Al hilo de la liturgia diaria 2021-22 (1)

SÁBADO 30.04.2022
Sábado de la 2a semana de Pascua
En la travesía del lago el viento arrecia y el mar se encrespa, Jesús se acerca a la barca y los discípulos se asustan… En la primera comunidad aparece un conflicto entre los discípulos de lengua griega y los de lengua hebrea… La vida no es una autopista sin curvas, sino una carretera de montaña, por momentos difícil… Y los roces, los conflictos, las crisis… no son un fracaso, sino una oportunidad. Oportunidad de abajarnos para ser más humildes; oportunidad de elevar nuestra oración para descansar nuestra vida, no en nosotros mismos, sino en Dios; oportunidad de crecer en el amor, no por lo que los otros nos aportan, sino por lo que ellos son: hijos de Dios, como nosotros, por los que el Señor ha tenido misericordia y por los que ha dado su vida… «Que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros como lo esperamos (y necesitamos) de Ti».

VIERNES 29.04.2022
Viernes de la 2a semana de Pascua

y Santa Catalina de Siena, patrona de Europa.
Las autoridades judías se enfrentan a un fenómeno que les desborda: la, para ellos, secta de los seguidores de Cristo… Los apóstoles de Jesús se enfrentan a una situación ante la que no saben qué hacer: el hambre de aquella multitud que les sigue… Y nosotros también nos encontramos, muchas veces en la vida, en situaciones que nos sobrepasan o nos desbordan. Gamaliel nos deja hoy una invitación a poner nuestra confianza en Dios: «Si su idea y su actividad son cosa de hombres, se disolverá; pero, si es cosa de Dios, no lograréis destruirlos, y os expondríais a luchar contra Dios». Y Jesús nos invita a no cruzarnos de brazos, aunque sea poco lo que nosotros podamos hacer… hagámoslo poniéndolo en sus manos para que él lo bendiga y multiplique. Hoy la Iglesia celebra a una mujer que nos da ejemplo de esto: a santa Catalina de Siena, quien en la sociedad del s. XIV se enfrentó a una situación eclesial difícil con decisión y valentía, y no con su sabiduría ni con sus fuerzas, sino guiada por el amor a Dios y a los hombres. Jesús, en el evangelio de hoy, evita la tentación de ser proclamado rey, y se retira a orar solo. Santa Catalina también se retiraba a orar mientras contemplaba la pasión del Señor…
¿Y yo?

JUEVES 28.04.2022
Jueves de la 2a semana de Pascua
Los apóstoles dan testimonio de Jesús ante el Sanedrín judío, y Juan el Bautista, ante sus propios discípulos. No se trata de una filosofía o de una elucubración personal, se trata de una vivencia, de una experiencia, de un encuentro (y amor) que les cambió la vida (por dentro y por fuera), que les abrió a un Horizonte luminoso, de sentido, de plenitud, de futuro… Una teoría puede cambiar, se puede tomar o dejar, pero una experiencia estará siempre ahí, en tu corazón, en tu vida… sobre todo cuando esa experiencia ha descorrido ante ti el velo de “vida eterna”…

MIÉRCOLES 27.04.2022
Miércoles de la 2a semana de Pascua
«Tanto amó Dios al mundo…». Lo hemos “visualizado” y celebrado en los días del Triduo Pascual. Y este misterio de Amor está ahí para que sea la luz que alumbre nuestros pasos y nuestra vida en todo momento. ¡Vivir del Amor de Dios!, como los apóstoles… y dejarnos liberar por él, también como ellos. Pero, muchas veces, como las autoridades judías, dejamos de lado el Amor de Dios, para dedicarnos a vivir de otras cosas, de otras devociones, de otras leyes… incluso, del miedo a Dios. El resultado, la violencia… contra uno mismo, contra los otros…

MARTES 26.04.2022
Martes de la 2a semana de Pascua
Para un judío, como Nicodemo, era inconcebible que el Mesías, cuando llegase, muriese en una Cruz… Pero así ocurriría: «el Hijo del hombre tiene que ser elevado…». Y es que las ideas que nosotros tenemos de Dios quedan desbordadas y superadas por la propia realidad y manifestación de Dios, del Dios del Amor. Por esto Jesús urge a Nicodemo a “nacer de nuevo”, es decir, a dejarse recrear por el Espíritu. Es ese mismo Espíritu de Jesucristo resucitado el que va forjando las primeras comunidades cristianas: «con un solo corazón… —entre ellos no había necesitados…—»; y el que suscitará santos y apóstoles a lo largo de la historia, como este generoso Bernabé que acompañará a Pablo en alguno de sus viajes apostólicos. Y es ese mismo Espíritu el que nosotros, creyentes, y la propia Iglesia necesita pedir constantemente para dejarnos renacer por Él, en medio de una sociedad y una Iglesia en las que tantas “tradiciones” se nos desmoronan.

LUNES 25.04.2022
Fiesta de san Marcos, evangelista
1Pe 5, 5b-14; Sal 88, 2-3. 6-7. 16-17; Mc 16, 15-20
Final de la primera carta del apóstol Pedro que se recoge en la primera lectura de hoy por dos razones, la primera porque en la despedida de la carta se cita a Marcos, “mi hijo”, y segunda, porque, según la tradición, fue Marcos el que, recogiendo la predicación de Pedro en Roma, escribió el evangelio que lleva su nombre. En cualquier caso, este fragmento nos deja tres invitaciones que hoy pedimos, por intercesión de san Marcos, que se realicen en nosotros: 1) A revestirnos de humildad. 2) A descargar en Dios todos nuestros agobios. y 3) A permanecer en sobriedad de vida y vigilantes. Y en el evangelio, también otro final: el de Marcos, y en él, la misión que Jesús dejó a los Once antes de subir al cielo. Gracias a este mandato y al “poder” que le acompaña, y a personas que. como Marcos, lo consignaron por escrito, el evangelio ha llegado a nosotros. Demos gracias a Dios en este día por esta gracia, por esta luz, por esta fuerza, por esta esperanza…

DOMINGO 24.04.2022
2° domingo de Pascua, ciclo C
Los discípulos de Jesús habían apostado por Él y su proyecto (al menos, tal y como ellos lo habían entendido) y habían fracasado: sentimiento de fracaso, de desilusión y, seguramente, también de culpabilidad porque, cobardemente, en las horas amargas de la pasión, le habían abandonado. Quizá también nosotros, en un momento u otro de la vida, pasamos por momentos así. Momentos que nos pueden hundir para siempre, pero momentos que son también una oportunidad: la de abrirnos en la fe al único “que tiene en sus manos las llaves de la historia” y de nuestra vida. Él nos regala su Paz, como se la regaló a sus discípulos, y nos hace bienaventurados porque “sin haber visto hemos creído”. Renovemos hoy en Él nuestra fe, repitiendo muchas veces: «Señor mío y Dios mío».

SÁBADO 23.04.2022
Sábado de la Octava de Pascua
Las lecturas de este sábado tienen un rasgo en común: el de la incredulidad ante el anuncio de los testigos de Cristo resucitado. Y esta dificultad, que se ha mantenido a lo largo de la historia, hoy se acrecienta porque hemos convertido la explicación científica en uno de los dioses de nuestra cultura occidental. Evidentemente, la Resurrección del Señor escapa a nuestras teorías y aparatos científicos, porque trasciende la Historia, aunque la afecte. Y es verdad que no tenemos acceso a la Resurrección misma del Señor, pero sí a la Vida y el Amor que brotan de ella y que se manifiesta en el mundo a través de los testigos de la fe. María Magdalena pasa de la tristeza al gozo; los apóstoles, de la incredulidad y cobardía, a la fe y a la valentía… ¡Y cuantos testigos-santos han entregado su vida y sus bienes por la causa del evangelio convirtiéndose en heraldos del evangelio “hasta los confines de la tierra”! Fijémonos en ellos, no en teorías más o menos científicas o filosóficas, y, sobre todo, pidamos la gracia de abrir nuestro corazón y nuestra vida para convertirnos nosotros mismos en testigos del Señor Resucitado. Amén.

VIERNES 22.04.2022
Viernes de la Octava de Pascua
Lo había anunciado Jesús y así se cumplirá: «A mí me han perseguido, a vosotros os perseguirán». El camino de Jesús es el camino de la humildad, y ser humildes nos cuesta a todos, pero sobre todo a quienes ostentan cargos del tipo que sea, también en la Iglesia. Pero sin esa necesaria humildad la labor pastoral se hace infecunda: salimos a “pescar”, echamos las redes (a veces, incluso, demasiado sofisticadas), pero las recogemos vacías. También hoy nosotros, como los apóstoles, necesitamos ponernos a la escucha del Señor, aunque no sea fácil reconocerle, y dejarnos alimentar por él… para volver a “llenar las redes”.

JUEVES 21.04.2022
Jueves de la Octava de Pascua
Nos aterrorizamos ante algo desconocido que nos sobrepasa, pero también cuando nos encontramos ante quien somos culpables y nos puede condenar. La reacción de los discípulos de Jesús ante la presencia del resucitado, que nos dice hoy el evangelio «estaban aterrorizados y llenos de miedo», participa de estas dos cosas. Por un lado, está la inefabilidad del misterio ante el que se encuentran, y por otro está su sentimiento de culpa por no haber hecho más por el Maestro, por haber sido cobardes. Pero Jesús insiste en darles su Paz, y en recordarles que «así estaba escrito», y les «abre el entendimiento». También nosotros necesitamos pedir hoy (y siempre) que el Señor nos abra el entendimiento y el corazón para que comprendamos y vivamos de la inefabilidad del misterio de Amor que es su resurrección (y con ella la nuestra, ¡pobres pecadores, amados, perdonados…!).

MIÉRCOLES 20.04.2022
Miércoles de la Octava de Pascua
Camino de Emaús, camino del desencanto, de los sueños no cumplidos… O, quizá mejor, de los sueños cumplidos, pero por caminos que no son los nuestros sino los de Dios… ¿Quién podría pensar que el “fracaso” de Jesús no era un fracaso sino un triunfo, el triunfo del Amor y de la Vida? Discípulos de Emaús somos todos. Discípulos necesitados, como ellos, de que el Señor nos instruya y nos abra el corazón para mirar la vida con Sus ojos y no con los nuestros (necios y torpes)… La hospitalidad (caridad), la Fracción del Pan (Eucaristía), y la vuelta a la Comunidad (Iglesia), son las “puertas” que nos abren el corazón y la vida a la Luz de Jesucristo Resucitado…

MARTES 19.04.2022
Martes de la Octava de Pascua
María llora desconsolada junto al sepulcro de su amado Jesús, como también a nosotros nos ha tocado o nos tocará llorar en la vida. Y, atrapada por el dolor, María no es capaz de reconocer al mismo Señor que está junto a ella y que lleva ya sobre él todo el dolor del mundo… transfigurado. También el de María… y el nuestro. Sólo cuando Jesús pronuncia su nombre, «María», se abre su corazón y reconoce al Señor. Podemos imaginar lo que fue para aquella mujer, de la que el Señor había «expulsado siete demonios», el que Jesús, desde que se cruzó en su vida, la llamase por su nombre… ¡cuánta luz, cuánto sentido, cuánta ilusión, cuánto amor… qué vida transformada! Y, quizá, de aquí surge el que debiera ser el primer punto de todo plan pastoral: “Pronunciar, llamar al otro por su nombre… y hacerlo con amor”. Es el primer “sacramento”.

LUNES 18.04.2022
Lunes de la Octava de Pascua
Hoy el Señor, a través de las mujeres “testigos” de su Vida Resucitada, nos invita a «volver a Galilea». Es decir, a la tierra de nuestros primeros pasos tras Jesús, a nuestras ilusiones, esperanzas y amores primeros, porque «allí le veremos», porque «allí» le experimentaremos como Resucitado.
Con el paso de los años, muchas veces, ante las expectativas no cumplidas y los amores no logrados, el corazón se nos endurece, y nos volvemos escépticos, amargos, críticos…  e, incluso, peor, cínicos. Nos hemos olvidado de que nuestros primeras ilusiones, amores, esperanzas… son la verdad más auténtica de nuestra vida, porque nos “hablan” de esa Tierra Nueva que es Cristo Resucitado, nuestro anhelo más profundo y auténtico, quien, él mismo, pasó antes por la oscuridad y el fracaso…

DOMINGO 17.04.2022
Domingo de Pascua, ciclo C
«Nosotros somos testigos», son las palabras de Pedro en la primera lectura. «Testigos» porque Jesús Resucitado se «ha dejado “ver” a los que Él había designado». Testigos arrebatados por la “locura” de Cristo Resucitado: en Él la Vida ha vencido a la muerte, el Amor al odio, la Valentía a la cobardía… En verdad, «este es el día en que actuó, no los hombres, sino el Señor…». También nosotros, que en el bautismo fuimos edificados, como Iglesia, sobre el cimiento de los apóstoles, hemos sido constituidos testigos de la Resurrección, aunque algunas veces (o muchas) los signos de muerte y oscuridades que se dan en nuestra vida y en nuestro mundo nos hagan difícil creer. Que la gracia de esta Pascua nos haga testigos que buscan los “bienes del Cielo”: el servicio, la bondad, la justicia, la generosidad, la paciencia, el respeto, la paz…

SÁBADO 16.04.2022
Sábado Santo
Un gran silencio envuelve la tierra; un gran silencio y una gran soledad. Un gran silencio, porque el Rey duerme. La tierra está temerosa y sobrecogida, porque Dios se ha dormido en la carne y ha despertado a los que dormían desde antiguo. Dios ha muerto en la carne y ha puesto en conmoción al abismo. Va a buscar a nuestro primer padre como si éste fuera la oveja perdida. Quiere visitar a los que viven en tinieblas y en sombra de muerte. Él, que es al mismo tiempo Dios e Hijo de Dios, va a librar de sus prisiones y de sus dolores a Adán y a Eva. El Señor, teniendo en sus manos las armas vencedoras de la cruz, se acerca a ellos. Al verlo, nuestro primer padre Adán, asombrado por tan gran acontecimiento, exclama y dice a todos: «Mi Señor esté con todos». Y Cristo, respondiendo, dice a Adán: «Y con tu espíritu». Y, tomándolo por la mano, lo levanta, diciéndole: «Despierta, tú que duermes, levántate de entre los muertos, y Cristo será tu luz». (De la homilía de un autor antiguo).

VIERNES 15.04.2022
Viernes Santo
Muchas veces nos comportamos ante Dios como niños pequeños que se conducen con miedo a ser juzgados. Quizá sea la herida de la “justicia” del mundo o de una educación demasiado severa. Pero Dios no actúa así, Él carga con las heridas que le infligimos, nos mira con Amor, y las transforma en camino de Vida y Resurrección: «Oh Cruz, te adoramos, oh Cruz, te bendecimos, de ti viene la Vida, de ti la Salvación», y hoy ante esa Pasión y Cruz del Señor, queremos decir: «¡Gracias!». Por eso también en el fracaso, en el dolor, en el sufrimiento… siempre hay Alguien que camina junto a nosotros y lleva nuestros dolores… si le dejamos. ¡Gracias!

JUEVES 14.04.2022
Jueves Santo
La celebración del Jueves Santo nos recuerda que en la Eucaristía “está” la Pasión, Muerte y resurrección del Señor. Que ella es, por tanto, el centro de la Historia y del Cosmos. Que en la Eucaristía está el perdón de nuestros pecados y nuestra salvación. Que la Eucaristía es la fuente de Agua Viva que desde el corazón del misterio trinitario se derrama en mi corazón y en el mundo. Nos empeñaremos en buscar la felicidad por mil caminos, pero no sólo no la alcanzaremos, sino que nos alejaremos de aquella Felicidad que el Señor nos ofrece escondida, ¡pero viva!, en el misterio eucarístico. Cantemos, pues, al (y vivamos del) Amor de los Amores…

MIÉRCOLES 13.04.2022
Miércoles Santo
La traición de Judas me habla hoy de mis propias traiciones. De esos momentos en los que, replegado sobre mí mismo, no me oigo más que a mí. De esos momentos en los que, olvidándome del dolor del mundo, sólo escucho mis propios dolores. Por el contrario, el camino de Jesús es el camino del Siervo. Su centro no está en él, sino en Dios y en los sufrientes, para «escuchar», para «decir una palabra de aliento al abatido», para no sentir su propio dolor… La sociedad actual nos repliega sobre nosotros mismos, y se nos enferma la mente y el corazón, como a Judas. Jesús, en la Semana Santa, nos recuerda que “saliendo” de uno mismo es como la vida florece…

MARTES 12.04.2022
Martes Santo
«En vano me he cansado, en viento y en nada he gastado mis fuerzas». Experiencia de fracaso a la que tarde o temprano se enfrenta todo ser humano. También Jesús, quien no sólo experimenta el rechazo de las autoridades judías, sino que también vive la traición, la negación y el abandono dentro de su grupo de apóstoles. Pero Jesús no huye, no se enfada… deja que la historia siga su curso: «Lo que has de hacer, hazlo pronto». Porque Jesús sabe/vive que «en realidad el Señor defendía su causa, su recompensa la custodiaba Dios», y que su vida, en medio del aparente fracaso, estaba llena de sentido: «Te hago luz de las naciones, para que mi salvación alcance hasta el confín de la tierra». El sentido de la vida no lo fabricamos nosotros. Es don, gracia, regalo… Y, por ello, las experiencias de fracaso, en las que nosotros tenemos que “disminuir”, son oportunidad para que Dios crezca en nosotros, oportunidad de abrirnos al verdadero Sentido de la vida…

LUNES 11.04.2022
Lunes Santo
Misión del Siervo, misión de Jesús… Gesto de amor gratuito, generoso, desbordante de Dios, en Jesucristo, a la humanidad. María con su derroche de perfume sobre los pies de Jesús lo visibiliza. Y el llenarse toda la casa con el olor de aquel caro perfume, visibiliza también la gracia que brotará de la Pascua de Jesús y que llenará el Universo entero. Al mismo tiempo, el gesto de María nos invita a la gratitud: gratitud a Dios por entregarnos a su Hijo, gratitud a Jesucristo por su entrega, gratitud a la Iglesia (y al Espíritu) porque, de generación en generación, nos ha sido transmitido este Misterio… Misterio de nuestra salvación. En esta Semana Santa, ¡dejemos hablar al corazón!

DOMINGO 10.04.2022
Domingo de Ramos, ciclo C
¿Te has preguntado alguna vez por qué todo el mal y todo el dolor del mundo no han acabado por aplastar a la Humanidad? ¿Por qué seguimos adelante con esperanza, a pesar de todo? Pues porque el Amor, aunque es rechazado y maltratado, no lo podemos aplastar, al contrario, se hace más Amor: su fuerza no está en el hombre, sino en Dios. Es gracia. Así, el abajamiento-fracaso de Jesucristo a los ojos de los hombres es “subida” a los ojos de Dios: la “subida” y el triunfo del Amor de Dios. Y así también, el que “sube” a los ojos del mundo sólo llena su vida de “muletas” en las que apoyarse. Muletas que le hacen autosuficiente, y que acaban por esclavizarle. Pero el que se deja “abajar” (por amor) queda “desnudo” y ligero, capaz de emprender el Vuelo de la Eternidad al que Dios nos llama a todos. Jesucristo nos precedió y nos dio ejemplo. La Semana Santa no termina el Viernes Santo sino el Domingo de Resurrección. ¡Bendito –pues– el que viene en el nombre del Señor!

SÁBADO 09.04.2022
Quinta semana de Cuaresma
Oveja dispersa soy entre los reclamos y “salvadores” del mundo; oveja que necesita ser rescatada y congregada para beber de la única fuente de Agua Viva. Pero, al mismo tiempo, oveja que antepone, aunque sea bienintencionadamente, tantas otras cosas y criterios a ese dejarse rescatar, amar, salvar… Y, así, hoy, como en tiempos de Caifás, Jesús sigue siendo condenado y entregado a la muerte… Muerte que, en la grandeza del Amor de Dios y de su misericordia por nosotros se convertirá, no en castigo, sino en Salvación… ¡Si de verdad comprendiéramos la revolución que significa este misterio!

VIERNES 08.04.2022
Quinta semana de Cuaresma
Jeremías perseguido nos evoca, en este día, a tantos cristianos perseguidos en el mundo actual, simplemente por el hecho de ser cristianos, y ante cuyo dolor, nosotros, muchas veces, nos mostramos indiferentes. Su sangre derramada, como la de Cristo, se convierte, por Él, en gracia y salvación para el mundo. ¡Miseria del corazón del hombre! ¡Grandeza del corazón de Dios! En la Semana Santa celebramos este misterio ante el que, postrados y agradecidos, sólo podemos decir: Jesús, Hijo del Dios vivo, ten piedad y misericordia de mí, pobre pecador, que “tira piedras” en lugar de cantar tus alabanzas.

JUEVES 07.04.2022
Quinta semana de Cuaresma
Abrán se abre en la fe a un futuro que no está en sus manos, sino en las manos de Dios, y esto le cambia la vida… y el nombre: Abrahán. Los judíos tienen también la oportunidad de abrirse, en Jesucristo, a ese futuro (vida, dimensión… gracia) que no está en sus conceptos y forma de entender la fe… pero se cierran sobre ellos mismos y quieren matar a quien les rompe su “seguridad”, a Jesús. Así nos ocurre (o nos puede ocurrir) también a nosotros: que preferimos la “seguridad” de ciertas prácticas religiosas, al “riesgo” del encuentro personal (y desestabilizante) con el Dios de Jesucristo… que siempre nos pide más confianza, más amor, más entrega… menos “seguridad” y menos comodidad.

MIÉRCOLES 06.04.2022
Quinta semana de Cuaresma
Jesús discute con los judíos, y frente a la Vida que aquél ofrece estos oponen conceptos. Necesitamos los conceptos, pero estos nunca pueden agotar el misterio de Dios y, por tanto, de Jesús. Los tres jóvenes arrojados en el horno lo saben… y lo viven. Por ello, confiando en el poder de Dios, —los libre o no los libre de la muerte, porque Él tiene designios que nosotros no conocemos—, se entregan al verdugo… Su fe y entrega será la “salvación” del propio rey, convirtiéndose así en figura de Jesucristo, que entregará su vida hasta la muerte por nuestra Salvación. No dejemos la Semana Santa reducida a imágenes o conceptos, pidamos la gracia de los misterios que en estos días celebramos se hagan vida (y testimonio) en nosotros…

MARTES 05.04.2022
Quinta semana de Cuaresma
El misterioso episodio del estandarte que Moisés levanta en el desierto con la serpiente abrasadora evoca para los cristianos el misterio de Jesucristo quien, elevado sobre la Cruz, no será, como sería en pura lógica humana, causa de condenación, sino de salvación para cuantos crean en él. Estamos, no ante un acertijo abarcable por las lógicas o filosofías de “aquí abajo”, sino ante la inmensidad del misterio de Dios y, por tanto, ante la inmensidad de un misterio que sólo una fe empapada en el amor puede vislumbrar. Pidamos estos “ojos” de la fe para celebrar el misterio de la Pascua del Señor…

LUNES 04.04.2022
Quinta semana de Cuaresma
Cuando la mirada del amor (?) es una mirada que se deja llevar por el deseo y cosifica a la persona amada (?), el amor deja de ser amor para transformarse en violencia que mata. Cuando la mirada de la fe es una mirada interesada que quiere encajar al Señor en sus prejuicios y teorías, domesticándole, la fe deja de ser fe para transformarse en fanatismo que mata. Sin embargo solemos insistir en llamar amor y fe a las “obras de nuestras manos”… La verdadera fe como el verdadero amor convergen hacia la persona de quien es la verdadera Luz del mundo, por tanto, de Aquel que, en los próximos días, en la celebración de su Pasión, Muerte y Resurrección nos muestra el camino del Amor y de la Fe. Pidamos la gracia de abrir nuestra mirada a este misterio que nos sobrepasa… y nos salva. Y dejémonos sobrepasar por él… con confianza, con humildad, con gratitud…

DOMINGO 3.04.2022
Quinto de Cuaresma, ciclo C
En la oscuridad de los judíos desterrados en Babilonia aparece la luz de una promesa, de una esperanza, de “algo nuevo”, de un regreso a su tierra… También la adúltera del evangelio de hoy está sumida en las tinieblas: la vergüenza de haber sido sorprendida en adulterio, las voces desafiantes de los hombres que la llevan a matar, la angustia de la horrible muerte que la aguarda… y, de pronto, “algo nuevo” surge en su camino: un hombre que no grita, que calla y escribe en el suelo… Jesús que derrama su misericordia y su perdón sobre ella. Y todo ello como un anticipo y reflejo de la gran Luz que se derramará sobre el mundo y la historia en la Pascua del Señor. Pablo, en el camino de Damasco, experimentó este misterio de luz y gracia irrumpiendo en la oscuridad de su fanatismo legalista… y su vida quedó transformada. Por eso puede escribir desde la cárcel: “Todo lo considero pérdida comparado con la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor…”. ¿Puedo decir yo lo mismo que Pablo?

SÁBADO 02.04.2022
Cuarta semana de Cuaresma
Jeremías perseguido y, al mismo tiempo, confiando en la justicia de Dios, es figura de Jesucristo. Sin embargo, entre ellos, hay una gran diferencia: Jeremías busca la venganza de sus enemigos (estamos en el A.T.), mientras que Jesús pedirá el perdón de los suyos. El evangelio de hoy nos muestra la ceguera (¿soberbia?) con la que los enemigos de Jesús buscan su muerte, y al contemplar la escena me doy cuenta que mi corazón se parece más al de Jeremías que al de Jesús. El Amor, tal y como en Jesús se nos revela, será siempre para nosotros una meta a alcanzar, una gracia a pedir… y un subir con Jesús el Calvario de nuestro propio despojamiento.

VIERNES 01.04.2022
Cuarta semana de Cuaresma
El bien y las personas buenas nos molestan en la medida que nosotros hemos decidido tomar otro camino: el camino del no-Bien, es decir, del mal. Y nos molestan porque nos recuerdan cuál es nuestro origen, nuestro ser y nuestro destino, todo eso que en nuestra maldad no queremos ver ni vivir. Y, encima, nos montamos un andamiaje ideológico para justificarnos… y para justificar nuestra “agresión” al bien y a los buenos. Los justos perseguidos durante la persecución griega (cf. 1ª lectura), y todas las persecuciones, y el acoso contra Jesús, el Justo por excelencia (cf. evangelio), nos lo recuerdan. Y hoy, esta persecución, de forma más sutil pero no menos real, continúa en nombre de la libertad, en nombre del progreso… y cada vez hay más infelicidad, más vacío existencial… más suicidios.

JUEVES 31.03.2022
Cuarta semana de Cuaresma
El ser humano quiere tener atrapado a Dios (aunque ese Dios sea el No-dios) y usar de él como de una varita mágica a su servicio, y así se fabrica sus ídolos. El relato de la primera lectura de este día nos recuerda que esos ídolos no sólo son los del mundo, sino que también nuestra forma de vivir la fe puede ser idolátrica. Paradójicamente, cuando Dios se hace visible, muchos no le quieren reconocer, como ocurrió y ocurre con Jesús. Así que, como Moisés intercedió por su pueblo, así necesitamos seguir nosotros orando por nosotros mismos y por el mundo: que no nos abandonemos en manos de los ídolos (que siempre son ídolos de muerte), que dejemos que nuestra fe se purifique constantemente, que la lectura de las Sagradas Escrituras sea una lectura verdadera… que vivamos de la confianza en Dios y no de la “seguridad” (?) de los ídolos…

MIÉRCOLES 30.03.2022
Cuarta semana de Cuaresma
“Alegría del retorno” titula la Biblia de Jerusalén el pasaje de Isaías en la primera lectura de hoy. Alegría por la vuelta a Jerusalén después del Destierro como parábola de la ternura y de la fidelidad de Dios al pecador y a la humanidad en la hora de su muerte: «¿Puede una madre olvidar al niño que amamanta, no tener compasión del hijo de sus entrañas? Pues, aunque ella se olvidara, yo no te olvidaré.» Ternura y fidelidad que se nos ha manifestado en el Hijo en su encarnación y llegará a su máxima expresión en su Pascua. ¡Pero qué difícil aceptar este amor humilde de Dios! Quizá porque Su humildad está pidiendo la nuestra y ¡cuánto nos cuesta ser humildes! Es decir, no llevar cuentas del mal, no hacer acepción de personas, servir con un corazón grande y generoso…

MARTES 29.03.2022
Cuarta semana de Cuaresma
Peor que la parálisis del cuerpo es la parálisis del alma, y el alma la tienen paralizada, no sólo los que, en medio del mundo, viven de espaldas a Cristo, fuente del agua de la vida, sino también quienes en nombre de Dios hacen de la religión una ley, una intransigencia, un poder… Ellos se pierden la belleza de la vida que vence la enfermedad, pero, sobre todo, de la Vida que borra el pecado y transforma la existencia… “Venid a ver las obras del Señor, las maravillas que hace en la tierra”, nos dice el salmo responsorial de hoy. Y la más grande de las maravillas, la Pascua del Señor. Que nos dejemos sanar por ella.

LUNES 28.03.2022
Cuarta semana de Cuaresma
El funcionario real le pide a Jesús que baje a curar a su hijo antes de que se muera. Hay una explicación geográfica para este “bajar”: Caná está más alta que Cafarnaún, que está a la orilla del mar de Galilea. Pero sin darse cuenta, el funcionario está haciendo también una confesión de fe: el del abajamiento del Hijo de Dios por nuestra salvación. Por eso, cuando el evangelista nos dice que el funcionario “iba ya bajando” cuando vinieron a su encuentro los criados para decirle que su hijo estaba curado, nos está hablando de un proceso interior que vive este hombre. De la grandeza humana (?) de ser “funcionario real”, a la humildad de quien no lo puede todo y tiene que “humillarse” ante Jesús. También nosotros tenemos que aprender el difícil camino –abajamiento— de la humildad si queremos participar del cielo nuevo y la tierra nueva que el Señor con su abajamiento nos ha regalado… de su Vida.

DOMINGO 27.03.2022
Cuarto de Cuaresma, ciclo C
Jesús narra la parábola del “Hijo Pródigo” para justificar su conducta con “publicanos y pecadores”. Por tanto, nos habla esta parábola de cómo es el corazón (inabarcable por nosotros) de Dios y de cómo es, en contraste, el corazón humano. El corazón del hijo menor es egoísta, tanto cuando se va cuando regresa busca su interés. Sólo piensa en sí mismo, en ningún momento en el dolor o en la alegría del padre o del resto de la familia. Y el hijo mayor, lo mismo. Aunque ha permanecido en casa toda su vida, su corazón está lejos del corazón del padre. Su buena conducta no es vivida en gratitud, gratuidad y generosidad sino como un derecho por su parte y una obligación por parte del padre. El corazón del padre, por el contrario, es respetuoso (con lo que seguramente no está de acuerdo), es generoso (a pesar del mal uso que se va a dar a sus bienes), no lleva cuenta del mal y hace prevalecer su amor de padre/madre por encima de cualquier otra consideración. Su misericordia nos sobrepasa de tal modo que, todos, sólo podemos decir en este día: «Proclamad conmigo la grandeza del Señor, ensalcemos juntos su nombre… Contempladlo, y quedaréis radiantes, vuestro rostro no se avergonzará…»

SÁBADO 26.03.2022
Tercera semana de Cuaresma
Pontifica el político desde su ideología, pontifica el dictador con la fuerza de sus armas, pontifica el aficionado al futbol desde su pasión… y pontifica la persona religiosa desde sus esquemas. Ideologías, armas, pasiones, esquemas… ídolos de barro que, tarde o temprano, acabarán por derrumbarse y atraparnos. Vivimos tiempos que son de “derrumbe” y, por tanto, tiempos que son de «angustia» pero, al mismo tiempo, tiempos que son una oportunidad para «volver al Señor»… no con la autosuficiencia del fariseo, sino con la humildad del publicano.

VIERNES 25.03.2022
La Anunciación del Señor
Virgen de la Anunciación, en el día en que tu hijo e Hijo de Dios comenzó su andadura en el mundo, en tu vientre, unidos al papa Francisco y a toda la Iglesia, te suplicamos: «Acoge, oh Madre, nuestra súplica. Tú, estrella del mar, no nos dejes naufragar en la tormenta de la guerra. Tú, arca de la nueva alianza, inspira proyectos y caminos de reconciliación. Tú, “tierra del Cielo”, vuelve a traer la armonía de Dios al mundo. Extingue el odio, aplaca la venganza, enséñanos a perdonar. Líbranos de la guerra, preserva al mundo de la amenaza nuclear. Reina del Rosario, despierta en nosotros la necesidad de orar y de amar. Reina de la familia humana, muestra a los pueblos la senda de la fraternidad. Reina de la paz, obtén para el mundo la paz.»

JUEVES 24.03.2022
Tercera semana de Cuaresma
«Esta es la gente que no escuchó la voz del Señor, su Dios, y no quiso escarmentar. Ha desaparecido la sinceridad, se la han arrancado de la boca”.» ¿Sólo Israel? No, todos. Y podemos “no escuchar su voz” a la “brava”, dejándonos llevar por los impulsos, los instintos, las seducciones del mundo… Pero hay otra forma peor, la de las construcciones mentales (¿teologías? ¿piedades?) que nos hacemos para justificarnos, para seguir encerrados en nosotros mismos, para no “escuchar” al Señor… y, encima, justificarnos. Señor, danos la gracia de estar siempre contigo, de no desparramar…

MIÉRCOLES 30.03.2022
Cuarta semana de Cuaresma
“Alegría del retorno” titula la Biblia de Jerusalén el pasaje de Isaías en la primera lectura de hoy. Alegría por la vuelta a Jerusalén después del Destierro como parábola de la ternura y de la fidelidad de Dios al pecador y a la humanidad en la hora de su muerte: «¿Puede una madre olvidar al niño que amamanta, no tener compasión del hijo de sus entrañas? Pues, aunque ella se olvidara, yo no te olvidaré.» Ternura y fidelidad que se nos ha manifestado en el Hijo en su encarnación y llegará a su máxima expresión en su Pascua. ¡Pero qué difícil aceptar este amor humilde de Dios! Quizá porque Su humildad está pidiendo la nuestra y ¡cuánto nos cuesta ser humildes! Es decir, no llevar cuentas del mal, no hacer acepción de personas, servir con un corazón grande y generoso…

JUEVES 24.03.2022
Tercera semana de Cuaresma
«Esta es la gente que no escuchó la voz del Señor, su Dios, y no quiso escarmentar. Ha desaparecido la sinceridad, se la han arrancado de la boca”.» ¿Sólo Israel? No, todos. Y podemos “no escuchar su voz” a la “brava”, dejándonos llevar por los impulsos, los instintos, las seducciones del mundo… Pero hay otra forma peor, la de las construcciones mentales (¿teologías?) que nos hacemos para justificarnos, para seguir encerrados en nosotros mismos, para no “escuchar” al Señor… y, encima, justificarnos. Señor, danos la gracia de estar siempre contigo, de no desparramar…

MIÉRCOLES 23.03.2022
Tercera semana de Cuaresma
Camino de la fe, camino del amor… del amor a Dios y al prójimo… como gracia, como horizonte, como humilde empeño (con caídas, seguramente, pero volverse a levantar)… Pero si olvidamos el amor, ¿en qué queda la vida de fe? En normas que se hacen rutina y acaban aplastando, en corazones intransigentes o, por el contrario, que se abandonan… y justifican. Danos, Señor, un corazón capaz de «escucharte»… y haz de esa nuestra escucha, una escuela de amor.

MARTES 22.03.2022
Tercera semana de Cuaresma
Durante toda nuestra vida, pero especialmente en este tiempo de Cuaresma, cada uno de nosotros necesitamos pedir (y agradecer) continuamente la misericordia de Dios. Si Dios no fuese misericordioso, simplemente, no existiríamos. Y, en ese pedir la misericordia, hay una dimensión que no podemos olvidar: la de que la misericordia de Dios se haga en nosotros misericordia para los demás. Porque si no es así, es como quien recibe un regalo maravilloso y costosísimo, pero no lo desenvuelve. En este pedir la misericordia de Dios, la oración de Azarías, en la primera lectura, nos puede servir hoy de modelo. Recémosla y que la misericordia de Dios recibida se manifieste en nosotros como comprensión, compasión, paciencia, ternura, perdón… hacia los demás.

LUNES 21.03.2022
Tercera semana de Cuaresma
Naamán que se ha mostrado dispuesto a “recorrer los caminos” que le llevan a su sanación, se va a topar con la dificultad mayor: la de aceptar que las cosas no van a suceder como él las había imaginado. Podíamos decir, la dificultad de aceptar que los caminos de Dios no son sus caminos. Afortunadamente para él, él que se había mostrado humilde al escuchar el consejo de una sirviente de su mujer, se vuelve ahora a mostrar humilde al aceptar el consejo de sus servidores. La humildad es tesoro precioso en el camino de la fe y de la salvación. Justo la humildad que les falta a los paisanos de Jesús cuando, en la sinagoga, éste les presenta a dos paganos, uno de ellos Naamán, como modelo del actuar de Dios y de la acogida de su salvación. Vuelven a resonar aquí las palabras de san Pablo en la liturgia de ayer domingo: «el que se crea seguro, cuídese de no caer». Pidamos la gracia de la humildad…

DOMINGO 20.03.2022
Tercero de Cuaresma, ciclo C
Moisés había conocido los dioses egipcios pues se había educado, como príncipe egipcio, en medio de ellos. Luego conoció a los dioses de su familia política: su suegro Jetró era sacerdote de Madián. Pero el Dios que se le manifiesta en el Horeb es alguien diferente: un Dios compasivo y misericordioso.
Los judíos contemporáneos de Jesús también tenían su imagen de Dios, una imagen que se inclinaba del lado de las “transacciones comerciales”, como hoy sigue teniendo mucha gente que vive bajo la angustia de los castigos de Dios. Jesús invitará a cambiar esa imagen: un Dios paciente, pero, que al mismo tiempo, nos hace responsables de nuestras conductas.
Seguramente que también nosotros necesitamos purificar nuestra propia imagen de Dios, simplemente porque Dios es Dios, siempre infinitamente más grande de lo que de Él podamos imaginar y pensar. Pidamos la gracia de abrir nuestra mente, y sobre todo, nuestro corazón por el lado de la paciencia, de la compasión y de la misericordia… y, ojo, como nos dice hoy san Pablo, “el que se crea seguro, cuídese de no caer”.

SÁBADO 19.03.2022
s. San José, esposo de la Virgen María
En su mensaje de cuaresma de este año, nos dice el papa Francisco que «frente a la amarga desilusión por tantos sueños rotos, frente a la preocupación por los retos que nos conciernen, frente al desaliento por la pobreza de nuestros medios, tenemos la tentación de encerrarnos en el propio egoísmo individualista y refugiarnos en la indiferencia ante el sufrimiento de los demás». Y, por ello, nos anima «a poner nuestra fe y nuestra esperanza en el Señor, porque sólo con los ojos fijos en Cristo resucitado podemos acoger la exhortación del Apóstol Pablo: “No nos cansemos de hacer el bien”». San José, el hombre de los sueños rotos, al menos, puestos patas arriba, pero que perseveró en la fe y no se cansó de hacer el bien… a María, a Jesús… a cuantos le invocamos a lo largo de los siglos. Invoquémosle especialmente en estos momentos que son de oscuridad…

VIERNES 18.03.2022
Segunda semana de Cuaresma
¿Quién le iba a decir a los hermanos de José que, precisamente aquél a quienes ellos odiaban (y se deshicieron de él) se convertiría con el paso de los años, en el instrumento de su salvación? José es figura de Jesús, quien, rechazado por sumos sacerdotes, escribas y fariseos, y por nosotros, hombres y mujeres de todos los tiempos, pobres pecadores, camina hacia su pasión y muerte… por nuestra salvación. Con frecuencia metemos el misterio de Jesucristo en moldes de nuestra justicia humana, de premios y castigos… Pero el misterio del Señor es algo infinitamente más grande, es misterio de amor y de misericordia desbordante que no podemos comprender, sólo acoger… Infinitamente más grande y “exigente” que el mero cumplimiento de unas normas o preceptos morales…

JUEVES 17.03.2022
Segunda semana de Cuaresma
Por las mismas aguas que navegan yates y embarcaciones de un lujo increíble, cruzan las pateras con su carga de esperanza, de dolor… y, muchas veces, de tragedia. La sombra del Epulón y de Lázaro se extiende a lo largo de la historia. Europa por sí sola no puede resolver los problemas de toda la humanidad, y, menos, cuando una guerra absurda y cruel se ha cebado sobre su costado oriental. Pero ante toda esta tragedia, a nivel personal, está bien que, en este día, te preguntes: ¿en quién de verdad confías?, ¿sobre quién, de verdad, se estructura y afianza tu vida? La Eternidad no es algo para después de la muerte. La Eternidad empieza hoy para cada uno de nosotros.

MIÉRCOLES 16.03.2022
Segunda semana de Cuaresma
En el camino de Jerusalén, por tercera vez, pocos días antes, Jesús anuncia a sus discípulos su Pasión y Muerte, pero estos, –incluida la madre de Santiago y Juan—, no se enteran, siguen en sus sueños de poder y grandeza. ¿Nos enteramos nosotros que la vida no es para “guardarla”, sino para “darla”? La figura de Jeremías perseguido en la 1ª lectura es figura de Jesucristo entregado. Y, lo más triste en toda esta maquinación contra el profeta (y, en su momento, contra Jesús) es que «no faltará la ley del sacerdote, ni el consejo del sabio, ni el oráculo del profeta», es decir que, los que van de “salvadores y mesías” son precisamente los que cierran el camino a aquél que es y nos ofrece el único Camino, la única Verdad y la única Vida.

MARTES 15.03.2022
Segunda semana de Cuaresma
Existieron en tiempos de Jesús y existen hoy: los eclesiásticos que van de “importantes”, de sabios y entendidos. Estos que van de “importantes” existen en todos los ámbitos de la vida, pero en el caso de la gente de Iglesia es más grave porque tenemos un maestro que nos recuerda que somos hijos y discípulos… y que pasaba las noches en oración, en la “escuela” de la humildad y de la verdadera sabiduría. Detrás de ese querer ser “importantes” se esconden carencias y heridas, o tal vez el pecado o la incoherencia de vida que hoy denuncia Isaías, y que no queremos o no sabemos mirar de frente. Que el Señor nos ilumine, nos fortalezca y nos haga seguir el buen camino.

LUNES 14.03.2022
Segunda semana de Cuaresma
El profeta Daniel escribe en un momento difícil para una comunidad perseguida (por parte del rey griego Antioco IV Epífanes). Intenta transmitirles ánimo y esperanza, y esto no lo hace, —como quizá hubiéramos hecho nosotros—, arremetiendo contra el agresor, sino recordando a sus destinatarios el señorío de Dios sobre la historia: por muy poderosos y sanguinarios o seductores que sean los imperios de este mundo, todos pasaran y llegará el reinado de Dios. Y es también que, al levantar su mirada ante este Dios, Daniel no puede menos de dejar de reconocer su culpa: «Hemos pecado… nos hemos rebelado… no obedecimos…». ¿Cuántos de nosotros, ante la actual situación creada por la guerra en Ucrania (y otras situaciones), haremos nuestra esta oración? Lo fácil es siempre buscar culpables y arremeter contra ellos, ¿pero reconocer que en el mal del mundo todos tenemos parte de culpa? Y junto a esto, como nos dice Jesús en el evangelio, seamos compasivos y misericordiosos, no sólo con las víctimas, sino también con los perseguidores. Llamada e invitación que hoy, en la fiesta de los santos Cirilo y Metodio, patronos de Europa y evangelizadores de los pueblos eslavos, cobra un relieve especial. Que ellos intercedan por nosotros para que volvamos el corazón a Cristo de verdad y reine la paz.

DOMINGO 13.03.2022
Segundo de Cuaresma, ciclo C
En el horizonte de la Vida de Jesús, su Resurrección… pero, antes, su Pasión. Para sostener a sus discípulos en esos difíciles momentos de la Pasión, en lo alto del Tabor, Jesús les hace pregustar su Resurrección… es la Transfiguración.
En el horizonte de la vida de un anciano, una descendencia. En el horizonte de la vida un pastor trashumante, una tierra. Las promesas de Dios a Abrán se salen de la lógica humana. Pero Abrán se fía de Dios… y esta es su grandeza. ¿Lo será la nuestra?
En el horizonte de nuestra vida, la gloria de la Resurrección, pero antes la muerte, (y las “muertes”, en nosotros, de tantos dioses e ídolos que nos avasallan). ¿Nos fiaremos de la promesa de Dios en Jesucristo? ¿Caminaremos como ciudadanos del cielo? ¿O seguiremos aspirando sólo a cosas terrenas?

SÁBADO 12.03.2022
Primera semana de Cuaresma
Después de escuchar un evangelio así, sobre el amor a los enemigos y sobre el Dios que hace salir el sol sobre buenos y malos, ¿cómo se puede seguir diciendo que, una guerra como la de Ucrania, es un castigo de Dios? En todo caso, habrá que decir que esa violencia es la obra de unos hombres que han elegido, no los caminos y la voz de Dios, sino los caminos del endiosamiento y de la soberbia humana… ¡Señor, enséñanos tus caminos y, sobre todo, enséñaselos a quienes tienen en sus manos el poder destructor de las armas!

VIERNES 11.03.2022
Primera semana de Cuaresma
El cristiano no puede vivir “de rentas” sino de la gracia. No de lo que fui o hice, sino de lo que cada día la gracia me da y me pide. No de una fe que se hace ideología, “posesión”, juicio, y acaba matando, sino de una fe que es vida, que me hace salir constantemente de mí mismo, que me da un corazón compasivo y misericordioso, que se hace amor servicio y perdón… “Desde lo hondo a ti grito, Señor,” para que viva así mi fe.

JUEVES 10.03.2022
Primera semana de Cuaresma
Hay momentos de nuestra vida en los que, como la reina Esther, experimentamos una soledad radical: nada ni nadie de los que rodean nos pueden sostener y ayudar. ¡Estamos solos, pobres, indefensos e impotentes en medio del universo! Son momentos en los que uno puede quedar aplastado o, por el contrario, en los que el corazón se abre, en un “grito” desesperado, a Dios: «Señor, no tengo otro defensor que tú». Dejemos atrás todo orgullo y autosuficiencia y pidamos, —como nos invita hoy Jesús en el evangelio—, la gracia de levantar siempre nuestro corazón a Él, especialmente, en las oscuridades de la vida y de la historia.

MIÉRCOLES 9.03.2022
Primera semana de Cuaresma
En cualquier relación humana hay siempre el riesgo de que, con el paso de los años, la relación se rutinice y estanque, perdiendo la frescura del “amor primero”. También ocurre esto en el camino de la fe y, entonces, las llamadas a la conversión, las invitaciones a revisar la propia vida, las oportunidades de crecimiento espiritual, etc. empiezan a ser algo para los “otros” y dejan de ser algo para “mí”. Jesús nos advierte hoy sobre este riesgo y, al ponernos como ejemplo a una reina pagana y a un pueblo pagano, nos recuerda que, muchas veces, tiene que venir uno de “fuera” para valorar lo que ya tenemos “en casa”. Para el creyente, “ese” que siempre tiene que venir de fuera para mantenernos en la frescura del amor primero y en constante actitud de conversión, es el Espíritu Santo. ¡Pidámosle con humildad y constancia!

MARTES 8.03.2022
Primera semana de Cuaresma
Me gusta la oración del mediodía en los Capuchinos durante la Cuaresma: un canto y una meditación-oración breves que dan paso a un largo silencio para que la palabra de Dios pueda germinar en el corazón de cada uno y “no vuelva a Él vacía”. También hoy Jesús en el evangelio nos invita a “no usar muchas palabras” en nuestra oración. Orar no es cuestión de muchas palabras (que acaban por aburrir) sino de la actitud del corazón (y de la vida) que se resume en el Padrenuestro. Busca hoy un rato, reza despacio un Padrenuestro, detenten en cada invocación y piensa lo que acabas de decir con los labios, al tiempo que pides la gracia de que eso que dices germine en tu corazón.

LUNES 7.03.2022
Primera semana de Cuaresma
«Yo soy el Señor»… Yo soy el Señor al que, en definitiva, odias cuando odias; explotas, cuando explotas; humillas, cuando humillas…; dejas hambriento, sediento, desnudo…, cuando no das de comer, cuando no das de beber, cuando no vistes… El antiguo testamento prepara el “terreno”, Jesús lo lleva a plenitud: Dios en el otro, destinatario de mi amor; pero también, Dios en mí, amando, con un amor, una misericordia, un respeto y una entrega imposibles para mis solas fuerzas humanas… “Tus palabras, Señor, son espíritu y vida”.

DOMINGO 6.03.2022
Primero de Cuaresma, ciclo C
Veo las fotos e imagino el dolor de las personas obligadas a dejar sus hogares bajo la amenaza de las bombas… Pienso en las familias que han perdido a sus seres queridos, en los soldados de uno y otro bando, y en sus madres… Y me pregunto: ¿Qué locura es ésta?
Jesús, al comienzo de su vida pública, resiste la codicia de los bienes materiales, la soberbia del poder y la vanagloria de los triunfos espectaculares, pero nosotros, ¡sin su ayuda!, seguimos cayendo en esas tentaciones… y dejando detrás un rastro de dolor y desolación.
Señor, en esta cuaresma, haznos crecer en generosidad, en humildad, en espíritu de entrega y servicio, caminando hacia ese horizonte que llamamos la Pascua.

SÁBADO 5.03.2022
Sábado después de Ceniza
Había basado mi vida en la opresión, la ganancia y la maledicencia. Buscaba… no sabía lo que buscaba. Añoraba un paraíso, pero el dinero sólo me granjeó enemigos y amigos interesados. La vida ya no tenía mucho sentido para mí. Y un día pasaste junto a mí, y me miraste, y supe, en tu mirada, que era a Ti a quien buscaba, que tú eras el paraíso y el amor y el perdón que yo añoraba… Y me llamaste, y tu luz me deslumbró… todo lo demás palideció…

VIERNES 4.03.2022
Viernes después de Ceniza
Hay ciertos cristianos “muy devotos” que los son hasta que se les “toca el bolsillo”. Y, en el fondo, esto nos pasa un poco a todos porque la coherencia entre fe y vida nos cuesta a todos. Hoy, a revisar esta coherencia, nos invitan las lecturas de este viernes. La autenticidad de nuestras prácticas piadosas y cuaresmales quedará medida por nuestra caridad y nuestra justicia. El Dios que habita en la trascendencia, por la Encarnación es el mismo que habita en cada ser humano que sale a nuestro encuentro.

JUEVES 3.03.2022
Jueves después de Ceniza
La liturgia de este segundo día de cuaresma nos sitúa ante las elecciones que tenemos que tomar en la vida: “Mira: hoy pongo delante de ti la vida y el bien, la muerte y el mal”. Y no se trata sólo de las grandes decisiones de la vida, sino también de esas aparentemente pequeñas decisiones que constantemente todos tenemos que tomar en la vida y que, quizá, no les damos mucha importancia: si me levanto a tal o cuál hora, si me levanto con el despertador o me quedo dando vueltas en la cama, si desayuno tal o cual cosa, si… Porque detrás de cada una de ellas puede yacer un “yo” que se va inflando más y más o, por el contrario, un proyecto de entrega y servicio que va madurando y haciendo crecer de verdad mi existencia. Los dos caminos tienen su cruz/cruces, no nos engañemos. Pero el primero será un camino cuyas cruces nos precipitarán en el vacío, mientras que en el segundo nos harán seguir los pasos de Jesús hacia la plenitud de la Pascua.

MIÉRCOLES 2.03.2022
Miércoles de Ceniza
Cuando parecía que la pesadilla que ha sido el Covid empezaba a quedar atrás, una nueva amenaza aparece en nuestro horizonte: el de una guerra sangrienta que nos amenaza a todos (y al planeta) con el poder destructor de sus bombas y artefactos de guerra. Y así, nuestro orgullo de hijos de la Ilustración y del Modernismo, autosuficientes, endiosados y, creíamos, no necesitados de Dios se nos viene abajo. Tiempo de Cuaresma, invitación a volver nuestra mirada hacia la grandeza de un Misterio, el de Jesucristo, que nos saca de nuestras pobrezas y que nos abre a un horizonte de plenitud y eternidad, justo el que nosotros mismos nunca podremos darnos. Cuidemos nuestros tiempos de oración, de “estar a solas con quien sabemos nos ama”, prescindamos de tanta cosa superflua de la que estamos rodeados (y, muchas veces, esclavizados), y abramos el corazón (y nuestro tiempo) a quien nos necesita…

MARTES 1.03.2022
Octava semana del tiempo ordinario, año par
Pedro se equivocaba cuando le dice a Jesús que “ellos lo habían dejado todo”. Y, en efecto, en el pasaje siguiente, (que ya no leeremos porque mañana empieza la cuaresma), sitúa el evangelista la petición de los Zebedeos a Jesús de sentarse uno a su izquierda y otro a su derecha, con la consiguiente disputa entre todos. Y quedan también las negaciones de Pedro en la noche del Jueves Santo. Desamoldarse del mundo para amoldarse al Señor no se hace de hoy para mañana, es un camino a recorrer con nuestro esfuerzo y, sobre todo, con Su gracia. También, con la confianza de que la victoria final será la suya. Cantemos al Señor un cántico nuevo…

LUNES 28.02.2022
Octava semana del tiempo ordinario, año par
El problema del joven rico con Jesús no era sólo el dinero, era algo más de fondo. Era, y es, el problema de una religiosidad concebida como “de méritos ante Dios” para “ganarse la Vida Eterna”, frente a una religiosidad de acogida en gratitud y humildad del don de Dios: el único bueno… el único salvador. San Pedro, en el comienzo de su primera carta, nos recuerda, agradecido, este don: “nos ha hecho nacer de nuevo”, “os está reservada en el cielo”, “os custodia”…, ante el que nosotros estamos invitados a perseverar en la fe en medio de las dificultades de todo tipo, las que vienen de nosotros y las que nos vienen del mundo. ¡Pero merece la pena ese esfuerzo perseverante!: “No habéis visto a Jesucristo y lo amáis y, sin contemplarlo todavía, creéis en él y así os alegráis con un gozo inefable y radiante, alcanzando así la meta de vuestra fe: la salvación de vuestras almas”.

DOMINGO 27.02.2022
Octavo del tiempo ordinario, ciclo C
En tiempos de Jesús ben Sirá (en la primera mitad del siglo 2° a.C.) la cultura griega era muy seductora para los jóvenes judíos, y, para contrarrestar esa seducción, el autor del libro del Eclesiástico recopila una gran cantidad de sentencias de la sabiduría tradicional judía. En tiempos de Pablo, en el contexto de la ciudad de Corinto, también la presión pagana sobre los cristianos es muy fuerte y, como consecuencia, para estos es difícil asumir la fe en la resurrección. Y en tiempos de Jesús, y en cualquier tiempo, la tentación de “saberlo todo” y de convertirnos en “jueces de los demás” nos asalta a todos, como denuncia Jesús en el evangelio de este domingo. Jesús nos invita a ser humildes y cuidar el corazón “porque de lo que éste atesora, habla la boca”… Y Pablo nos invita a mantenernos firmes e inconmovibles en la fe, convencidos de que “el esfuerzo por servir al Señor nunca será en vano”… aunque no esté de moda, aunque, incluso, se rían de nosotros…

SÁBADO 26.02.2022
Séptima semana del tiempo ordinario, año par
Quizá si tuviese que resumir en pocas palabras este final de la carta de Santiago (1ª lectura) y el evangelio de hoy, diría: Dejad hablar/expresarse al corazón. A veces los creyentes vivimos atrapados por normas, devociones, miedos, etc. quizá porque hemos comprendido muy poco de la verdadera hondura del amor de Dios por nosotros. Cultivemos este amor en la oración silenciosa (no en el exceso de palabras), dejémonos abrazar por Jesús como los niños… y dejemos brotar del corazón toda la gratitud, toda la ternura, toda la solidaridad que su abrazo produce en nosotros.

VIERNES 25.02.2022
Séptima semana del tiempo ordinario, año par
Cuando uno vive centrado sobre uno mismo, —incluso con la mejor intención de servir al Señor—, el corazón se le endurece y surge la queja, y la falta de aguante, y la impaciencia… y, en definitiva, el desamor. Y todo ello se refleja, y crea problemas, en la vida de la familia, en las comunidades cristianas, en la sociedad… Pidamos hoy la gracia de descentrarnos de nosotros mismos para apoyar la vida en quien es «compasivo y misericordioso, lento a la ira y rico en piedad…», en quien me ha mirado y me mira con amor, a pesar de mis traiciones… o, quizá, precisamente por ellas…

JUEVES 24.02.2022
Séptima semana del tiempo ordinario, año par
Por más que insista la Iglesia en su doctrina social sobre la primacía de la persona frente al dinero, nuestro mundo está regido por la rentabilidad económica. Y los gobiernos con sensibilidad social tienen que hacer equilibrios entre las exigencias de rentabilidad del gran capital y un trabajo digno y estable para todos. Pero el dinero es un amo seductor y se nos pega a las manos y al corazón. A veces, para el creyente de a pie, es difícil sustraerse a los grandes mecanismos económicos, pero, al menos, que, con la gracia de Dios, no dejemos que el lujo ni el derroche nos atrapen, y que siempre tengamos “un vaso de agua” (y algo más) que ofrecer hacia quien ha tenido peor suerte en la vida que nosotros… que no seamos cristianos sosos, plegados al paganismo reinante.

MIÉRCOLES 23.02.2022
Séptima semana del tiempo ordinario, año par
La carta de Santiago tiene un trasfondo gris. Da la impresión que aquellos cristianos a los que se dirige la carta habían perdido su “amor primero” al Señor, y que, por tanto, las debilidades humanas se habían apoderado de ellos. Santiago denuncia esas debilidades y vicios. Hoy le toca el turno a la falsa seguridad que da el dinero y nos hace creernos un poco dioses… y olvidadizos de los que necesitan nuestra ayuda. Dioses de pies de barro que, en un instante, aquí todo lo dejan, salvo, precisamente, el bien que hayan hecho… porque el bien es siempre semilla de Dios, venga de quien venga, aunque “no venga con nosotros”…

MARTES 22.02.2022
f. La Cátedra del Apóstol san Pedro
1Pe 5, 1-4; Sal 23(22), 1b-3a. 3b-4. 5. 6; Mt 16, 13-19
En Cesarea de Filipo, Pedro confiesa a Jesús como el Mesías, el Hijo de Dios vivo. En realidad, Pedro no sabe lo que dice porque sus palabras no vienen de él, sino de Dios-Padre. Pedro tendrá que aprender con el transcurso del tiempo (y con sus caídas) a fiarse menos de sus fuerzas y de su sabiduría, y más de Dios, quien es, en definitiva, el que llevará siempre las riendas de su vida. Sin esta confianza en Dios, ¿cómo soportar el peso de la propia vocación, incluso, de la vida misma? Y si esto es verdad en general, lo es mucho más para quien ostenta el primado de la Iglesia y de quien debe ser ejemplo y modelo, siguiendo las huellas del Buen Pastor, para los demás pastores de la Iglesia. Hoy oramos por y agradecemos la figura del papa actual, Francisco… el papa de la Misericordia.

LUNES 21.02.2022
Séptima semana del tiempo ordinario, año par
En todos los ámbitos y esferas de la vida hay personas que se las dan de “sabios y entendidos”, personas que creen saberlo todo de todo y que no buscan dialogar, sino imponerse a los demás. Es fácil imaginar cómo, también entre aquellos discípulos de Jesús, ausente Él, hubo alguno que dándoselas de importante intentó curar al “hijo poseído por un mal espíritu” del evangelio de hoy… y fracasó. Y por las palabras de Santiago en la primera lectura de hoy deducimos que también los había en la comunidad a la que él escribe su carta. Y Santiago nos dice también que, detrás de esas actitudes, se esconden la envidia, la rivalidad, la falsedad… y que esta no es la sabiduría “que viene de lo alto”, del evangelio… La sabiduría del evangelio proviene de la oración, nos dice Jesús, y sus frutos son la paz, la comprensión, la misericordia… no el “yo lo sé todo” y “yo tengo la última palabra en todo”…

DOMINGO 20.02.2022
Séptimo del tiempo ordinario, ciclo C
Escuchadas “en frío” las palabras de Jesús sobre el perdón a los enemigos del evangelio de hoy nos dejan un poco inquietos e impotentes, especialmente si en nuestra vida tenemos algún tipo de «herida» con alguna persona. Pero hay que tener en cuenta que estas palabras no son un mandamiento legalista, exterior a nosotros, sino el testimonio de lo que Dios ha hecho, y hace con nosotros: por su misericordia existimos, por su misericordia estamos redimidos, por su misericordia permanecemos en la existencia a pesar de nuestras infidelidades, etc. Y esta misericordia de Dios es la fuente en la que somos invitados a beber para poder nosotros, a nuestra vez, vivir la misericordia hacia los demás en las heridas concretas de la vida… aunque no sea fácil: «Señor haz en mí lo que yo sólo no puedo». El primer beneficiario de esta dinámica no es el enemigo, sino uno mismo: en el perdón el corazón se configura con Jesucristo, y se expande hacia la plenitud de Dios. Por el contrario, quien queda atrapado por el odio o el resentimiento, se “colapsa” y se destruye a sí mismo.

SÁBADO 19.02.2022
Sexta semana del tiempo ordinario, año par
Hay palabras que crean paz, que transmiten amor, que levantan corazones… Otras, por el contrario, crean rupturas, enemistades, sombras… Las palabras del Padre desde la nube nos invitan a escuchar a su Hijo, y las palabras del Hijo nos invitan a mirar hacia el misterio Pascual en el que el Amor más grande se derrama sobre la humanidad… Por el contrario, nuestras palabras suelen ser mucho más alicortas e interesadas… cuando no, mortíferas. Santiago nos recuerda que “todos faltamos a menudo” y nos invita a cuidar nuestra lengua, es decir, las palabras que decimos y cómo las decimos…

VIERNES 18.02.2022
Sexta semana del tiempo ordinario, año par
Hay creyentes que caminan ensoberbecidos porque creen haberse “ganado” la salvación de Dios con sus méritos, y otros que, por el contrario, caminan angustiados porque sus obras nunca son suficientes para “ganarse” esa salvación. Ambos pecan de poner el centro de la salvación no en Dios, sino en ellos mismos. Pero también está el otro extremo, el de los que nos se esfuerzan nada porque “Dios es bueno y nos salva a todos”. En el camino de la fe, como en el camino de las cosas importantes de la vida, no se trata de blanco o negro, sino de un camino a recorrer que siempre es tensional. La tensión entre la gracia de Dios que en Jesucristo nos ha regalado su salvación sin mérito alguno por nuestra parte, y la acogida agradecida, y por tanto actuante y no pasiva, —las obras de la fe—, del creyente que camina “cargando con su cruz” detrás de Jesús y de Él da testimonio.

JUEVES 17.02.2022
Sexta semana del tiempo ordinario, año par
Pedro “pensaba como hombre” y le quería evitar a Jesús sus sufrimientos. Los cristianos de la comunidad de Santiago también “pensaban como hombres” y adulaban a los ricos y despreciaban a los pobres. Y, tanto Pedro, por parte de Jesús, como los cristianos de Santiago, por parte de éste, reciben una reprimenda porque lo que está en juego es la verdad del evangelio: la vida dada con generosidad, gratuitamente, por puro amor, sin intereses mezquinos y egoístas. Y pienso en cuantas veces yo mismo he confundido mis propios criterios y egoísmos con la voluntad de Dios…

MIÉRCOLES 16.02.2022
Sexta semana del tiempo ordinario, año par
Es un mecanismo psicológico de defensa, una forma de no enfrentar los problemas y frustraciones de la propia vida. Me refiero al chismorreo, a la agresividad verbal, al convertirme en juez (intransigente) de los demás… Ocurre en el mundo y en las redes sociales, pero ocurre también a la puerta de nuestras iglesias. Ocurría ya en tiempos de Santiago… y ha ocurrido siempre. Cuando uno no vive el amor, el corazón se le oxida y la lengua se le envenena. Santiago nos invita hoy a ser prontos para escuchar y lentos para hablar, al tiempo que, en lugar de encerrarnos obre nosotros mismos, nos abrimos a los necesitados (“huérfanos y viudas”). Y Jesús se nos ofrece como compañero de camino para sanar y abrir los ojos de nuestro corazón a la luz y al amor verdaderos que son Él mismo.

MARTES 15.02.2022
Sexta semana del tiempo ordinario, año par
Nos lo dice hoy bien claro Santiago: «No digas, es Dios el que me tienta, porque Dios no es tentado por el mal, ni él tienta a nadie. A cada uno lo tienta su propio deseo cuando lo arrastra y seduce…» Así que, cuando te sientes arrastrado por el deseo, pide ayuda al Señor, grítale, si es preciso, —«todo buen regalo y todo don perfecto viene del Padre»—, y si parece no escucharte, igual es que necesitas purificarte del peor de todos ellos: la soberbia y la autosuficiencia. Y entre todos los deseos, hoy nos habla el evangelio de la preocupación de los bienes materiales, —«la levadura de Herodes y de los fariseos»—. La preocupación por los bienes materiales es como el vértigo: nos acaba tirando al precipicio… Cuanto más te obsesionas con ellos, más necesitas y más tu corazón se aparta del Señor.

LUNES 14.02.2022
Sexta semana del tiempo ordinario, año par
Los fariseos piden un signo a Jesús para creer en él. Nosotros muchas veces también. Esta actitud es ya un mal inicio para la fe porque nos situamos nosotros en el centro, mientras que la verdadera fe es situarle a Él en el centro de nuestra existencia: contigo, Señor, siempre y en todo. Es decir, en medio de “toda clase de pruebas”, como nos dice hoy Santiago en el comienzo de su carta. Por ello, como también nos dice Santiago: “si alguno de vosotros carece de sabiduría, pídasela a Dios, que da a todos generosamente y sin reproche alguno, y él se la concederá”.

DOMINGO 13.02.2022
Sexto del tiempo ordinario, ciclo C
¡Qué incómodas nos resultan estas palabras de Jesús que hoy escuchamos en el evangelio! Incómodas para los “hijos” de nuestras sociedades de la abundancia y la comodidad, cada vez más replegadas sobre sí mismas, más autosuficientes… cada vez más vacías y tristes (¡y violentas!), y en las que Dios parece cada vez tener menos cabida, incluso, estorba… pero qué consoladoras para quienes se ven afectados por la pobreza, el dolor, el desprecio o la persecución, para quienes, a través de las experiencias “duras” de la vida, han experimentado y comprendido que sin Dios, la vida es como “un cardo en la estepa que nunca recibe lluvia y sus hojas se secan”… Han comprendido que, en la hora de la verdad (y de la muerte) todo es nada si caminamos sin Dios…

SÁBADO 12.02.2022
Quinta semana del tiempo ordinario, año par
Jeroboán mira a sus súbditos y, pensando en sus propios intereses políticos, construye dos santuarios en su reino con sacerdotes que él mismo nombra. La religión al servicio de la política. Una pelea que ha acompañado siempre la historia de la Iglesia. También lo contrario: una Iglesia que ha creído que el Evangelio avanzaba por la fuerza de las armas. Y, frente a esto, Jesús nos vuelve a recordar hoy, cómo debe ser la mirada del verdadero cristiano: una mirada cargada de compasión, una mirada que ofrece, —no impone—, el único pan capaz de saciar el hambre de eternidad que todos llevamos dentro: Jesucristo, nuestro Señor. Una mirada incompatible, al menos, con ciertas formas de entender la política.

VIERNES 11.02.2022
Quinta semana del tiempo ordinario, año par
La infidelidad de Salomón a Dios deja su cicatriz en la historia: la división del reino de Israel. Y así, de grandes o pequeñas cicatrices está marcada la historia de la humanidad por nuestros propios pecados e infidelidades. Y, a través de ellas, Dios nos habla, y nos invita a la conversión. Las malas noticias no sólo son unas columnas en el periódico, son también una llamada de Dios a nuestro corazón. Llamada a la que, tantas veces, permanecemos sordos. El sordomudo del evangelio es presentado al Señor, presentémonos también nosotros, unos a otros, al Señor, recemos los unos por los otros, no seamos indiferentes al pecado ni al mal del mundo. Y pidamos la intercesión de santa María (de Lourdes), que ella nos presente al Señor en nuestras sorderas y mudeces. Amén.

JUEVES 10.02.2022
Quinta semana del tiempo ordinario, año par
¿Dónde quedó aquella humildad y aquella sinceridad creyente del joven rey Salomón? Su declive espiritual es parábola de la historia del pueblo de Israel en tantos momentos de su historia, y parábola de tantos sinceros creyentes en su niñez y juventud, pero luego atrapados poco a poco por los ídolos del mundo… La fe sincera y vivida es un don de Dios, pero al mismo tiempo algo que nosotros tenemos que acoger desde el silencio de la oración, desde los gestos y sacrificios de una vida de servicio, entrega y amor, y también desde una mirada crítica a todo lo que hacemos, revisando nuestra vida a la luz del Evangelio. El contraste con Salomón lo pone hoy la fe sincera y humilde de la mujer pagana del evangelio. ¡Cuántas veces el dolor por los hijos y la impotencia ante sus caminos, al despojarnos de las vanaglorias del mundo, ha sido y es, para muchos padres, camino de profunda humildad y sincera fe… clavados a la Cruz del Señor con Él!

MIERCOLES 09.02.2022
Quinta semana del tiempo ordinario, año par
La sabiduría de Salomón atrae desde sus lejanas tierras a la reina de Saba, y, como nos dice el texto de la 1ª lectura de hoy, su “experiencia” junto al rey desborda todo lo que ella había podido imaginar. A su vez, la misma reina se nos muestra sabia cuando se da cuenta de que esa sabiduría del rey Salomón no le pertenece, sino que es un regalo del Dios que sobrepasa toda sabiduría humana. Sabiduría de Dios que se nos ha manifestado en Jesucristo como sabiduría de y para la Vida Eterna, pero ante la cual los discípulos —nosotros también— permanecemos “torpes” para entender. Sabemos mucho de ciencias, de historia, y de geografía. Sabemos muchos de cocina, de viajes y de entretenimientos. Pero la verdadera sabiduría, la que nos hace felices, la que nos lleva a la Vida Eterna, la hemos aparcado…

MARTES 08.02.2022
Quinta semana del tiempo ordinario, año par
Necesitamos, como creyentes, las mediaciones de Dios. No podemos vivir una religión desencarnada. Necesitamos, pues, los templos, las novenas, las peregrinaciones y las teologías. Pero, al mismo tiempo, no podemos encerrar a Dios en todo ello. Salomón así nos lo manifiesta en su oración de la consagración del templo de Jerusalén, aunque con el paso de los años, y la influencia de sus mujeres paganas, lo fue olvidando. También parece que lo habían olvidado los fariseos y letrados “venidos de Jerusalén” a visitar a Jesús. Las palabras de Jesús nos dan la clave y nos ayudan a examinarnos por si también nosotros andamos “despistados”: si las mediaciones nos ayudan a crecer en el mandamiento del amor, estamos en el buen camino. Si, por el contrario, son refugio contra la caridad o levantan muros que nos separan, estamos en el mal camino.

LUNES 07.02.2022
Quinta semana del tiempo ordinario, año par
Se equivocaba Salomón cuando, tras la consagración del templo por él construido, dice que «allí habitaría el Señor para siempre». Nada es para siempre, salvo Dios mismo, y, por ello, también nos equivocamos nosotros cuando queremos “retener” a Dios en los “templos” (ideologías, formas de piedad, leyes…) que le construimos. El verdadero templo de Dios en medio de nosotros fue Jesucristo… y lo es cada ser humano, —especialmente el pequeño, el pobre, el enfermo…—, en el que Él sigue habitando… y llamándonos para hacer el bien, como Él.

DOMINGO 06.02.2022
Quinto del tiempo ordinario, ciclo C
¿Qué le podía enseñar Jesús, —un hombre de tierra adentro—, a un pescador curtido como Pedro? Pedro, —en pura lógica humana—, pensaba que nada. Sin embargo, aquella mañana, en la orilla del mar de Galilea, Pedro no sólo aprendió que no lo sabía todo sobre la pesca, sino que además Dios sale a nuestro encuentro (y nos vocaciona), precisamente cuando experimentamos nuestros límites (y pecados) y dejamos atrás nuestra autosuficiencia. Lo mismo le pasó a Isaías —«¡Ay de mí, estoy perdido! Yo, hombre de labios impuros…»—, y a Pablo —«…y eso que yo era antes un perseguidor»—. A contracorriente de la cultura actual que pone en tus manos herramientas para crearte personalidades e imágenes maravillosas (¡¡¡y falsas!!!) —que acaban por destruirte—, Dios quiere hacerse el encontradizo contigo en la verdad de lo que tú eres, especialmente en lo pobre y humilde que hay en ti, para desde ahí abrirte a un horizonte de plenitud y de sentido, no construido por manos humanas, sino por pura gracia, por pura misericordia, por puro Amor del Señor…

SÁBADO 05.02.2022
Cuarta semana del tiempo ordinario, año par
Salomón, en el comienzo de su reinado siente su pequeñez frente a la tarea de ser rey. Y se encomienda a Dios y le pide «un corazón atento para juzgar a su pueblo y discernir entre el bien y el mal». Y Jesús, en el evangelio de hoy, tiene un corazón atento (compasivo) a la necesidad de descanso de sus apóstoles, y también un corazón atento a las multitudes que «estaban como ovejas sin pastor». Hoy es difícil encontrar en nuestro mundo personas con ese «corazón atento – compasivo». Al contrario, las ideologías, la ignorancia o la rabia del propio fracaso existencial mediatizan nuestras actuaciones… y las de nuestros políticos. Incluso, en la Iglesia, en ese paso de una Iglesia sociológica a una Iglesia del “resto de Israel”, —que no sabemos muy bien cómo gestionar—, nos faltan también. Aprendamos, como Salomón, a encomendarnos a Dios desde nuestra pequeñez e impotencia, y a pedirle nos dé ese corazón atento y compasivo… a todos.

VIERNES 04.02.2022
Cuarta semana del tiempo ordinario, año par
David mató a Urías para “blanquear” su pecado con Betsabé, y Herodes Antipas mató a Juan Bautista para complacer a Herodías. La pasión ciega muchas veces al ser humano, y hacemos tonterías, y cometemos pecados… de los que luego nos avergonzamos. David, arrepentido, se volvió hacia Dios y fue perdonado su pecado. De Herodes no sabemos, pero imaginamos que cargaría toda su vida con aquel crimen y otros… como tantos otros hombres y mujeres. Hoy, muchos, abrumados por su pasado recurren a la psiquiatría para resolver sus conflictos, pero el abismo de la culpa (y del perdón, propio y/o ajeno) sólo la fe lo puede cruzar… de la mano de la misericordia de un Dios siempre dispuesto a abrazarte y a reconstruirte desde las cenizas en que te has convertido. David así lo vivió, y esta fue su grandeza por encima de toda otra grandeza.

VIERNES 04.02.2022
Cuarta semana del tiempo ordinario, año par
David mató a Urías para “blanquear” su pecado con Betsabé, y Herodes Antipas mató a Juan Bautista para complacer a Herodías. La pasión ciega muchas veces al ser humano, y hacemos tonterías, y cometemos pecados… de los que luego nos avergonzamos. David, arrepentido, se volvió hacia Dios y fue perdonado su pecado. De Herodes no sabemos, pero imaginamos que cargaría toda su vida con aquel crimen y otros… a no ser que tuviera su corazón ya demasiado endurecido. Hoy, muchos, abrumados por su pasado recurren a la psiquiatría para resolver sus conflictos, pero hay un abismo que sólo la fe puede cruzar… y que todos necesitamos: el de la misericordia de un Dios siempre dispuesto a abrazarte y a reconstruirte desde las cenizas en que te has convertido. David así lo vivió, y esta fue su grandeza.

JUEVES 03.02.2022
Cuarta semana del tiempo ordinario, año par
Al rey David le llegó, como a todos, la hora de su muerte. Y en ese momento en que ya sobra todo, el corazón del rey se centra en lo que de verdad ha merecido la pena vivir: la voluntad de Dios. Y así se lo testimonia a su hijo Salomón. También Jesús, cuando envía a los Doce a evangelizar, no quiere que se anden por las ramas, quiere que vayan con lo esencial y a lo esencial. Ni como personas, ni como Iglesia, los creyentes hemos sabido siempre vivir en lo esencial: nos puede el mundo con sus mentiras, pero nos pueden también las deformaciones de lo religioso. Así que hoy te invito a que busques un momento de silencio e intentes situarte ante tu propia muerte: ¿Qué te da paz? ¿Qué te la quita? ¿Qué ha merecido la pena vivir? ¿Qué ha sido un error? Etc. Pide que el Señor te ilumine y te guíe.

MIÉRCOLES 02.02.2022
La Presentación del Señor
¿Qué buscamos tras los abrazos a/de quienes queremos? ¿Qué esperamos tras los besos a/de quienes amamos? ¿Qué aguardamos tras los amores que disfrutamos? Etc. Cuando todo amor, todo beso y todo abrazo no acaba de colmar el ansia de Infinito que anhela nuestro corazón. Anhelamos, como el anciano Simeón o como la profetisa Ana, que el Señor habite cada vez con mayor plenitud en el santuario de nuestro corazón. Pero también, como ellos, debemos aprender a esperar con la espera paciente del que confía, ora, alaba, ama y sirve. Señor, sé tú la luz que nos guía hasta que habitemos plenamente en tu Luz.

MARTES 01.02.2022
Cuarta semana del tiempo ordinario, año par
David llora la muerte de su hijo Absalón, el hijo traidor que se rebeló contra su padre, y su llanto y su corazón desgarrado nos invitan a pensar en el corazón de ese Dios que llora por cada uno de nosotros, también sus hijos, que tantas veces le traicionamos. David hubiera querido morir en el lugar de su hijo, Dios mismo, en Jesucristo, morirá por nosotros para que tengamos vida, Vida Eterna. Y como anticipo de esa Vida Eterna las dos curaciones que nos relata hoy el evangelio. Son una invitación a que también nosotros nos acerquemos a Jesús con fe y le pidamos la curación, la nuestra y la de aquellos que amamos… especialmente la curación del corazón.

LUNES 31.01.2022
Cuarta semana del tiempo ordinario, año par
La grandeza de corazón que David no mostró con Urías cuando le cegó la pasión por Betsabé, y que ya había mostrado con Saúl, la vuelve a mostrar en este pasaje de la liturgia de hoy. ¿Qué es lo que hace la diferencia? La mirada de David. En el primer caso es una mirada centrada sobre sí mismo y su pasión, mientras que en este de hoy (y en el caso de Saúl), David mira las personas y los acontecimientos con los ojos de Dios: «Dejadlo que me maldiga porque se lo ha mandado el Señor». Y con los ojos de Dios nos mira Jesús, mirada de misericordia que sana, como miró y sanó al endemoniado del evangelio de hoy. Donde los hombres intentamos poner cadenas y sujetar, Dios pone amor y libertad. Por ello, con el salmista, «puedo acostarme y dormir y despertar: el Señor me sostiene».

DOMINGO 30.01.2022
Cuarto del tiempo ordinario, ciclo C
Mensajero del Dios del “Amor por su pueblo”, Jeremías será incomprendido y llevará una vida de sufrimiento. Jesús, que es el Testigo por excelencia del Dios del Amor, ya desde el comienzo de su vida pública, será rechazado y amenazado de muerte. Y en la comunidad de Corinto todos quieren sobresalir y figurar con sus carismas, pero olvidan el más importante: el Amor. Y nosotros, nacidos por la voluntad del Dios que es Amor y destinados a la plenitud de Su Amor, necesitamos sentirnos amados y amar a los demás. Pero el Amor es hoy una de las realidades más manipuladas y traicionadas, y así nos llenamos de fracaso y sufrimiento. Danos la gracia, Señor, de conocer el Amor, —de conocerte—, y de amar de verdad, como tú nos amaste y nos amas.

SÁBADO 29.01.2022
Tercera semana del tiempo ordinario, año par
El rey David, cegado por su pasión, ha cometido un doble pecado: adulterio y asesinato. El profeta Natán, con gran habilidad, le abrirá los ojos, y una gran “tormenta” se echa sobre su conciencia. (De Betsabé no se nos dice nada, pero imaginamos que el asesinato del marido y la posterior muerte del hijo también le harán vivir su propia “tormenta”). Los discípulos de Jesús también atraviesan su tormenta en la travesía del lago —parábola de otras “tormentas” que les tocaría vivir posteriormente—. David invoca a Dios y se humilla ante Él. Los discípulos increpan a Jesús que parece indiferente a su suerte. Por el contrario, nuestro mundo secularizado de hoy no tiene a quien invocar, y las “tormentas” de la vida y de la sociedad provocan frustración, violencia, depresión… Elevemos nuestra oración al Dios de Jesucristo para que haya muchos “Natanes” que nos abran los ojos…

VIERNES 28.01.2022
Tercera semana del tiempo ordinario, año par
La pandemia abrió la “caja de los truenos”, y el paraíso (?) que habíamos construido para la humanidad (aunque sólo para algunos) se nos ha mostrado en toda su fragilidad… y egoísmo. Las consultas psiquiátricas han aumentado… y la violencia y los suicidios, también. Por su parte, David olvida su condición de ungido del Señor y se queda cómoda y egoístamente en casa, mientras sus soldados van a la guerra. Será el primer peldaño que le hará rodar por una escalera que le llevará al abismo del adulterio y del asesinato. Triste ejemplo de quien en su infancia y juventud dio muestras de un corazón generoso y fiel a Dios. Pero, así es siempre: lo que no se nutre y apoya en el Eterno, es decir, cuando nos apartamos del Reino de Dios que crece y avanza imparablemente hacia su plenitud, todo lo que “construyamos” acaba por volverse contra nosotros… “Quien no siembra conmigo, desparrama”.

JUEVES 27.01.2022
Tercera semana del tiempo ordinario, año par
Quizá tú, como yo (o como Jacob, Gn 32, 23ss), te hayas peleado alguna vez con Dios. Te parecía que las cosas que el mundo te ofrecía eran más apetecibles que vivir en la fe, y… «ocultaste tu lámpara bajo el celemín». Pero cuando los años han pasado, y has visto los “resultados” de las cosas del mundo, —«nada oculto que no llegue a saberse»— y cómo el Señor, a pesar de tu resistencia, no te ha abandonado, y sientes su presencia y su fuerza para abordar el último tramo de tu vida, quizá también puedas decir conmigo (y con David), con profunda gratitud: «¿Quién soy yo, mi dueño y Señor?». Quien soy yo para que me hayas bendecido con tu fidelidad, con tu fuerza, con tu vida, con tu esperanza… con tu Amor…

MIÉRCOLES 26.01.2022
Tercera semana del tiempo ordinario, año par; y santos Timoteo y Tito (1ª lectura: 2Tim 1, 1-8)
Es un texto precioso, lleno de humanidad y de fe: «Doy gracias a Dios (…) te tengo siempre presente en mis oraciones noche y día. Al acordarme de tus lágrimas, ansío verte, para llenarme de alegría. Evoco el recuerdo de tu fe sincera (…). Por esta razón te recuerdo que reavives el don de Dios que hay en ti por la imposición de las manos…». Y desde esta humanidad y esta fe, Pablo fue sembrador de la Palabra de Dios… como el Maestro. Si nos faltan esa humanidad y esa fe, ¿a qué se queda reducido nuestro ministerio sacerdotal? Ora por quien esto escribió y por todos los sacerdotes. Gracias.

MARTES 25.01.2022
La Conversión de San Pablo
«Yo soy Jesús, a quien tú persigues». La conversión de Pablo empieza por un “aterrizaje” en el misterio de la Encarnación. Jesús no es una realidad abstracta. Su presencia se continua en la historia en cada ser humano y, especialmente, de los “pequeños”, como nos evocan las mismas palabras de Jesús en la parábola del Juicio de las Naciones: «Lo que hicisteis (o no hicisteis) a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí me lo hicisteis (o no hicisteis).» El papa Francisco continuamente nos recuerda, con sus palabras y sus gestos, esta entraña esencial de nuestra fe: que no nos “elevemos” tanto con nuestros rezos y piedades que olvidemos (o persigamos) al hermano necesitado… que nos evadamos del mundo. Por eso, y tristemente, este papa es despreciado y perseguido por algunos… La historia de la persecución en nombre de la ortodoxia se repite… Que se repita también en nosotros la historia de la conversión, para que el evangelio “llegue a los confines de la tierra”…

LUNES 24.01.2022
Tercera semana del tiempo ordinario, año par
«Tiene dentro a Belzebú». No importa la justificación que demos, —siempre podemos encontrar una—, el caso es no moverme «yo» de mis posturas y, en el fondo, de no dejar entrar verdaderamente a Dios en mi corazón y en mi vida. Y así, diciendo servir a Dios, servimos a una caricatura de Dios… es el pecado contra el Espíritu Santo. El pecado que «no les podrá ser perdonado a los hombres», no porque Dios no quiera perdonar los pecados, sino porque los hombres nos cerramos a ese perdón… con nuestra autosuficiencia. En la primera lectura, David comienza su caminar como rey de Jerusalén. Su reinado tendrá luces y sombras… y pecados. Pero David nunca se autojustificó, siempre reconoció sus pecados… y así nos da ejemplo de apertura al Espíritu de Dios.

DOMINGO 23.01.2022
Tercero del tiempo ordinario, ciclo C
Allí donde hay personas, hay problemas. El servicio generoso y humilde, gratuito, nos cuesta, mientras que el afán de protagonismo y de dominio nos puede. Ocurre en el mundo, en las familias… y ocurre en la Iglesia, como ocurrió entre los cristianos de Corinto. Y así, en nombre del evangelio, traicionamos el Evangelio. La Palabra de Dios recordó a los decepcionados y desanimados judíos vueltos del Exilio quienes eran y cuáles fueron sus orígenes (cf, 1ª lectura), y la Palabra de Dios iluminó el ser y el actuar de Jesús ante sus paisanos en la sinagoga de Nazaret… Que amemos esa Palabra, que la leamos, la conozcamos y oremos… y que ella nos ayude a purificar nuestras actitudes y a conformarnos más y más a Aquél que no vino a ser servido, sino a servir y dar su vida por nosotros.

SÁBADO 22.01.2022
Segunda semana del tiempo ordinario, año par
Llora David la muerte de Saúl y de su hijo Jonatán, y lloramos nosotros a lo largo de la vida la pérdida de nuestros seres queridos… por el trozo de nuestra vida que con ellos se va, por el hueco que dejan en nosotros, pero a veces también porque nos hubiera gustado tener con ellos una relación mejor… heridas que no acaban nunca de cerrar. En el evangelio los parientes de Jesús van a buscarle porque “está fuera de sí”, y sin querer dan en el clavo. Porque Jesús no vive desde Él, sino desde el misterio trinitario; y no vive para Él, sino para nosotros, para que tengamos vida, Vida Eterna, para que la esperanza venza al dolor, para que las heridas de la vida sean sanadas…

VIERNES 21.01.2022
Segunda semana del tiempo ordinario, año par
David respeta la vida de Saúl, no sólo por el gran corazón que aquél tiene, sino, sobre todo, porque éste es el ungido del Señor y, por tanto, un signo y una presencia del Dios que habita en medio de su pueblo. Estamos aún en el Antiguo Testamento. Con la elección de los Doce, Jesús inaugura el pueblo del Nuevo Testamento cuya misión será anunciar al mundo que, por la sangre derramada en la Cruz y por la Resurrección de Jesucristo, cada ser humano es un ungido del Señor, digno de respeto y amor, no una máquina biológica o una “cosa” al servicio de mis intereses…

JUEVES 20.01.2022
Segunda semana del tiempo ordinario, año par
¡Qué complicados somos, a veces, los humanos… y qué malos son los celos y las envidias! Toda la amenaza que Saúl experimenta de David es pura creación de su mente… Podía haberse aprovechado y disfrutado de su amistad y colaboración, como persona y como rey, pero se dejó llevar por la negatividad de sus pensamientos, y esto fue su ruina. En nuestro mundo sin Dios-Padre, hemos perdido también los hermanos, y nos hemos quedado huérfanos y solos. Y así, paranoias obsesivas nos envuelven y atrapan… y las redes sociales las difunden. Y nos volvemos violentos como Saúl, y nos desgraciamos la vida y se la desgraciamos a los demás… Afortunadamente también existen “Jonatanes” que viven de la frescura del amor sincero y son sembradores de vida y de paz… como el mismo Señor. Pide la gracia de ser Jonatan-Jesús, para el mundo, y no Saúl…

MIÉRCOLES 19.01.2022
Segunda semana del tiempo ordinario, año par
El gigante Goliat, con sus armas, con su altura y fuerza, con su experiencia de enemigos destrozados por su espada… se sentía muy seguro de sí mismo. También los fariseos, con sus leyes, con su posición social, con su autosuficiencia, con su alianza con los herodianos… se sentían muy seguros de sí mismos. Pero cuando uno está tan seguro de sí mismo, cuando uno es como un bloque de hierro indestructible al que todos deben someterse, cuando uno no deja ni una grieta para que entre en el propio corazón un rayo de luz diferente, etc. se expone a luchar contra Dios (¡aún en nombre de Dios!) y a cerrarle la puerta. Y lo que era su propia fortaleza y seguridad, más tarde o más temprano, acaba siendo su propia ruina. Pidamos una vez más que el Señor sea verdaderamente nuestra fortaleza, nuestra luz, nuestra salvación…

MARTES 18.01.2022
Segunda semana del tiempo ordinario, año par
No tienen nada que ver ni la apariencia ni el corazón de Saúl cuando fue ungido rey, con la apariencia y el corazón del joven David cuando es también ungido como futuro rey de Israel. Es como si Dios también aprendiese de nuestros errores y pecados. En todo esto hay todo un misterio de amor al hombre y de respeto a su libertad que nos desborda, y al que Dios se abaja: la encarnación, antes de la Encarnación… Contemplemos la grandeza empequeñecida, de quien es «señor del sábado»… y de la historia, y del universo, y de los hombres… y dejémonos tocar en nuestro corazón por su humildad, por su amor y respeto hacia nosotros…

LUNES 17.01.2022
Segunda semana del tiempo ordinario, año par
La fe y la vocación no son “algo” que se adquiere de una vez por todas como si de un mueble se tratase. La fe y la vocación implican gratitud y humildad constantes, escucha atenta de la voluntad de Dios, acogida de esa voluntad y disponibilidad para estar siempre en camino. Es una gracia que tenemos que pedir constantemente y, al mismo tiempo, tenemos que estar muy atentos porque nuestra tentación es siempre la de “apoderarnos” de la fe y de la vocación y ser nosotros los que “mandamos” en ella… los que lo “sabemos” todo. Así le ocurrió al rey Saúl (que, encima, se justifica), así parece que les ocurre a los fariseos y a los discípulos de Juan el Bautista… y así les sigue ocurriendo a cuantos dejan reducida su fe y su vocación a parámetros ideológicos, a ciertas prácticas de piedad o a ciertas normas de conducta… pero les falta la vida teologal, la vida en el Espíritu.

DOMINGO 16.01.2022
Segundo del tiempo ordinario, ciclo C
El Tercer Isaías escribe para una comunidad desanimada, desalentada, desesperanzada, etc. tras la vuelta del Exilio; y sus palabras rezuman ternura, cariño, amor… como de novio/esposo enamorado. No son las palabras del profeta, sino las palabras de Dios que el profeta les transmite… y nos transmite a nosotros que también vivimos tiempos que son de desaliento, desánimo, desesperanza… ¡La utopía en este mundo de un paraíso sin Dios se nos muestra inalcanzable y, hasta un simple virus, nos ha puesto todo patas arriba! Pero las palabras del profeta (de Dios) no se quedan en buenas intenciones, o en lo afectivo o sentimental. Se concretan en la persona de Jesucristo: él es el novio/esposo de la Iglesia, de la humanidad. El único capaz de darnos el Vino Bueno de su Gracia y Salvación, cuando todos nuestros vinos (utopías y proyectos sin Él) se ven fracasados o amenazados…

SÁBADO 15.01.2022
Primera semana del tiempo ordinario, año par
Dos vocaciones: la de Saúl y la de Mateo. De Saúl, para un rey que tendrá que ser guerrero, se nos dice algo muy lógico: que era «un israelita bien plantado… el más alto… y que, de los hombros para arriba, sobresalía sobre todos». Y uno piensa, sin querer, en la elección de su sucesor, de David, en la que Dios se fijará sólo en su corazón, rechazando a sus hermanos de mayor presencia y corpulencia. Y en este contraste (y de lo que fue la historia de ambos reyes) ya hay toda una enseñanza: los caminos de Dios “funcionan mejor” con lo débil que con lo fuerte del mundo. Y esto mismo se repite en la vocación del apóstol Mateo: un recaudador de impuestos, un impuro y un pecador para los judíos… Y así comprendemos que nuestras debilidades, nuestros fracasos, nuestras pobrezas, etc. sean tal vez nuestra mayor riqueza de cara a Dios… No para que nos abandonemos en ellas y no luchemos o, al menos, lo intentemos, sino porque nos hacen humildes, porque nos hacen abrirnos a Él, porque nos alejan de la soberbia y de la autosuficiencia, porque nos invitan a ser ante Dios como niños pequeños en los brazos de una madre…

VIERNES 14.01.2022
Primera semana del tiempo ordinario, año par
No conozco muchos hombres públicos, salvo el papa Francisco, que pidan públicamente que recemos por ellos. Todos necesitamos de la oración de los unos por los otros, pero especialmente aquellos que ocupan cargos de poder en la sociedad y en el mundo, porque la tentación de la soberbia, de la autosuficiencia, del dinero, de las ideologías de muerte… y de pasar de ser servidores a ser explotadores de los demás, les acecha de forma más ostensible. No hace falta que el profeta Samuel se lo dijese a los israelitas para saberlo, lo experimentamos, tristemente, cada día un poco más. Hay como una especie de parálisis mental y espiritual que afecta cada vez más al alma de nuestras sociedades actuales y, especialmente, a sus gobernantes… Recemos por ellos, y por todos, y presentémoslos ante el Señor, aunque para ello tengamos que “romper techos” y vencer obstáculos, especialmente el obstáculo de lo políticamente correcto…

JUEVES 13.01.2022
Primera semana del tiempo ordinario, año par
Primera semana del tiempo ordinario, año par
Jesús cura a un leproso. La lepra es una de las enfermedades que mejor nos evoca el pecado: es hedionda, nos va corroyendo poco a poco y destruye nuestra vida personal y social… Cada uno de nosotros en este día puede pensar en esa “lepra” que le acompaña en estos momentos de su vida y, desde esa toma de conciencia, gritarle/pedirle también al Señor, como el leproso del evangelio, «Si quieres, puedes limpiarme». Pero la primera lectura nos invita a pensar hoy en una “lepra” que puede corroer el alma de la persona religiosa: es la de la utilización mágica/idolátrica de los símbolos religiosos… sin coherencia, sin exigencia, sin compromiso real en nuestra vida personal. Cristianos de cumplimiento: cumplo y miento. Cumplo en la exterioridad, incluso me “como” los santos, pero miento en el mandamiento del amor (incluso al enemigo).

MIÉRCOLES 12.01.2022
Primera semana del tiempo ordinario, año par
Los discípulos acompañan a Jesús en la Sinagoga, en casa de la suegra de Pedro, cuando cura, cuando recorre la Galilea, etc. Pero, en las madrugadas, Jesús se retira en solitario a un descampado para orar. Y esta imagen de Jesús no sólo es una referencia de la necesidad de la oración para los que andamos en medio del mundo en mil actividades, sino que es una imagen que nos da una profunda confianza: en su oración en descampado, Jesús ora por sus discípulos y por todos, como sigue hoy intercediendo por nosotros ante el Padre. En medio de tu soledad, en medio de tus desconciertos y de tus miedos, en medio de tu impotencia —porque no somos dioses—… el Señor siempre nos acompaña con su oración y con su presencia misteriosa, y, en medio de nuestras noches, como al pequeño Samuel, nos llama… Pidamos que escuchemos su voz y que como Samuel también nosotros le respondamos: “Habla, Señor, que tu siervo escucha”.

MARTES 11.01.2022
Primera semana del tiempo ordinario, año par
Ana pide un hijo, no para sí, sino para el Señor… (¡Hermosa y profunda lección que no acabamos de aprender!)… Y la humillación que sufría Ana, por parte de Fenina, es acrecentada, en su dolorida oración, por parte de Elí… Pero hay alguien que no permanece sordo a la súplica ni al dolor de Ana, y Ana tendrá ese hijo… Dios nunca nos abandona en el dolor ni en la súplica sincera, aunque sus caminos no sean casi nunca los nuestros… La figura de Ana (y su cántico de acción de gracias) prefigura el misterio de la María, la “humilde esclava del Señor”, (y su Magníficat); y el hijo de Ana, el de María. Y si Samuel fue el más grande juez-profeta del Antiguo Testamento, Jesús será, él mismo, el Nuevo Testamento (la Nueva Alianza, por su sangre derramada); y no sólo un hijo para Dios, sino Dios mismo entre nosotros… el Salvador; aquél que, nos dice el evangelio de hoy, causaba admiración y asombro entre sus contemporáneos por su palabra y sus milagros… El gran “fracaso” para muchos bautizados es, en nuestros días, haberse “acostumbrado” a Cristo; que ya su figura no les cause ninguna admiración, ni asombro… ni amor.

LUNES 10.01.2022
Primera semana del tiempo ordinario, año par
Sufría Ana… Con el dolor de Ana sufría también Elcaná… Sufrirían los hijos e hijas de Fenina —los niños sufren con el dolor ajeno—… Y la saña de Fenina con Ana también nos indica que Fenina no era feliz… Infelicidad, sufrimiento, dolor… que se prolonga en nuestras familias actuales aunque quizá por otros motivos, especialmente, por el individualismo-egoísmo de nuestra (in)cultura actual… En el evangelio, a la llamada de Jesús, los primeros apóstoles “lo dejan todo para seguirle”… ellos han comprendido, —al menos, intuido—, que en Jesús está el sentido y la luz que buscan para sus vidas. Recemos para que nuestras familias y nuestro mundo vuelvan, desde el corazón, sus ojos a Jesucristo…

DOMINGO 9.01.2022
Bautismo del Señor
Jesús entra en las aguas del Jordán como un día subirá al leño de la Cruz: cargando con nuestros pecados, para que nosotros tengamos Vida. Así las palabras de Dios-Padre no se dirigen sólo al Hijo, sino que por el Hijo se dirigen también a cada uno de nosotros: «Tú eres mi hijo/a amado/a. En ti me complazco». En medio de las mayores dificultades, muchas de ellas provocadas por nosotros mismos —que seguimos volviendo la espalda a Dios—, Él siempre nos espera, Él siempre nos aguarda: «Consolad, consolad a mi pueblo… Habladle al corazón… Como un pastor, cuida él mismo de sus ovejas…» Pidamos y dejemos que estas palabras se graben hoy en nuestro corazón, y que ellas nos impulsen a «llevar, ya desde ahora, una vida sobria, justa y piadosa, mientras aguardamos la dicha que esperamos» en Jesucristo nuestro Señor.

SÁBADO 8.01.2022
Sábado después de la Epifanía del Señor
Qué hermosa lección de humildad nos deja hoy Juan Bautista en el evangelio. Los discípulos o simpatizantes de uno y de otro han discutido entre ellos para ver cuál es el más importante, Juan o Jesús. Y esta discusión y estas peleas han continuado a lo largo de la historia de la Iglesia entre miembros de una orden religiosa u otra, entre seguidores de un movimiento u otro, o, simplemente entre cristianos de diferentes sensibilidades… Pero algunos fundadores —y otros— no siempre lo han tenido tan claro como Juan Bautista: que él era sólo «el que me han enviado delante de él», «el amigo del esposo»… y, en definitiva, que «Él —Jesús— tiene que crecer y yo —Juan— tengo que menguar». Y, donde pone Juan, podemos ponernos cada uno de nosotros… Pidámoselo al Señor con toda confianza «para que también nuestra alegría esté colmada». Amén.

VIERNES 7.01.2022
Viernes después de la Epifanía del Señor
La fe como aceptación humilde y gozosa de que Jesús es el Hijo de Dios; la fe como confianza total en Él y en la “Salvación que el mundo no nos puede dar”, pero Él, sí; la fe como acogida del Amor revelación del Padre que nos llega por Él; la fe, también, como “perder tiempo” en oración y soledad ante Dios-Padre por Jesucristo, en el Espíritu, como Él mismo hacía… es puerta abierta a la Vida, es sanación, es otra forma de sentir la existencia, es plenitud… es todo lo contrario a tantas “lepras” que pudren nuestras vidas. Con el leproso del evangelio, postrémonos ante Jesús y pidámosle que nos limpie de todas ellas…

JUEVES 6.01.2022
Jueves después de la Epifanía del Señor
Es verdad que en la Iglesia, a lo largo de su historia, ha habido (y hay) muchos defectos y pecados. Pero también es verdad que una corriente, muchas veces silenciosa, de “Buena Noticia”, de “Libertad” y de “Luz” ha acompañado (y acompaña) sus pasos. Así la Iglesia puede decir con Jesús: “hoy se cumplen en mí estas palabras” (de Isaías)… porque, a pesar de todas mis/nuestras deficiencias y traiciones, “el Espíritu está sobre mí”. El Espíritu… esta es la clave. Él hace que “conozcamos” y nos dejemos conducir por el Amor de Dios, y que ese Amor se convierta en nosotros en amor a Dios y al hermano, como nos recuerda hoy san Juan. ¡Que no nos cansemos de invocar y pedir el Espíritu Santo!

MIÉRCOLES 5.01.2022
Miércoles después de la Epifanía del Señor
Señor, tú te has manifestado como palabra que invita a volver los corazones a ti, como salud devuelta a los enfermos, como alimento de vida terrena y de Vida Celestial… y, en el evangelio de hoy, como paz y confianza en medio de “los vientos contrarios y de la noche”. Y esa tu presencia-manifestación se sigue actualizando en quienes con palabras llenas de misericordia invitan a la conversión, en quienes acompañan y sanan enfermos, en quienes ponen paz en medio de las “tormentas”, etc. etc. es decir, en donde las personas se “aman unas a otras”, por encima de teologías, tradiciones o entelequias sobre Dios. Pero también es verdad que, como los discípulos, hoy nosotros tenemos también muchas veces “la mente embotada”… ¡Desembótanosla, danos tu luz… y tu Amor!

MARTES 4.01.2022
Martes después de la Epifanía del Señor
Él nos amó primero, Él nos ha mirado con compasión, con ternura… y nos sigue amando y nos sigue mirando así… y, especialmente en la Eucaristía, nos sigue aguardando para repartirnos el único pan que sacia el hambre profunda de eternidad (y de amor) que todos llevamos dentro, y para recargar nuestra propia capacidad de amar. Pero nosotros, muchas veces, en vez de seguirle verdaderamente a él nos lanzamos detrás de cualquier “gurú” que el mundo actual pone a nuestro alcance. ¡Y hay tantos, y tan variados… y, algunos, tan atractivos! A mí me toca elegir detrás de quién quiero ir, a quién quiero escuchar, de quién me quiero alimentar…

LUNES 3.01.2022
Lunes después de la Epifanía del Señor
Se vislumbran en las palabras de Juan dos grandes dificultades que tuvieron que enfrentar las comunidades cristianas ya desde sus comienzos (y hoy nosotros seguimos teniendo): que Jesucristo es verdaderamente el Verbo de Dios encarnado, y que, creer en Él, no puede separarse del mandamiento del amor al prójimo. Hay en esto una profunda coherencia interna, porque la encarnación no es “jeroglífico” para “sabios y entendidos” sino misterio de amor de Dios por nosotros y, por tanto, creer en él no puede quedar reducido a una “aventura intelectual”: “quien no ama no puede conocer a Cristo”. Misterio de amor de Dios por la humanidad que se manifiesta con toda su fuerza desde el principio de la predicación de Jesús: invitación a la conversión (palabras) y curación de enfermos (obras).

DOMINGO 2.01.2022
La Epifanía del Señor
En el horizonte de nuestras vidas hay muchas estrellas, cada cual más deslumbrante… Pero hay algo que en ellas no “funciona” porque cada día nos encontramos con más vidas vacías y rotas… Las verdaderas estrellas o, mejor, la estrella verdadera es la que te invita a “salir” de tu comodidad y de tu ordenador, la que te pone en camino, te desinstala y te invita a asumir riesgos, incluso equivocaciones, la que te obliga a preguntar a los otros aun sabiendo que, consciente o inconscientemente, te pueden utilizar o engañar… La verdadera estrella es la que también, y paradójicamente, te hace pasar por la oscuridad de “perderla”… Pero la que te hace, al final (y en el camino), reencontrarte con las cosas “normales y sencillas” de la vida (una madre y un niño) descubriendo en ellas una Presencia que antes no veías, pero que ahora sí, porque has hecho un camino que ha cambiado tu corazón y tu mirada…

SÁBAD0 1.01.2022
Santa María, Madre de Dios
Cada primero de año, la Iglesia celebra a María como Madre de Dios, como la puerta por la que Dios entró en el mundo en nuestra carne mortal… Es una invitación a que también nosotros, con toda la Iglesia, “pasemos” por ella al entrar en este nuevo año que Dios pone ante nosotros… Pasemos por ella teniéndola por madre con la que compartimos y a la que confiamos la vida, teniéndola por protectora en las luchas y adversidades, teniéndola por guía en las encrucijadas de los caminos, teniéndola por compañera que nos lleva a Cristo… y aprendiendo de ella a “guardar y a meditar en nuestro corazón” todo lo que el año nuevo nos vaya deparando. Que su compañía y amor sean fuente de Paz y Bendición para todos nosotros en Jesucristo, su hijo, nuestro Señor. Amén.

VIERNES 31.12.2021
7° día de la Octava de Navidad
Hay que reconocerlo: si te paras a pensar intentando entender humanamente el misterio de la Encarnación, es una locura, un imposible… Que Aquél que era la Palabra Eterna del Padre, que Aquél por el que todo fue hecho tome nuestra carne mortal en el vientre de una mujer… que no, que no que no puede ser… Por eso muy pronto, en las comunidades cristianas empezaron a surgir “anticristos” —nos dice la primera lectura de hoy—, que intentaron hacer “comprensible” el misterio de Cristo y que, por tanto, lo “rebajaron”… Pero por un “Cristo rebajado” no habría merecido la pena dar la vida… Y un “Cristo rebajado” no hubiera sido nunca fuerza y luz como ha sido en la vida de tantos testigos y mártires… Sí, el misterio de la Encarnación es locura, pero locura de Amor, que se “entiende” no con la cabeza, sino con el corazón… Sólo quien ama de verdad puede conocer a Cristo…

JUEVES 30.12.2021
6° día de la Octava de Navidad
«Y el mundo pasa con sus pasiones». El coronavirus nos lo está recordando una y otra vez. Pero no parece que queramos aprender… ¿O tendremos el corazón tan endurecido que no podemos ya aprender? El contraste lo pone la liturgia de hoy en la figura de Ana: una mujer viuda y anciana que vivía sirviendo y esperando al Señor… Y el Señor la regaló, —como un anticipo del Cielo—, la revelación de quién era aquel niño que sus padres habían presentado en el templo… El mundo con sus pasiones nos promete inmediatamente el cielo, pero, con la misma inmediatez, este “cielo” deja el corazón y la vida vacíos… El Niño de Belén nos promete el Cielo, pero antes hay que caminar con Él, un largo camino de crecimiento en gracia y sabiduría —como él mismo caminó—, y que no siempre es fácil… Pero un camino (una fe) que da ya en este mundo la fuerza, la certeza de que éste es el Camino y que no hay otro que conduzca a la verdadera felicidad. También hoy nosotros, con Ana la profetisa, damos gracias y alabamos a Dios por el don de este Niño…

MIÉRCOLES 29.12.2021
5° día de la Octava de Navidad
El misterio de la Encarnación pasa por nuestra carne mortal, pasa por una familia (la Sagrada Familia) y también por un pueblo con sus ritos y tradiciones religiosas. Jesús fue un verdadero judío y nunca renegó de su condición de tal. Y, así, judío, es llevado por sus padres para presentarlo en el templo de Jerusalén. Un niño judío más. Y, sin embargo, bajo aquella “rutina”, no había un niño más, sino la Luz y el Salvador del Mundo. Una realidad que escapa a la mirada común de las gentes, pero no a la del anciano Simeón “iluminado por el Espíritu Santo”. También nosotros, creyentes, necesitamos esa iluminación del Espíritu para descubrir, en la rutina y en el dolor de nuestra vida, la presencia y el paso del Señor. Pidamos cada mañana, cada día, cada nueva actividad, etc. esa luz, y no olvidemos, al mismo tiempo, nunca el “mandamiento del amor”.

MARTES 28.12.2021
Los Santos Inocentes, mártires
Y Herodes sigue buscando al “niño” para matarle… Ellos, los niños, son la parte débil en la que siempre se ceban, consciente o inconscientemente, los mecanismos de poder de todo tipo… Ellos son como el pararrayos sobre el que cae la maldad del mundo… El Gólgota siempre presente en medio de la historia… Y por eso, no sólo son víctimas inocentes, sino Santas Víctimas Inocentes. Hay una presencia especial del Señor en todo inocente que muere víctima del abuso humano. Y san Juan, en la primera lectura de este día, nos recuerda además que los verdugos no siempre son los otros, que “el que dice que no ha cometido pecado se engaña”, que no podemos ir por la vida ajenos al sufrimiento de estos inocentes, y que, por tanto, orar, pedir perdón, hacer penitencia por ellos… tiene que formar parte de nuestro caminar a la Luz de Cristo, el Inocente que ofreció su vida por los culpables… por nosotros…

LUNES 27.12.2021
San Juan, apóstol y evangelista
A fuerza de hacer teología desde los despachos hemos convertido a Jesucristo en una idea y sobre esa idea hemos vertido nuestras obsesiones y raquitismos. Pero Jesús, nos lo recuerdan las lecturas de esta fiesta, no es una idea, es una EXPERIENCIA… una experiencia de encuentro “junto a la tumba”. Hay que salir de los despachos confortables, de las mesas con aire acondicionada, y adentrarse en la vida de las gentes que sufren y luchan, para “sentir” y experimentar la Vida de Aquél que hace ya 2021 años tomo nuestra carne mortal para llevar nuestra carne mortal a la plenitud de la Vida y del Amor… y que Resucitado vive para siempre.

DOMINGO 26.12.2021
La Sagrada Familia, C
Como padres, como pastores o, simplemente, como personas individuales, tarde o temprano tendremos que aprender, con dolorosa experiencia, que los hijos no nos pertenecen, que los feligreses no nos pertenecen, que, ni siquiera, nuestros proyectos humanos nos pertenecen… que, o buscamos en todo la voluntad de Dios, o todo se vacía de sentido y acaba por precipitarnos en la neurosis y el hastío… No es fácil. No les fue fácil tampoco a María y a José, pero ella hoy nos muestra el camino cuando nos dice el evangelista que «su madre conservaba todo esto en su corazón». Conservar en el corazón, ponerlo en la presencia de Dios, pedir luz y fuerzas, y confiar, siempre confiar… sin perder la caridad.

SÁBADO 25.12.2021
Navidad: Misa del día
«Qué hermosos son… los pies del mensajero… que anuncia la buena noticia». Navidad son los pequeños o grandes gestos de amor y servicio que podemos hacer cada día; Navidad es el rechazo de la violencia o de la venganza cuando me siento tentado por ellas; Navidad es saber abajarse y hacerse humilde ante el desconocido o el que no piensa como yo… En cada uno de esos gestos Dios sigue naciendo; en ellos, el creador del Universo se nos hace cercano; a través suyo, Dios nos sigue mirando con ternura y sonriendo… Pero Navidad es también el “mensajero” que sabe decir gracias; el “mensajero” que sabe valorar a los demás; el “mensajero” que ayuda a descubrir a los otros todo lo bueno que ya hay en sus vidas y lo bueno que con ellas realizan; el “mensajero” que sabe ofrecer una sonrisa, un gesto de ternura, una palabra de cariño… Que el Señor nos ayude a ser “mensajeros de buena noticia”, a ser Navidad para los demás…

VIERNES 24.12.2021
Adviento: 24 de diciembre
Qué poco podía imaginar Zacarías que un día tendría un hijo que llegaría a ser el “profeta del Altísimo”… Qué poco podía imaginar David en que se convertiría el templo que él deseaba para Dios… Detrás de nuestros pequeños o grandes sueños, siempre hay un sueño mayor, el Sueño de Dios para nosotros y por nosotros, el Sueño que pasa por Belén y el Calvario… Que esta noche ante el Portal, en estos tiempos en que nuestros sueños humanos están tan rotos, la contemplación del Niño-Dios nos abra al Sueño de Dios por nosotros…

JUEVES 23.12.2021
Adviento: 23 de diciembre
En la víspera de la Nochebuena, la figura de Juan, el hijo de Isabel y Zacarías, el precursor, como el mensajero anunciado por el profeta Malaquías, nos invita a adentrarnos en el misterio de lo “imposible”, a salir de los caminos trillados de todos los días, a preparar nuestro corazón y nuestra vida, para recibir al Señor. En estos tiempos en lo que lo “folclórico” de la Navidad se ve imposibilitado o mermado por el Covid, se nos ofrece la posibilidad de dedicar, al menos un poco más tiempo a lo esencial… Señor, enséñame tus caminos; Señor, reconcíliame con quien estoy separado; Señor, despréndeme de lo superfluo y de lo banal; Señor, abre mis ojos a tu presencia y a tu llamada…

MIÉRCOLES 22.12.2021
Adviento: 22 de diciembre
Impresiona la humildad y la generosidad de esta Ana que cede al Señor de por vida el hijo tan largamente deseado… Ella prefigura la humildad y generosidad de María en su maternidad divina, así como su canto de alabanza (cf. salmo responsorial) prefigura el Magníficat (cf. evangelio)… Y ambas mujeres nos dejan el testimonio del sentido trascendente de la vida y de su fe profunda en el Dios de los pobres y los humildes… Cuándo faltan esta fe y esta trascendencia de la vida ¿con qué horizonte luminoso y de sentido educamos a nuestros hijos?

MARTES 21.12.2021
Adviento: 21 de diciembre
La alegría del esposo que, después de larga ausencia, trotando por las montañas se acerca a la casa de la esposa; la alegría de ésta que le espera con ansia y siente su cercanía; o la alegría de la ciudad que ya no se siente amenazada por sus enemigos y puede vivir en paz… son signo y anticipo de la Alegría que lleva María en su vientre y en su corazón cuando corre por las montañas de Judá al encuentro de Isabel… La Alegría de quienes abren su vida y su corazón al Dios que vino a habitar en medio de nosotros en carne mortal… Fuente, sostén y purificación de las ”ordinarias” pequeñas o grandes alegrías de la vida…

LUNES 20.12.2021
Adviento: 20 de diciembre
Hay palabras que claramente están cargadas de maldad: “¡Te odio!”. Pero por sus aún hay palabras peores: las que van “disfrazadas” de piedad o bondad, pero encierran todo lo contrario. Como las palabras de Acaz ante el profeta Isaías: «No quiero tentar al Señor». Palabras que «cansan a los hombres y a Dios», que oscurecen el horizonte de la vida y de la historia. Pero también hay palabras sinceras y humildes, empapadas de gracia de Dios. Como las de María en el Misterio de la Anunciación: «He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según su palabra». Palabras llenas de luz, palabras que esponjan los corazones y las vidas… Palabras, en definitiva, que siembran a Cristo en el surco de la Historia y hacen avanzar el Reino de Dios… ¿Cómo son tus palabras?

DOMINGO 19.12.2021
Domingo 4° de Adviento
Dos madres abrazándose, compartiendo el gozo de su maternidad. Toda maternidad tiene algo (o mucho) de divino, pero en nuestro caso aún más: por la gracia de Dios, se abrazan una maternidad en la esterilidad y ¡una maternidad divina! El Antiguo Testamento llega a su plenitud en el hijo de María, y Juan, y con él todos los profetas y los “pequeños”, saltan de gozo: ha merecido la pena esperar, Dios no defrauda… aunque sus caminos no siempre los entendamos. María es la nueva Judit que ha vencido al invencible enemigo, la nueva Ester que ha salvado a su pueblo, la nueva Arca de la Alianza ante la cual danzó el rey David (hoy es el pequeño Juan quien danza)… María, pobre y humilde, fuera de los focos de la actualidad y lejos de los centros de poder, es bendita entre las mujeres y bienaventurada. “Agarrados” a su mano y a su corazón recorramos estos últimos días del Adviento hacia la Navidad…

SÁBADO 18.12.2021
Adviento: 18 de diciembre
La “mirada” de Jeremías se alza más allá del desgraciado tiempo presente que le tocó vivir para “mirar” con esperanza hacia el futuro. Es como si el profeta nos dijese: En algún lugar y en algún momento tiene que haber —¡y habrá!— ese rey prudente, justo, pacífico que necesitamos y soñamos. Lo mismo podríamos decir cada uno de nosotros a otros niveles: “En algún lugar y en algún momento tiene que haber —¡y habrá!— ese amor, esa paz, esa justicia, etc. que necesitamos y soñamos… pero que en este mundo no alcanzamos”. La liturgia de estos últimos días del Adviento nos invita a mirar a Jesucristo que nace de María Virgen: Él es la realización de nuestros sueños y anhelos más profundos. Hacia Él converge los deseos del corazón y la historia humana. Mirar a Jesucristo y, al mismo tiempo, hacerle presente con nuestra vida, como José… siendo hombres, personas, buenas… que piensan en el bien de los demás… que aman con verdad…

VIERNES 17.12.2021
Adviento: 17 de diciembre
Una mirada hacia adelante llena de esperanza: la de Jacob frente a sus hijos antes de morir. Una mirada hacia atrás con no muchos santos, y con mucha gente corriente o anónima: la genealogía de Jesucristo. Y ambas perspectivas son una sola en el corazón de Dios. Nuestra esperanza no está en los logros humanos de cualquier tipo, sino en el Amor de un Dios que, por nosotros, “se ha hecho en todo semejante a nosotros menos en el pecado”. Asumir nuestras pobrezas y limitaciones ante Dios es el primer paso para que Él siga naciendo en nuestro corazón… y así mantengamos la esperanza y la fuerza en medio de las dificultades del momento presente.

JUEVES 16.12.2021
Jueves de la 3° semana de Adviento
Una palabra de vida y amor: «Aunque se retiren los montes y vacilen las colinas, no se retirará de ti mi misericordia… -dice el Señor que te quiere». Y una llamada a la responsabilidad: «Pero los fariseos y los letrados… frustraron el designio de Dios sobre ellos». Jesús nace en Belén, pobre y humilde, como signo y ofrenda del Amor de Dios a la humanidad… Y el tiempo de Adviento está ahí, no para que nos perdamos en luces de colores y en encender velas, sino para que preparemos el corazón para acogerle…

MIÉRCOLES 15.12.2021
Miércoles de la 3° semana de Adviento
En la cárcel Juan Bautista vive su “noche oscura del alma”: «¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro?». En un mundo fuertemente secularizado como el nuestro, incluso muchas veces agresivo contra Cristo y su Iglesia, también el cristiano se puede ver asaltado por esta duda: “tenemos que esperar a otro o, simplemente, ya no tenemos que esperar a nadie”. Jesús, en su profundo respeto a la libertad de Juan y a su fe, no responde directamente, le reenvía a los signos que él mismo hace; y así hoy nosotros somos reenviados a los signos que, a través de los siglos los santos, testigos y prolongadores de la obra de Cristo, han dejado en la historia de la Iglesia. «No hay otro Dios fuera de Él». A nosotros de pedir la gracia de la perseverancia…

MARTES 14.12.2021
Martes de la 3° semana de Adviento
En la historia del pueblo de Israel se encadenan muchas veces las actitudes de los dos hijos de la parábola de Jesús en el evangelio de hoy: el que dijo no y luego fue sí, y viceversa. El profeta Sofonías acompañará al rey Josías en su importante reforma religiosa: un no que quiere convertirse en sí. Pero la historia de Israel es mi propia historia, la historia de cada uno de nosotros, en la que a momentos de un sí generoso y sincero suceden otros de frialdad, alejamiento y, quizá, traición. El único hijo cuyo Sí fue siempre y será siempre Sí, es el del Hijo de Dios que por nosotros se hizo carne. Y sólo en Él, mi pobre sí, a veces titubeante, a veces no, puede llegar a ser un gran Sí… «Si el afligido invoca al Señor, él lo escucha». Hoy, Señor, te invocamos…

LUNES 13.12.2021
Lunes de la 3° semana de Adviento
Balac, rey de Moab, tiene miedo de los israelitas y llama a Balaán para maldecirlos, pero de los labios de éste, inspirado por Dios, sólo saldrán bendiciones y el anuncio de un futuro glorioso para Israel. Los cristianos han leído siempre estos oráculos como realizados en Jesucristo. En el evangelio, los sumos sacerdotes y ancianos también miran con miedo a Jesús e intentan imponerle su autoridad, pero quedan atrapados en su propia trampa. La Navidad es el triunfo de los planes de Dios frente los “obstáculos” que los humanos queremos interponerle… Pero no el triunfo del poder, de la fuerza o de la venganza, sino de la humildad, de la debilidad, y del amor que se entrega y perdona… ¡Señor, enséñame tus caminos! Amén.

DOMINGO 12.12.2021
Domingo 3° de Adviento
Ya en el año 2013 el papa Francisco en la Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium escribía: «1. La alegría del Evangelio llena el corazón y la vida entera de los que se encuentran con Jesús. Quienes se dejan salvar por Él son liberados del pecado, de la tristeza, del vacío interior, del aislamiento. Con Jesucristo siempre nace y renace la alegría. (…) 2. El gran riesgo del mundo actual, con su múltiple y abrumadora oferta de consumo, es una tristeza individualista que brota del corazón cómodo y avaro, de la búsqueda enfermiza de placeres superficiales, de la conciencia aislada. Cuando la vida interior se clausura en los propios intereses, ya no hay espacio para los demás, ya no entran los pobres, ya no se escucha la voz de Dios, ya no se goza la dulce alegría de su amor, ya no palpita el entusiasmo por hacer el bien. Los creyentes también corren ese riesgo, cierto y permanente. Muchos caen en él y se convierten en seres resentidos, quejosos, sin vida. Ésa no es la opción de una vida digna y plena, ése no es el deseo de Dios para nosotros, ésa no es la vida en el Espíritu que brota del corazón de Cristo resucitado.» Las gentes preguntaban a Juan Bautista: «Y, nosotros ¿qué tenemos que hacer?». Que en este domingo también nosotros nos planteemos esta pregunta delante del Señor: «Y, yo, Señor, en este momento de mi vida, ¿qué tengo que hacer para que Tú alegría esté en mí y, a través mío, en los demás?».

SÁBADO 11.12.2021
Sábado de la 2° semana de Adviento
Camino del Adviento, camino de esperanza y de conversión… Y, en el camino, como señales indicadoras, la voz de los profetas… A veces llenas de ternura y cariño (Isaías, Baruc…), a veces, como fuego (Elías, Juan Bautista…)… Para despertarnos de los falsos sueños en los que vivimos, para recordarnos dónde nos “jugamos” la vida… Y, en definitiva, para que miremos, escuchemos, descubramos, amemos a Jesucristo, y nos dejemos envolver y empapar por su gracia y su amor…
Él es la alfa y la omega, el principio y el fin del Universo, por Él todo fue creado y a Él todo converge… ¡que no lo olvide nunca, Señor!

VIERNES 10.12.2021
Viernes de la 2° semana de Adviento
Dolor del corazón de Dios por aquel pueblo que no quiso atender sus mandatos, y por sus consecuencias negativas… Dolor del corazón de Jesús por sus contemporáneos que no quisieron escuchar a Juan Bautista ni a él mismo… Dolor de Dios, dolor de Jesucristo, como (salvando la distancia) el dolor de los padres que ven que sus hijos rechazan sus consejos y su experiencia, y acaban estrellándose en la vida. Dios no castiga, ya nos castigamos nosotros mismos en la medida que nos apartamos de sus consejos; al contrario, Dios se duele con nuestros pasos errados… y siempre tiene abierta la puerta para que volvamos a él… Niño pequeño en una cuna u hombre adulto clavado en una cruz…

JUEVES 9.12.2021
Jueves de la 2° semana de Adviento
De nuevo la ternura de Dios hacia su pueblo, tantas veces infiel, —como tú y como yo—, se nos cuela en el oráculo de Isaías, para consuelo de todos nosotros, pobres pecadores, tan necesitados de esa ternura de Dios. Y junto a la ternura, lo imposible: ríos en cumbres desoladas, árboles frondosos en el desierto… Porque si Dios es Dios, ¿qué podemos decirle nosotros, pobres mortales? De orgullosos y sin sentido es intentar decirle a Dios lo que tiene o puede hacer. Y, como un signo de esa vida y de ese imposible que brota en el desierto: Juan el Bautista. El desierto con su vida de silencio, oración y austeridad afina los oídos y la vista del corazón «para que vean y sepan, reflexionen y aprendan de una vez, que la mano del Señor lo ha hecho, que el Santo de Israel lo ha creado». Es decir, aprender a leer lo teológico que está profundamente presente bajo la apariencia de las cosas. Así Juan se convirtió en el precursor del Mesías: “vio lo que otros no vieron”.

MIÉRCOLES 8.12.2021
La Inmaculada Concepción de María
Llevamos muchos años educando (?) en el “yo” y olvidándonos del “nosotros” que, hoy, muchas personas se “ahogan” en la vida. El “yo” sin el “nosotros” no es posible, se muere… El “yo” sin el “nosotros” provoca la envidia, el afán de poseerlo todo, de saberlo todo y, en definitiva, de ser como Dios… el pecado original del ser humano. Bastaría, muchas veces, en nuestros planteamientos de vida cambiar la palabra “yo” por la palabra “nosotros” para que la “luz” entrase en nuestros corazones. El misterio de la Inmaculada Concepción de María, que hoy celebramos, es el misterio de un “yo” que se puso entero al servicio del “nosotros”… Desde el principio, Dios pensó en María por “nosotros”… Así que en ella contemplamos lo que nosotros estamos llamados a ser… Por ella nosotros hemos obtenido al Autor de lo que estamos llamados a ser… Y en ella nosotros encontramos el auxilio que necesitamos para “llegar” a ser lo que estamos llamados a ser… Por tu humilde y grandísimo «servicio», ¡gracias María!

MARTES 7.12.2021
Martes de la 2° semana de Adviento
Jesucristo es el rostro de la misericordia divina, el que «vino a buscar lo que estaba perdido», el que «no quiere que se pierda ni uno de estos pequeños»… Rostro de la misericordia divina que ya aparece en hermosos textos del antiguo Testamento, como el de la primera lectura de hoy… Rostro ante el que se estrellan los que van de orgullosos y autosuficientes, los que prefieren vivir de la ley y de la norma… «Pero la palabra de nuestro Dios permanece para siempre», y esta es una palabra de salvación por Su misericordia, que no busca «perfectos», sino «humildes y sencillos de corazón», como María, madre de la misericordia, a la que mañana celebramos en el misterio de su Inmaculada Concepción, o como José, padre de la misericordia, al que hemos recordado a lo largo de este año a él dedicado, y que mañana se cierra… La misericordia es una de esas grandes puertas por las que Dios entra en tu vida y en el mundo en la medida que la practicas… por Su misericordia.

LUNES 6.12.2021
Lunes de la 2° semana de Adviento
No se trata sólo de imágenes poéticas de Isaías para expresar el gozo de la próxima liberación. Se trata de una intuición-revelación profunda: lo mismo que nuestros comportamientos abusivos y pecadores afectan a todo nuestro entorno ecológico, —¡y hoy lo sabemos, y padecemos, bien!—, la segunda venida del Señor no será para llevarnos al Cielo, sino para instaurar el Cielo en el Universo: ¡Qué hermosura no será! La curación física del paralítico y el perdón de sus pecados —para escándalo de escribas y fariseos—, de esta integralidad de la salvación en Cristo también nos habla… Pero hoy también como entonces, nuestro mundo, —y muchos cristianos con él—, acepta la dimensión social y caritativa de la Iglesia —el hacer—, pero desprecian su poder de perdonar los pecados en nombre del Señor —el ser—, y así nos alejamos de la verdadera salvación que Cristo nos vino a traer…

DOMINGO 5.12.2021
Domingo 2° de Adviento, ciclo C
Todos cometemos equivocaciones en la vida. Pero lo peor no es la equivocación en sí misma, sino el permanecer el resto de la vida anclados en ella y lamentándola, dándole mil vueltas en la cabeza y gastando en ello unas energías que sería preciosas para construir algo nuevo. Baruc invita al pueblo de Israel a despojarse de «su vestido de luto y aflicción» —importante: de la mano del Señor— por aquel desastre que fue el Exilio de Babilonia. Y Juan nos invita a salir de los «valles y colinas» que nos impiden caminar en la vida, —con el corazón esponjado—, para dejarle paso al Señor. Lo mismo: ¡No te dejes atrapar por tus equivocaciones en la vida, ponlo en las manos de Dios, pide perdón, aprende, y con Él en tu corazón, sigue caminando! Y como ejemplo, Pablo quien pudo pasarse toda su vida lamentando su ensañamiento contra los cristianos antes de convertirse. Pero no lo hace. El precioso texto de la segunda lectura de hoy es un ejemplo. Pablo, además, cuando lo escribe, está en la cárcel, probablemente en Éfeso, pero su texto rezuma cariño, ternura, confianza, positividad, gratitud, espíritu orante, esperanza… ¡Danos Señor también a nosotros esta gracia!

SÁBADO 4.12.2021
Sábado de la 1ª semana de Adviento
Detrás de los oráculos proféticos llenos de esperanza hay una convicción profunda: la última palabra sobre Israel (y por extensión, sobre la humanidad) no la tienen los acontecimientos ni las situaciones desgraciadas sino la voluntad salvadora del Señor que «sana los corazones destrozados y venda sus heridas». Jesús, en el evangelio de hoy, es testigo de esta compasión y misericordia de Dios sobre «las muchedumbres extenuadas y abandonadas, como ovejas sin pastor». Y Jesús no sólo vive la misericordia, sino que quiere asociar a esa misión a otras personas… Adviento es tiempo de esperanza, pero también de misericordia… Quien vive la misericordia hacia los demás, vive ya en Jesucristo…

VIERNES 3.12.2021
Viernes de la 1ª semana de Adviento
Jesús cura a dos ciegos, pero su curación va más allá de lo meramente físico. A través de la luz de los ojos, Jesús les devuelve la luz y el sentido para su vida. Por ello no dejaron de «hablar de él por toda la comarca». Se cumple así, una vez más, en Jesús, el anuncio profético de Isaías de la primera lectura. Y a nosotros que quizá nos falta visión, no por falta de vista, sino por exceso de cosas que nos deslumbran, le pedimos hoy al Señor que nos ayude a apagar esas falsas luces, y que sea él en verdad, nuestra luz y nuestra salvación.

JUEVES 2.12.2021
Jueves de la 1ª semana de Adviento
«Confiad siempre en el Señor, porque el Señor es la roca perpetua» nos dice hoy Isaías. Esta es la verdadera clave de la persona religiosa. Por eso nos advierte hoy Jesús en el evangelio: «No todo el que me dice “Señor. Señor” entrará en el Reino de los cielos». Las apariencias pueden engañar. Hay personas cuya vida religiosa expresa la confianza de una existencia edificada sobre la roca que es Cristo. Pero también hay personas cuya vida religiosa no expresan la confianza en Dios, sino la confianza en el meticuloso cumplimiento y observación de los mismos rezos y devociones como si de un rito mágico se tratara. Son casa construida sobre arena. Aquellos suelen ser personas de paz. Estos, inseguros y escrúpulosos. ¡Señor, ábrenos las puertas de tu salvación!

MIÉRCOLES 1.12.2021
Miércoles de la 1ª semana de Adviento
Jesús devuelve la vista y el oído, Jesús hace andar a los tullidos… Jesús cura el alma y el cuerpo, y da de comer a las multitudes hambrientas… Jesús es buen pastor del salmo y es el Dios que enjuga las lágrimas y nos salva. Aquél cuya bondad y misericordia nos acompaña todos los días de nuestra vida… Pero, de verdad, ¿lo creemos así, lo vivimos así…?

MARTES 30.11.2021
Solemnidad de San Andrés, apóstol
«Hermosos pies» los del apóstol Andrés. Pies que le llevaron detrás de Jesús por los caminos de Galilea y luego por esos mundos de Dios para anunciar el evangelio… hasta los confines de la tierra. Hermosos también sus labios que proclamaron lo que «junto a Jesús había visto y oído». Y el primero, a su hermano Pedro, y luego a otros muchos, hasta dar su vida por Él en una cruz, como Él; aunque en este caso, según la tradición, una cruz en forma de aspa, como el signo de multiplicar. Apóstol san Andrés, multiplica en estos tiempos nuestros, los corazones que acojan a Jesús y lo lleven con sus pies y con sus labios a donde otro corazón esté sediento de Dios.

MARTES 30.11.2021
Martes de la 1ª semana de Adviento
Hoy nosotros leemos las profecías de Isaías y las “vemos” cumplirse en Jesucristo. Pero ¿a qué sonarían estas profecías en su tiempo? Quizá a locura del profeta. Isaías, según nos cuenta la tradición, fue asesinado cortándole por la mitad. Jesús hoy en el evangelio nos dice que el misterio profundo de la vida (que en él se nos ha desvelado) queda escondido a los sabios y entendidos de este mundo. Que se necesita otra actitud, otra sabiduría… la de los pobres y humildes, la de los sencillos de corazón… la de “los ojos que —mirando— ven” y por ello son bienaventurados. En el camino del Adviento pedimos saber contemplar a Jesucristo con unos ojos (y un corazón) así… Él es nuestra única y gran esperanza…

LUNES 29.11.2021
Lunes de la 1ª semana de Adviento
El profeta Isaías es uno de los grandes personajes del Adviento, profeta de la esperanza. A Isaías le tocó vivir la caída del Reino del Norte en manos de los asirios y la amenaza sobre Jerusalén. «Al final de los días…». La última palabra sobre la historia no la tienen los asirios ni los poderes del mundo, sino Dios. De ahí la invitación que nos deja al final del texto de la primera lectura: «Caminemos a la luz del Señor». Dejemos que su luz en nuestros corazones nos llene de cariño a cuantos nos rodean, de confianza en Dios y en su poder, y de humilde caminar en su presencia… Y, como ejemplo, hoy el evangelio nos trae no un piadoso judío, sino un pagano del ejército opresor: un centurión romano… ¡Para pensar y desinflar todos nuestros orgullos! Sólo en Dios está, puede estar y debe estar, nuestra esperanza…

DOMINGO 28.11.2021
Domingo 1° de Adviento, ciclo C
Jesús nos habla hoy en el evangelio de la «angustia de las gentes» y del «desfallecimiento de los hombres por el miedo»… Y uno piensa en las veces que estas palabras de Jesús se han hecho (y se hacen) realidad en la vida de las personas y en la historia del mundo. Pero Jesús añade algo que sobrepasa nuestras fuerzas humanas y nuestra capacidad de comprensión, y que pone patas arriba las meras capacidades y expectativas humanas: «Cuando empiece a suceder esto, levantaos, alzad la cabeza; se acerca vuestra liberación». Este es el misterio del Adviento: en la noche de los tiempos, en la oscuridad de los acontecimientos que nos sobrepasan y nos angustian, cuando el ser humano experimenta su limitación y fragilidad… Cristo no nos deja solos, salió (en la Navidad), sale (en cada persona y acontecimiento) y saldrá (al final de los tiempos) a nuestro encuentro, para darnos la plenitud de la Paz, la Vida y el Amor… si le dejamos. Por eso también nos advierte Jesús: «Tened cuidado de vosotros, que no se emboten vuestros corazones…». Cuidemos nuestro corazón en estos días del Adviento bajo la amenazadora sombra del Covid, y pongámonos en las manos del único y verdadero salvador que es Jesucristo.