolencias y cargó con nuestras enfermedades»: Jesucristo, nuestro Señor. Así que con la fe-humildad del centurión romano, le decimos hoy al Señor: «Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo. Basta que lo digas de palabra y…». Y aquí cada uno podemos poner ante Él, en este día, tantas situaciones y realidades dolorosas de nuestro mundo y propias.

VIERNES 24.06.2022
Sagrado Corazón de Jesús
¿A quién acudiremos cuando las cosas y las teorías de este mundo ya no nos llenan el corazón? ¿A quién acudiremos cuando nuestra alma siente la sed del infinito? ¿En quién nos apoyaremos cuando sentimos que nuestra vida necesita un cambio urgente? ¿Quién nos dará fuerza para sustraernos de la mediocridad que nos envuelve? Etc. etc. La solemnidad del Sagrado Corazón nos invita a “mirar” a quien nos ha amado primero, antes de cualquier merecimiento por nuestra parte… «siendo todavía nosotros pecadores». A quien es plenitud y fuerza, a quien nos busca con constancia, con ternura… con infinito amor.

JUEVES 23.06.2022
Jueves de la 12a semana del TO, par
Hay una forma de alejarse de Dios que es, evidentemente, por el rechazo explícito de todo lo que a Él se refiere. Pero también uno se puede alejar de Dios, aunque tenga su nombre constantemente en los propios labios, por la incoherencia entre la fe y la vida. «No todo el que dice “Señor” …», nos decía hoy Jesús en el evangelio. Esa incoherencia se dio muchas veces en los reyes de Israel y Judá, sordos a la voz de los profetas, y ocasionó la ruina de ambos reinos. Hace unos días la liturgia nos situaba en la destrucción de Israel por parte de los ejércitos Asirios. Hoy la primera lectura nos ha situado en la primera deportación a Babilonia hacia el año 697 a. C. Pero no parece que por ello aprendieran la lección. Y nosotros ¿la hemos aprendido? ¿Es nuestra vida sólida casa construida sobre el Dios de Jesucristo? ¿O es frágil vivienda hecha de conveniencia, manipulación, fanatismo y/o rechazo de Dios?

MIÉRCOLES 22.06.2022
Miércoles de la 12a semana del TO, par
Josías ha pasado a la historia de Judá como uno de sus grandes reyes, aunque, no tanto en lo político como en lo religioso. En su tiempo fue reencontrado el libro del Deuteronomio, como nos narra hoy la 1ª lectura, y emprendió una importante reforma religiosa y del templo de Jerusalén. Josías es, pues, uno de esas personas que, como tantos otros, han comprendido que la vida sin Dios no vale nada, y que ese Dios no se puede reducir a unas palabras bonitas o a un culto llamativo, sino que nos está pidiendo una coherencia de vida… «Por sus frutos los conoceréis», como nos dice Jesús hoy en el evangelio. Señor, que nuestra fe no se quede en palabras y buenas intenciones, que nuestra fe se refleje en nuestra vida. Amén.

MARTES 21.06.2022
Martes de la 12a semana del TO, par
Senaquerib, orgulloso y prepotente, después de haber tomado Israel avanza sobre Judá, piensa que no tardará mucho en tomarla. Pero los planes de Dios son otros bien distintos, los planes de ese Dios con los que él no contaba. Y Senaquerib, diezmado su ejército, e imaginamos que humillado, ha de regresar a su patria donde será asesinado por dos de sus hijos. Y así, como a Senaquerib, a nuestro nivel, nos ocurre a nosotros muchas veces con los planes de nuestra vida: porque son nuestros planes, pero no los planes de Dios; porque hemos perdido el sentido sagrado de la existencia; porque no sabemos mirar con respeto a los demás; porque no sabemos entrar por la puerta estrecha del humilde caminar ante Dios y los demás…

LUNES 20.06.2022
Lunes de la 12a semana del TO, par
La vida nos ha ido enseñando que las personas más críticas con los demás suelen ser las más necesitadas de una autocrítica, de una revisión y replanteamiento de su propia vida que no son capaces o no quieren afrontar. Así pues, sorprenderse a sí mismo con esta actitud “criticona” debería ser una señal de alarma de que algo está mal en la propia vida, que soy yo mismo el primero que tiene que empezar por cambiar. Y esto ocurre no sólo en el mundo, entre los vecinos/as de un pueblo, en la escalera del barrio, o entre los compañeros/as de trabajo, también ocurre en la Iglesia, y aparecen los santurrones/as que no dejan títere con cabeza, empezando por el mismo papa. ¡Líbranos, Señor, de esta tentación!

DOMINGO 19.06.2022
Domingo XII del TO, ciclo C
La travesía del desierto en la Biblia no es sólo un lugar geográfico, es parábola del corazón del hombre en este mundo. «Mi alma está sedienta de ti, mi carne está sedienta de ti», proclamamos hoy en el salmo responsorial. Y la liturgia de este domingo nos dice, esa sed sólo la puede apagar Dios por Jesucristo, «el Mesías de Dios», un Mesías que será “ejecutado” antes de “resucitar”… Y nosotros “accedemos” a él por el camino de la fe. Una fe que se hace oración, sacramento, caridad… pero, sobre todo, se hace camino, siguiendo sus propios pasos hacia el Calvario… con la sed del corazón no saciada, con nuestras búsquedas y nuestros fracasos, con nuestras esperanzas y decepciones…: «Si alguno quiere venir en pos de mí, que se niegue a sí mismo, tome su cruz cada día y me siga». Quizá sea lo único que podamos poner ante él.

SÁBADO 18.06.2022
Sábado de la 11a semana del TO, par
Dice el refrán que “quien siembra vientos recoge tempestades”. Y así la violencia en la casa de Judá se prolonga en el reinado de Joás, aquel pequeño niño que su tía Josebá salvó de la matanza de posibles aspirantes al trono decretada por Atalía, abuela de Joás. En la primera lectura de hoy, el asesinado Zacarías era primo de Joás e hijo de quien le había salvado la vida, Josebá. «No podéis servir a dos amos», nos dice hoy Jesús en el evangelio. Y así es siempre. Y cuando el amo no es verdaderamente el Señor, el corazón se nos pudre y la vida se nos llena de “bienes, poderes, riquezas, influencias, prestigios, etc.” que nos acaban aplastando –como a Joás–. Señor, libéranos del agobio del presente, y sobre todo del agobio de las “obligaciones” que nosotros mismos nos hemos creado. Señor, que nuestro corazón descanse de verdad en Ti. Amén.

VIERNES 17.06.2022
Viernes de la 11a semana del TO, par
Los intereses políticos o de partido, las ideologías o las frustraciones personales, etc. por delante de las personas y del verdadero bien común. Lo vemos hoy, pero ha sido siempre así. Atalía era hija de Ajab y Jezabel, así que “de tal palo, tal astilla”: viuda del rey Jorán de Judá, al morir el hijo de ambos, el rey Ocozías, no dudó en asesinar a todos los posibles aspirantes al trono para quedarse ella con él. Pero, como hemos escuchado, la violencia por ella desencadenada, acabará por destruirla también a ella, y la dinastía de David, restaurada. Y uno piensa… si nuestros hijos, de niños, sólo ven en su infancia violencia y fealdad y cosificación del ser humano, a través de las pantallas electrónicas, y no sólo de las pantallas, ¿cómo queremos que cuando crecen sean respetuosos y no violentos?, ¿cómo queremos que sean felices, que vivan una vida con un horizonte de plenitud? «No atesoréis tesoros en la tierra… Si tu ojo está sano, tu cuerpo entero tendrá luz…». Oremos.

JUEVES 16.06.2022
Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo, C
El testimonio de una mujer que, con su cesta de la compra, entró en una iglesia a rezar tocó el corazón de Edith Stein en el camino de su conversión. Hoy muchos creyentes, en medio de sus afanes diarios, siguen postrándose de rodillas ante la presencia pobre y humilde, pero real y verdadera de la Eucaristía, que cambia vidas, toca corazones, sostiene en las dificultades y alimenta la caridad. El Dios que se abajó en Belén a la humildad de nuestra carne, –pero aún quedaba la ternura–, siguió abajándose en el Gólgota hasta la muerte como de un malhechor, –pero aún quedaba la piedad–, para terminar presente en un poco de pan y de vino –donde sólo queda la fe… y el amor–.

JUEVES 16.06.2022
Jueves de la 11a semana del TO, par
Elogio de los profetas Elías y Eliseo. Dos profetas que dejaron una profunda huella en la historia del pueblo judío. Quizá el recuerdo haya exagerado sus hazañas, pero, en cualquier caso, no fueron ellos, sino Dios quien, a través de ellos, obró maravillas… Y nos sigue llamando a volver a Él a través del testimonio de hombres y mujeres, sencillos de corazón, pero fuertes en la “lucha”, que han hecho de su vida signo y transparencia de la oración que el mismo Jesús nos enseñó. No se trata, al rezar el Padrenuestro, de repetir puntualmente palabras mágicas, sino de una actitud del corazón, de una gracia a pedir y recibir, de un amor a encarnar… Y tú, ¿cómo rezas el Padrenuestro?

MIÉRCOLES 15.06.2022
Miércoles de la 11a semana del TO, par
Elías llega al final de su vida. Ha cumplido –y sufrido– su misión en la tierra y es arrebatado al cielo –llevado junto a Dios–. Otro profeta, Eliseo, continuará la misión profética… Las personas pasamos, la misión continúa… la misión de llevar el universo, y en particular a los seres humanos, a la plenitud de la Vida y del Amor en Dios… ¡Nosotros, pobres y pecadores, llamados a ser colaboradores de Dios! Ahora bien, siempre con humildad, siempre con su gracia, todo lo demás es secundario… El riesgo de buscarse a sí mismo o de buscar el aplauso de los demás siempre está ahí, incluso en la persona (que se cree) religiosa… De ahí la llamada que hoy Jesús nos hace en el evangelio: que vuestra justicia la vea sólo vuestro Padre del Cielo… ¡no los hombres!

MARTES 14.06.2022
Martes de la 11a semana del TO, par
Si, al menos, por un instante Ajab se hubiese puesto en el lugar de Nabot, si hubiera intentado reflexionar sobre el porqué de su negativa a venderle la viña… Pero no, Ajab sólo se escuchó a sí mismo, y, encima, tuvo al lado quien le dio la razón, la reina Jezabel… Una cadena de violencia se desencadenó, y la primera víctima fue Nabot; pero el mal desencadenado no terminó ahí, como nos recuerda hoy la primera lectura… Cuántas veces en la vida tampoco nosotros medimos el alcance de nuestras palabras o de nuestras acciones, no medimos el daño que hacemos a los demás y nos hacemos a nosotros mismos con nuestra precipitación, con nuestra falta de sensibilidad hacia los demás. Por ello, la liturgia de este día, además de invitarnos a reflexionar sobre estas nuestras conductas, nos recuerda que, en Dios, hay un camino de “reparación”: el arrepentimiento, el pedir perdón y la penitencia. Y Jesús, en el evangelio, nos abre un camino evangélico, no sólo en favor de los “verdugos”, invitándonos a rezar por ellos, sino también para las “víctimas”, porque quien ora, con la gracia de Dios, por los “perseguidores” se sustrae a sí mismo de la espiral de violencia que siempre origina el mal…

LUNES 13.06.2022
Lunes de la 11a semana del TO, par
La historia está llena de ajabs y jezabeles que sólo miran por sus intereses/egoísmos y para los que el ser humano ha perdido toda su dignidad. Y por eso también la historia está llena de nabots que caen víctimas de aquellos. La actualidad de nuestro mundo es triste reflejo de ello, miremos el mundo por donde le miremos… El mundo de los refugiados, a los que recordaremos el próximo domingo, es sólo uno de esas tristes realidades de los nabots de nuestro mundo en estos momentos, y de los ajabs y jezabeles que están detrás. Encomendemos hoy con nuestra oración a aquellos, pero, como nos dice hoy Jesús en el evangelio, no nos olvidemos de estos… entre los cuales también puedo encontrarme yo, por mi forma de vivir, por mi forma de consumir, por mi indiferencia ante ciertos problemas…

DOMINGO 12.06.2022
La Santísima Trinidad, ciclo C
Si intentas pensar la eternidad, –“desde siempre y para siempre, para siempre…”–, una especie de vértigo te arrastrará, porque tú un día naciste y otro morirás, y así con todo lo que te rodea y rodeará. Si intentas pensar la subsistencia, –“antes de que el mundo existiese, y después de que el mundo deje de existir…”–, otro tanto te pasará, porque todo lo que tu alcanzas tiene una existencia otorgada que lleva fecha de caducidad… Sólo cuando de verdad amas, sólo cuando en la belleza de cuanto te rodea te dejas arrastrar, y el bien no dejas de practicar, las puertas de otro “mundo” sientes traspasar, un mundo que es eterno, un mundo que con este presente no terminará, un mundo traspasado de Bondad, Belleza y Caridad, un mundo en el que Dios habita y en el que tú estás llamado a habitar… un “mundo” que es Amor desbordante, un mundo que es Trinidad…

SÁBADO 11.06.2022
Sábado de la 10a semana del TO, par
Decir adiós a los padres, destruir el medio de vida y ofrecérselo a Dios en sacrificio, ponerse en camino… ¿dónde? Donde Dios te lleve, donde pierdas todas tus seguridades humanas… donde Él quiera, cargando con tu cruz que es la Suya, cargando con Su Cruz que da sentido a la tuya… Que tu Sí sea Sí, y que tu no, sea no… lo demás «viene del Maligno», te destruye.

VIERNES 10.06.2022
Viernes de la 10a semana del TO, par
El corazón de Elías está atribulado «porque los israelitas han abandonado Tu alianza», y porque los reyes de Israel lo persiguen. Elías huye hacia el sur y se refugia en el Horeb, el monte de Dios. En el contexto del A.T. cabe pensar que Elías esperaría, desearía una respuesta contundente de Dios “como fuego, como viento huracanado, como terremoto”, pero Dios se le revelará como lo contrario, como brisa suave del atardecer. Estamos ante uno de los momentos claves de la revelación de Dios a la Humanidad: la paciencia y la suavidad de Dios frente a la impaciencia y “contundencia” humana. Este momento que prepara de forma significativa la Encarnación del Hijo de Dios: la respuesta de Dios ante la infidelidad humana no es la violencia, sino la humildad y la entrega. Humildad, entrega… fidelidad que, a su vez, deben presidir (como gracia a pedir constantemente y como objetivo a “luchar”) la vida del cristiano… también en el matrimonio, como nos recuerdan hoy las palabras de Jesús en el evangelio.

JUEVES 9.06.2022
Jueves de la 10a semana del TO, par

Y fiesta de Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote
Hb 10, 12-23; Sal 39, 6. 7. 8-9. 10. 11; Lc 22, 14-20

A nuestra mentalidad “científica”, atrapada en la inmanencia, le resulta difícil captar la unidad entre lo cósmico y la dimensión personal en la que se “mueve” un profeta: el universo es una gran unidad (en Dios) en la que todo se interrelaciona más allá de la causalidad física. Y así, la victoria de Elías sobre los profetas de Baal, traerá también el final de la sequía. De la misma forma, la persona verdaderamente religiosa, como nos recuerda hoy Jesús en el evangelio, no puede “llevar” por un lado su vida religiosa-piadosa y por otro, su vida “en el mundo”. Al contrario, quien sigue verdaderamente a Jesucristo, recibe de Él una unidad de alma, vida y corazón…

… que tiene en la Eucaristía un “lugar” privilegiado de expresión y de configuración: «Tomad y comed… éste es mi Cuerpo», «Tomad y bebed… ésta es mi sangre». La fiesta de Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote que hoy celebra la liturgia de la Iglesia en España, nos lo recuerda. Y desde ella nuestro corazón se vuelve agradecido a quien es el centro de nuestra vida y de nuestro corazón (en Él todo se unifica y adquiere luz y sentido), al mismo tiempo, que nos volvemos suplicantes por aquellos que, a nuestro alrededor, están rotos y desarmados por dentro… por aquellos que les falta la unidad esencial en Cristo Jesús que da la fe.

MIÉRCOLES 8.06.2022
Miércoles de la 10a semana del TO, par
Quizá hiera un poco nuestra sensibilidad la violencia que refleja hoy la primera lectura, con el agravante que es ejecutada en nombre de Dios. Pero estamos en otra época y en otra mentalidad… El camino del evangelio (y del amor a los enemigos) ha sido/es un camino largo y no siempre fácil, a todos los niveles, también a nivel personal. Por ello quizá no estaría mal que escucháramos como dirigidas a nosotros las palabras del profeta Elías: «¿Hasta cuándo vais a estar cojeando sobre dos muletas? Si el Señor es Dios, seguidlo; si lo es Baal, seguid a Baal». ¿Cuántos “Baales” tengo yo en mi vida? “Baales” que no sólo tiene quien vive de espaldas a Dios (o en la medida que vive de espaldas a Él), sino también la persona religiosa cuando hace de las mediaciones un fin en sí mismas… un ídolo. Con sus palabras en el evangelio de hoy, Jesús nos invita a vivirlo todo, lo profano y lo religioso, en una plenitud que “no fabricamos nosotros”, sino que la recibimos de Él: ni la dictadura de las leyes ni la dictadura de las no-leyes, sino el amor y la gracia que todo lo llenan e iluminan, acogidos con humildad y gratitud.

MARTES 7.06.2022
Martes de la 10a semana del TO, par
Un profeta perseguido y hambriento, una mujer viuda y pobre. Y donde no había esperanza, Dios cruzará el celo religioso del profeta con la generosidad de la viuda para abrir un camino de salvación. Celo religioso (que no fanatismo) y generosidad, dimensión vertical y horizontal de la fe, anuncio profético del misterio de Cristo, porque allí, donde ambas dimensiones se cruzan, está Cristo crucificado… el Salvador. Hoy, cuando tantas pobrezas y angustias se cruzan en el camino de la humanidad, la liturgia de este día nos invita a volver con autenticidad a lo esencial de nuestra fe: “mirar” a Dios, con amor, con gratitud, con humildad… “mirar” a los demás, con generosidad, paciencia, magnanimidad… Y así ser sal para la tierra, luz para el mundo del único y verdadero Salvador…

LUNES 6.06.2022
Lunes de la 10a semana del TO, par
«Mira el vacío del hombre si tú le faltas por dentro…», leíamos ayer en la secuencia de Pentecostés, y desde aquí contemplaba con dolor la triste realidad de muchos de nuestros contemporáneos. Hoy, al leer las Bienaventuranzas, por el contrario, he tomado conciencia de la LUZ y la FUERZA que la fe ha significado a lo largo de mi vida… Con gratitud elevo mi corazón al Señor en este lunes de Pentecostés, en el que, en muchos lugares, se celebra a la Virgen María como patrona. No en vano ella es la «llena de gracia», –la llena del Espíritu Santo–… A sus manos de madre encomendemos tantos corazones vacíos, dolorosamente vacíos…

DOMINGO 5.06.2022
Pentecostés, ciclo C
El bebé en el vientre de su mamá no la ve, pero ella no por eso deja de estar presente en «todo»: en el alimento y el oxígeno que recibe, en el sonido que le «acuna», en el líquido que le envuelve… y, sobre todo, es el amor que le envuelve. No la ve, pero ella está, y la siente… El Universo es como el «vientre» de Dios para la humanidad. No Le vemos pero Él está presente en todo y en todas partes… incluso en nuestro corazón. Negarlo es un gran engaño. Vivir como si no existiera es autocondenarse a muerte… como hoy, tristemente, nos está ocurriendo. A veces, ante experiencias o estadísticas calamitosas, sobre todo en el mundo de la niñez-adolescencia, podemos leer en los periódicos: «algo estamos haciendo mal». Pero no es cuestión de «hacer» sino de «ser»: o somos en Dios, con Dios y para Dios o, sencillamente —y terriblemente— no somos. ¡Ven Espíritu Santo, apaga nuestra soberbia y «afina» nuestro corazón a Tú presencia!

SÁBADO 4.06.2022
Sábado de la 7a semana de Pascua
El tiempo pascual llega a su final y la liturgia nos deja a Pablo en Roma, a Pedro detrás de Jesús y a Juan con ese misterioso “si yo quiero que se quede hasta que venga”. Tres apóstoles, tres caminos, pero un solo corazón. El corazón transformado —y enamorado— de aquellos que conocieron a Jesucristo, reconocieron en Él la clave de la existencia y del Universo, y a Él (y al anuncio de su Evangelio) consagraron su vida hasta darla por Él. A nosotros, sumergidos en una cultura (?) que muchas veces hace del amor (?) un puro egoísmo, nos resulta difícil identificarnos con el alcance y la hondura de aquella experiencia… ¡Señor, envíanos tu Espíritu, que renueve nuestros corazones!

VIERNES 3.06.2022
Viernes de la 7a semana de Pascua
Pablo ha apelado a Roma y la “maquinaria” del Imperio Romano lo llevará a Roma. Con ello (aunque no sólo con ello) el evangelio será predicado en el corazón del paganismo, y a la larga nos dejará uno de los textos más importantes del Nuevo Testamento: la Carta a los Romanos. Podíamos decir: la “maquinaria” del Imperio al servicio del evangelio… y sin saberlo. Los caminos de Dios… Y Pedro, en el evangelio de hoy, es enfrentado de nuevo a su propia fragilidad: «Cuando eras joven… cuando seas viejo… a donde tu no quieras». Sin la confianza esencial en que todo esté en las manos de Dios, todo se nos desmorona… y nos angustiamos y deprimimos. «Señor, creo, pero aumenta mi fe».

JUEVES 2.06.2022
Jueves de la 7a semana de Pascua
Cuando la fe deja de ser fe y se convierte en ideología o “negocio” de este mundo o “tapadera” de los propios fracasos existenciales o todo esto un poco a la vez, provoca situaciones bochornosas (y violentas) como la de los fariseos y saduceos en la primera lectura de hoy. Tristemente, también en la Iglesia, esto ha existido y existe. Jesús lo sabe y por eso le pide al Padre la unidad de los suyos: «No solo por ellos ruego, sino también por los que crean en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno, como tú, Padre, en mí, y yo en ti, que ellos también sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado». Y nosotros hoy nos unimos a esta oración del Señor.

MIÉRCOLES 1.06.2022
Miércoles de la 7a semana de Pascua
No lo podemos tener todo, no podemos hacer todo, no lo podemos abarcar todo… Tampoco podemos retener a los que amamos. Tarde o temprano, de una forma o de otra, tenemos que decir adiós. Pablo dice adiós a los presbíteros de Éfeso, y Jesús a sus discípulos. Hay dolor y lágrimas, ¡cómo no! Pero, sobre todo, hay eso que hoy nos falta tantas veces a nosotros, la confianza de que por mucho que nosotros queramos a una persona, hay Alguien que la quiere más; que por mucho que la hayamos cuidado, hay Alguien que la ha cuidado (quizá nosotros sólo hayamos sido un instrumento Suyo) y la cuidará más; que por mucho que nos preocupe su futuro cuando nosotros no estemos, hay Alguien en cuyas manos está… Oremos hoy (y siempre) muy especialmente por aquellos que amamos, por aquellos que nos preocupan, por aquellos de los que nos tenemos que separar… y no nos creamos imprescindibles. Imprescindible sólo es Él.

MARTES 31.05.2022
Martes de la 7a semana de Pascua
Pablo se despide de los presbíteros de Éfeso y Jesús de sus discípulos. Dos vidas entregadas, cada uno a su nivel, al servicio del evangelio. Pablo se dirige a Jerusalén donde adivina sufrimientos y persecución, lo mismo que Jesús. Nos quedamos con las palabras de Pablo: «Pero a mí no me importa la vida, sino completar mi carrera y consumar el ministerio que recibí del Señor». No sé si nosotros podemos decir lo mismo. Que la oración de Jesús, —«Padre, te ruego por ellos»—, nos alcance también a nosotros.

LUNES 30.05.2022
Lunes de la 7a semana de Pascua
Como a los discípulos de Jesús, nos pasa también a nosotros, tanto en el camino de la vida como en el de la fe. Hay momentos en que todo nos parece claro, que lo entendemos todo, que sentimos una fuerza que parece que no se va a acabar nunca, pero otros… Otros en que quisiéramos salir corriendo, en que nos parece que todo es oscuro, que en todo nos hemos equivocado… Pero es, precisamente ésta, la hora de mantener el rumbo y firme el timón de la vida y de la fe, fieles a las convicciones profundas. El problema viene hoy para muchos, porque no tienen convicciones profundas y viven sólo al retortero de lo que marcan las modas, los instintos, los impulsos, los que les rodean… ¡Qué necesidad tiene nuestro mundo de valientes e infatigables evangelizadores como Pablo! Roguemos al Dueño de la Viña…

DOMINGO 29.05.2022
7° domingo de Pascua, la Ascensión del Señor, ciclo C
Todo lo que aconteció en los días de la Pasión del Señor y en los días posteriores, con las apariciones del Resucitado, tuvo que ser, para los discípulos, una especie de terremoto interior que no podemos hacernos la menor idea de lo que fue. Y fue precisamente allí, en medio de aquella situación que parecía «acabar» con todo, que los discípulos experimentaron el «nacimiento» de «Algo Completamente Nuevo». La Historia está de tal forma en las manos de Dios que, precisamente, cuando todo parece derrumbarse es que está ocurriendo todo lo contrario: se desmorona los «viejo» lo que no es vida teologal, o no lo es completamente, para que aparezca lo «Nuevo» lo que sí es de Dios, lo que de Él viene y a Él va. La fiesta de la Ascensión del Señor nos invita así a abrirnos al Único que permanece para siempre, en medio de los «derrumbes» del momento presente.

SÁBADO 28.05.2022
Sábado de la 6a semana de Pascua
Tercer viaje misionero de Pablo. Tuvo que ser para él un gran gozo el ver cómo las comunidades cristianas, a pesar de las dificultades, se iban afianzando, y apareciendo nuevos evangelizadores, como Apolo. Experiencia de la gracia, es decir, de la obra del Espíritu en la comunión del Padre y el Hijo. Hoy Jesús no sólo nos invita a «pedir algo al Padre en su nombre», sino que nos asegura «que lo que pidamos en su nombre nos lo dará». Aquí está la fuerza de la evangelización, y la «alegría completa» de una vida. Pero tantas veces ponemos la “fuerza” en no-sé-qué-cosas…

VIERNES 27.05.2022
Viernes de la 6a semana de Pascua
La tarea apostólica de Pablo avanza con dificultades pero, por encima de ellas, con la confianza de que las “riendas” las lleva el Señor: «Muchos en esta ciudad son pueblo mío». Este Señor que nos ha prometido que «vuestra tristeza se convertirá en alegría». Sin esta confianza radical en nuestros trabajos apostólicos todo se nos desmorona, y la amargura y el desencanto nos invaden. Pero lo mismo ocurre con la vida: ¿Qué pintamos en esta vida si nuestra existencia no “descansa” en Dios, en el Dios de Jesucristo? Desgraciadamente, con tanto “respeto” a su libre (?) elección hemos privado a las nuevas generaciones de una “columna” fundamental de su vida. ¿No extrañaremos luego de ciertas “amarguras” y violencias?

JUEVES 26.05.2022
Jueves de la 6a semana de Pascua
No lo podemos abarcar ni retener todo. Crecer, madurar… significa también, aprender a renunciar, –en cierto sentido–, a morir. Y esto pasa a todos los niveles de la persona: biológico, psicológico, afectivo, espiritual… Los discípulos de Jesús tuvieron que renunciar al Jesús histórico para encontrarse con el Cristo resucitado. Y renunciar a las apariciones del Resucitado para recibir el Espíritu Santo: «Vuestra tristeza se convertirá en alegría». En su tarea evangelizadora Pablo, –hoy en Corinto–, se encontró con personas abiertas al “cambio”, dispuestas a crecer en la fe, pero también con otras cerradas y violentas, aferradas a leyes y costumbres. Hoy sigue pasando lo mismo. Pero la violencia es siempre signo de ausencia del Espíritu en el propio corazón, por tanto, signo de fracaso, de Muerte…

MIÉRCOLES 25.05.2022
Miércoles de la 6a semana de Pascua
Ayer por la noche, en una reunión, se nos recordaba con preocupación la baja afiliación a la Iglesia de las nuevas generaciones. En la primera lectura de hoy, Pablo, a pesar del discurso “técnicamente” impecable en el Areópago de Atenas, no parece tener mucho éxito. Mirado desde los números, tampoco podemos decir que Jesús (¡y era Jesús!) tuviera mucho éxito cuando lo vemos morir casi solo en el Calvario. Pero Él sabe bien que la fe no es cuestión de “técnica” sino de gracia y, por ello, antes de morir, promete a sus discípulos el Espíritu «que os guiará hasta la verdad plena». Quizá llevamos mucho tiempo centrados sobre nuestra sabiduría y nuestras técnicas de evangelización, y nos hayamos olvidado un poco de abrirnos cada mañana, desde nuestra pobreza, a quien procede del Padre y del Hijo: “Ven Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu Amor”. Y cuando invocamos a María, ¿no nos hemos olvidado también un poco que ella es, ante todo, la Gran Obra del Espíritu Santo en «la humildad de su esclava»?

MARTES 24.05.2022
Martes de la 6a semana de Pascua
En la cárcel –como si de un nuevo sepulcro se tratase–, cuando la ley de los violentos parece tener la última palabra –como con Jesús–, Pablo y Silas perseveran en la oración –como a la espera de un nuevo Pentecostés–, y éste se produce, y la cárcel tiembla, y el carcelero y toda su familia se convierten. Esta es la fuerza del Espíritu, del Espíritu que Jesús prometió a sus apóstoles y a nosotros, del Espíritu ante el cuál no hay barreras que le detengan… salvo una, la del orgullo y la autosuficiencia humanas. No nos cansemos de pedir este Espíritu en esta hora de la historia… sobre nosotros, sobre la Iglesia, sobre el mundo.

LUNES 23.05.2022
Lunes de la 6a semana de Pascua
«El Señor le abrió el corazón…», «cuando venga el Paráclito… el Espíritu de la verdad… él dará testimonio de mí…». «El cristiano del s. XXI o será místico o no será». «Lidia… adoraba al verdadero Dios…», «desde el principio estáis conmigo…». Luchemos y esforcémonos, en lo poco que podemos, por estar con y adorar al Señor. Y dejemos lo demás a su Espíritu, porque «el Señor ama a su pueblo». ¿O, tal vez, lo habíamos olvidado?

DOMINGO 22.05.2022
6° domingo de Pascua, ciclo C
Como náufragos en medio de la tormenta caminan muchos de nuestros contemporáneos. No les ha faltado el vestido, ni la comida, ni la diversión, ni un capricho… pero perdidos en esa “abundancia” se han olvidado de buscar lo esencial. O mejor, se han olvidado de dejarse encontrar (y modelar) por lo esencial. Eso “esencial” que no está fuera de nosotros, sino dentro: En lo más íntimo de mí mismo , en el santuario de mi corazón, Dios habita en su Espíritu… Él es nuestra fortaleza, nuestra capacidad de amar, nuestra paz, nuestra esperanza… nuestra luz y nuestra gloria. ¡Pongámonos a su escucha!

SÁBADO 21.05.2022
Sábado de la 5a semana de Pascua
La persecución, al menos la incomprensión por parte del mundo, forma parte de nuestra identidad cristiana. Nos lo recuerda hoy Jesús en el evangelio. Y es que la lógica del evangelio no es la lógica del mundo. Pero junto a estos momentos de dificultad en la vida del creyente (y del evangelizador) hay momentos luminosos, habitados por la presencia de Dios, y otros de desconcierto porque el Señor nos lleva donde no pensábamos ir… Señor, tú eres bueno, tu misericordia es eterna, y nosotros somos tuyos, ovejas de tu rebaño, danos la gracia de dejarnos guiar por ti.

VIERNES 20.05.2022
Viernes de la 5a semana de Pascua
Cuántas veces han prevalecido, en nuestras relaciones pastorales, las ideologías, los protagonismos (y narcisismos) personales, las envidias, etc. etc. Así que, luego, no nos extrañe que no hemos sido convincentes para casi nadie. Jesús hoy nos recuerda, una vez más, que el amor “de los unos a los otros como él mismo nos ha amado” ha de estar en la base de nuestras relaciones y acciones eclesiales. Y la primera lectura, con la carta y la comisión que se envía desde Jerusalén a Antioquía, nos da ejemplo de ello. Pidamos perdón por las veces que no ha sido ni es así, y pidamos también la gracia de enmendarnos…

JUEVES 19.05.2022
Jueves de la 5a semana de Pascua
Señor, tú hoy me pides y me regalas «permanecer en tu amor». Tú palabra creadora me abre el camino, pero yo no puedo quedarme de brazos cruzados. El cumplir los mandamientos es mi pequeña (aunque, a veces, difícil) contribución a esta alianza de amor. Y, como regalo añadido, me ofreces tú alegría, no la alegría efímera de los pequeños placeres o satisfacciones del mundo, sino tu gran Alegría, la que es comunión con Dios, presencia del Espíritu, plenitud del Amor… El “concilio de Jerusalén” se resuelve con el testimonio de los apóstoles y el buen juicio de Santiago. Señor, da hoy a tu Iglesia, para el mundo, testigos de tu Alegría y buen juicio a sus pastores.

MIÉRCOLES 18.05.2022
Miércoles de la 5a semana de Pascua
¡Qué pronto le empezamos a poner límites al amor incondicional de Dios! Que si la circuncisión, que si la carne sacrificada o no a los ídolos, que si… y nosotros, seguramente, podíamos seguir añadiendo hoy límites a esta lista. Y es que, como una sombra del pecado original, es decir de nuestro orgullo y autosuficiencia, preferimos pensar (y actuar) como si el amor de Dios dependiese de nosotros y no de su infinita misericordia. Y así nos olvidamos que, lo que nos une a la vid, que es Cristo, no son nuestros méritos (siempre pobres, cuando no, engañosos), sino su gracia y amor infinitos, que acogemos en la fe… Evidentemente, no una fe de catecismo, que se queda en la exterioridad de una doctrina y unos ritos, sino una fe que penetra hasta el fondo del corazón y que hace de nuestra vida respuesta agradecida al Padre, en el Hijo, por el Espíritu Santo.

MARTES 17.05.2022
Martes de la 5a semana de Pascua
Jesús, después de cumplir su misión en este mundo, vuelve al Padre que lo había enviado, y los discípulos, después de su primer viaje apostólico, vuelven a la comunidad de Antioquía (de Siria) que los había enviado. La obra evangelizadora no es la obra de genios o de unos planteamientos técnicamente perfectos, sino la tarea de una Iglesia en comunión. Una comunión que nos inserta, a su vez, en la comunión de amor trinitaria de donde brota la “eficacia” evangelizadora. Eficacia que, no nos equivoquemos, no es según los criterios del mundo, sino del evangelio: «Que hay que pasar mucho para entrar en el Reino», nos dice Pablo. Y Jesús mismo se despide de sus discípulos antes de ser entregado a la muerte. Oremos, ayunemos… ofrezcamos nuestra vida diaria con sus cruces al Señor, para que el evangelio sea, en verdad, buena noticia para tanto corazón roto y vacío como nos rodea.

LUNES 16.05.2022
Lunes de la 5a semana de Pascua
La persecución y los signos del Reino acompañan la predicación de Pablo y Bernabé, como acompañaron la predicación del Señor. Y junto a estos signos, una tentación: la de dejarse atribuir el “honor y la gloria” de los mismos. Pablo y Bernabé reaccionan con rotundidad, pero nosotros no siempre reaccionamos así. Hay un misterio de gracia y de libertad que se nos escapa. Judas pregunta a Jesús por qué ellos han sido elegidos y no el mundo. De nuevo, la libertad y la gracia. Y la respuesta de Jesús no se entretiene en disquisiciones filosóficas, sino que nos invita a amarle… Y es que, en el misterio de la fe (como en el de la vida) hay cosas que nunca comprenderemos si nos quedamos a nivel intelectual. No podemos entender todo en la vida para vivir, no podemos entender todo en la fe para creer… Viviendo, entendemos un poco más la vida; creyendo, entendemos un poco más la fe; y amando, un poco más el Amor, que es la última clave-explicación del misterio de la gracia y de la libertad humanas.

DOMINGO 15.05.2022
5° domingo de Pascua, ciclo C
«(…) Has sido un gran regalo en nuestra vida, porque nos has ayudado a mirar por encima de nuestros límites humanos. (…) Por lo poco que he entendido en estos años solo puedo decirte que el Amor está en el centro de nuestra vida, porque nacemos de un acto de amor, vivimos para amar y ser amados, y morimos para conocer el verdadero amor de Dios. El objetivo de nuestra vida es amar y estar siempre dispuestos a aprender a amar a Dios y a los demás como solo Dios puede enseñarnos. El amor te desgasta, pero es bonito morir gastados como una vela que se apaga cuando ha cumplido su misión. (…) Nosotros hemos amado a tus hermanos (…) y te hemos amado a ti sabiendo que no eras nuestro, que no eras para nosotros. Y así debe ser todo en la vida: lo que tienes no te pertenece nunca, porque es un regalo que Dios te hace para que tú puedas hacerlo fructificar. No te desanimes nunca, hijo mío, Dios nunca te quita nada, si toma algo, es solo porque quiere darte más. (…)» (Cf. Simone Troisi y Cristiana Paccini, «Nacemos para no morir nunca», Ed. Palabra).

SÁBADO 09.05.2022
San Matías, apóstol
Imaginamos que Matías, que había conocido a Judas y visto su traición a Jesús y su dramático final, al ocupar su puesto en el colegio apostólico, tuviera muy presente la gran fragilidad en la que nos movemos los seres humanos: “No te creas más que nadie porque, donde ves a los otros caer, pudiera ser que tú caigas algún día”. Pero, al mismo tiempo, imaginamos que, si Matías ocupa ese puesto estigmatizado por el recuerdo de su predecesor, sería porque él sabe del “gran Amor con que el Señor nos amó”, y que en ese Amor todo lo podemos… hasta lo que nos parece imposible. De la mano del apóstol san Matías, dejemos que el Amor del Señor purifique y sane todo aquello que estigmatiza nuestra vida… propio y ajeno.

VIERNES 09.05.2022
Viernes de la 4a semana de Pascua
El discurso de Pablo en Antioquía termina con las apariciones de Jesucristo resucitado, pero antes está el fracaso, el rechazo… y la muerte. Jesús es el camino, pero un camino que no está rodeado ni de aplausos ni de éxitos. Jesús es la verdad, esa que escuece a los “sabios” y poderosos de este mundo. Jesús es la vida, la vida que brota, no de guardarse a sí mismo, sino de entregarse. Pidamos la gracia de “ser sensatos y de servir al Señor con temor”.

JUEVES 09.05.2022
Jueves de la 4a semana de Pascua
Pablo predica y cuenta una historia. La fe es, ante todo, una experiencia personal y colectiva: Dios que me/nos acompaña en el camino de la vida. Compañía amante y dialogante que llega a su culminación con Jesús. Y Jesús hoy, en el Jueves Santo, nos invita a abrir una ventana en nuestro corazón: el servicio, la entrega de la vida como experiencia luminosa de Dios. Cuando en nuestro mundo occidental todo se enfoca hacia el individualismo y disfrute egoísta de la vida, podemos entender que Dios, y menos el Dios de Jesucristo, esté de moda. ¿Lo está en mí?

MIÉRCOLES 09.05.2022
Miércoles de la 4a semana de Pascua
Ayuno, oración, imposición de las manos… Comienzo del primer viaje apostólico de Pablo, con Bernabé y Juan-Marcos. La comunidad de Antioquía de Siria, que les envía, es consciente de que la evangelización no es “su” obra, sino la obra del Espíritu a través de ellos. Y Jesús, en el fragmento del evangelio que hoy hemos leído, nos muestra su conciencia de que su ser y su obrar no se cierran sobre él mismo, sino que remiten constantemente al Padre. Conciencia de alteridad que, el hombre de nuestras sociedades occidentales, con su (falsa) autosuficiencia ha perdido… también, muchas veces, se ha perdido en la labor pastoral de la propia Iglesia, así que, con la mejor voluntad, erramos el camino.

MARTES 09.05.2022
Martes de la 4a semana de Pascua y San Juan de Ávila, patrono del clero español
«Como la mano del Señor estaba con ellos»… «porque era un hombre bueno, lleno de Espíritu Santo y de fe»… El evangelio se expande por el testimonio de los testigos, ¡no de los ideólogos, ni de los “técnicos”! Juan de Ávila lo fue, además de “hombre bueno y de fe”, como Bernabé. La mención a la fiesta de la Dedicación del templo pone trasfondo político a la pregunta a Jesús de si Él es el Mesías. Los prejuicios ideológicos de todo tipo nos impiden, muchas veces, como a los oyentes de Jesús, un encuentro verdadero con Él… La vida de oración y el despojamiento, como en Juan de Ávila, nos abren al don de Jesucristo. Él es el primer y más grande “interesado” de que el evangelio llegue a los confines de la tierra…«para que nadie nos arrebate de su mano».

LUNES 09.05.2022
Lunes de la 4a semana de Pascua
Jesucristo, puerta que nos abre a la luz de la vida eterna; redil que nos congrega en la unidad de su Cuerpo, que es la Iglesia; buen pastor que nos mima, abraza, y susurra palabras y caminos de Amor… Jesucristo, el agua de la que mi alma está sedienta… Jesucristo, mirada libre sobre cada uno, que no antepone leyes, ni preceptos, ni ideologías… que nos busca y nos ama allí donde cada uno nos encontremos (judíos o griegos, circuncisos o incircuncisos…)… «¡Envía, Señor, tu luz y tu verdad, que ellas me guíen!».

DOMINGO 08.05.2022
4° domingo de Pascua, ciclo C
Quizá nos resulte hoy lejana, incluso peyorativa, la imagen de Jesucristo como Buen Pastor. Pero, al mismo tiempo, esta imagen nos transmite elementos que no podemos perder en nuestra experiencia cristiana: la necesidad de la escucha, por tanto, de la oración y adoración silenciosa ante Dios con la luz de su Palabra; la revisión constante de nuestra vida cristiana como seguimiento amoroso y humilde del Señor; la confianza del cuidado amoroso de Dios-Padre por cada uno de nosotros; y la esperanza en la Vida Eterna, esa de la que hoy se nos dice en el libro del Apocalipsis que, en ella, «Ya no pasarán hambre ni sed, no les hará daño el sol ni el bochorno. porque el Cordero (…) los apacentará y los conducirá hacia fuentes de aguas vivas. Y Dios enjugará toda lágrima de sus ojos». Es decir, estamos ante la plenitud de la Vida y del Amor: todo aquello que anhelamos y que en este mundo nunca alcanzaremos por bien que nos vaya. Pero como aquellos judíos que, en Antioquía de Pisidia, escuchaban la predicación de Pablo y Bernabé, también nosotros podemos acoger o rechazar esta fe. Que el Buen Pastor nos guíe, y nosotros nos dejemos guiar.

SÁBADO 07.05.2022
Sábado de la 3a semana de Pascua
La expansión de la Iglesia participa del misterio pascual de Cristo: las persecuciones se alternan con momentos de paz como el que hoy nos muestra la primera lectura. Jesús había anunciado esas persecuciones (“a mí me han perseguido, a vosotros os perseguirán”), pero también, los signos y milagros operados por quienes “tuvieran fe como un grano de mostaza”. Fue y seguirá siendo: la Cruz y la Gloria. Y también la cruz y la gloria en cada creyente: el misterio de Dios manifestado en Jesucristo que no cabe en nuestras cabezas, la labor de zapa de las ideologías, el escándalo del dolor de los inocentes, etc. que nos hacen, a veces, dudar; pero también momentos de sincera fe y fuerza creyente: “Señor, sólo tú tienes palabras de vida eterna, ¿a quién, si no a ti, vamos a acudir?”. Repitamos y meditemos estas palabras del Señor… sobre todo cuando nos asalte la tentación de abandonarlo.

VIERNES 06.05.2022
Viernes de la 3a semana de Pascua
Si el Covid no nos ha hecho tomar conciencia de nuestra frágil condición mortal, quizá lo haga ahora esa amenaza de bombas atómicas que tenemos sobre nuestras cabezas. En un momento todos nuestros planes y proyectos, y todo lo que amamos, pueden quedar destruidos para siempre. Ojalá no sea así, pero ojalá, también, esto nos sirva para plantearnos la verdad o las mentiras en que se centra nuestra vida. Pablo se encontró con esa verdad en el camino de Damasco, y pasó de la ceguera a la luz, del fanatismo al apostolado… Esa Verdad que es Jesucristo resucitado, Pan de Vida Eterna, Eucaristía…

JUEVES 05.05.2022
Jueves de la 3a semana de Pascua
“Nadie puede venir a mí si no lo atrae el Padre que me ha enviado”. La fe es don de Dios: Un hombre, el eunuco, en su sed de Dios, le busca. A otro hombre, testigo de Jesucristo resucitado, a Felipe, Dios lo cruza en su camino. Y de este encuentro surge el milagro de la fe. Pero no siempre todos los corazones son buscadores de Dios, ni todos los creyentes están disponibles para dar testimonio de su fe. En realidad, todos tendríamos que ser, toda nuestra vida, un poco buscadores de Dios y un poco testigos del mismo en esa nuestra búsqueda. Así que, caminemos humildes y agradecidos con la esperanza de la vida eterna, alimentados por el pan vivo bajado del cielo que es Jesucristo, a quien le pedimos mantener nuestra fe viva: búsqueda humilde y agradecida, y testimonio sincero y existencial (no de catecismo).

MIÉRCOLES 04.05.2022
Miércoles de la 3a semana de Pascua
La persecución desatada en Jerusalén, lejos de ser un desastre, se convierte en ocasión de anunciar el evangelio en otros lugares. Y a Saulo, uno de los que incitan esta persecución, le espera también su momento de encontrarse con quien, en definitiva, es el destino de su persecución: Jesucristo resucitado. Quien ha sido entregado a la muerte, “para que no se pierda nada de lo que Me dio, sino que lo resucite en el último día”, sigue venciendo el pecado y la muerte. Y sigue apagando la sed y el hambre que nada ni nadie podrán nunca a apagar. Pero, ¿lo acabamos de creer o seguimos dejándonos engañar?

MARTES 03.05.2022
f. San Felipe y Santiago, apóstoles
1Co 15, 1-11; Sal 18, 2-3. 4-5; Jn 14, 6-14
Desde el “muéstranos al Padre y nos basta” del evangelio de hoy hasta su martirio, Felipe tuvo que recorrer su camino en la fe. También Santiago… y todos. Y Pablo que, en la primera lectura de hoy nos invita a permanecer en la fe en el evangelio de Jesucristo, —“el que nos está salvando”—, también tuvo que hacer el suyo: en la primera lectura de este martes de la tercera semana de Pascua, nos lo muestra como testigo de la lapidación de Esteban, y aprobando esa ejecución. De aquí, hasta su martirio hay un largo camino con Jesús como Camino, Verdad y Vida… El mismo camino que, de una forma u otra, todos estamos llamados a recorrer. Que nunca nos creamos que ya lo sabemos todo de la fe, que ya no tenemos ningún camino que recorrer, ninguna nueva crisis que pasar… para que el evangelio llegue al último confín de la tierra y de nuestro corazón.

LUNES 02.05.2022
Lunes de la 3a semana de Pascua
Leyendo el evangelio de hoy, uno tiene la sensación de que Jesús juega al escondite con las gentes que lo buscan. Quizá, también nosotros, hemos pasado por una experiencia semejante: Jesús no estaba donde lo buscábamos o para lo que le buscábamos o, al menos, no estaba como nosotros lo habíamos imaginado. Y es que el encuentro con Jesús no se sitúa al nivel de lo tangible, visible o abarcable, como si de un objeto se tratase, sino al nivel profundo de la fe y la confianza en quien, estando presente en este mundo, al mismo tiempo, está más allá de este mundo. Quizá podíamos decir que, más que buscarle, lo que tenemos que hacer es dejarnos encontrar por Él… Aunque ese encuentro, como a Esteban, nos lleve por el camino de la incomprensión y hostilidad…

DOMINGO 1.05.2022
3er domingo de Pascua, ciclo C
La barca con los apóstoles y discípulos saliendo a pescar es una imagen de la Iglesia y de su predicación del evangelio “hasta los confines de la tierra” (los 153 peces); pero es también parábola de nuestra propia vida de cada día con sus afanes y trabajos. ¿Y qué tienen que aprender los apóstoles-discípulos (especialmente, Pedro) y qué tenemos que aprender nosotros? Pues que la labor apostólica será eficaz y nuestra vida fecunda, cuando aprendamos la difícil lección de la humildad, cuando aprendamos a poner a Jesús Resucitado, de verdad, en el centro de nuestras vidas: el evangelio de hoy comienza por “el vamos a pescar de Pedro” (infecundo) y termina con las palabras de Jesús a él “otro te ceñirá y te llevará adonde no quieras”. En medio, un mandato de Jesús (fecundo) y tres preguntas que evocan 3 negaciones… Pobrezas personales y eclesiales que, lejos de dejarnos aplastar por ellas, son ocasión de gracia… Para esto murió y resucitó el Señor…